9 julio, 2023
Se trata de una de las 1500 copias impresas un mes después del Congreso de Tucumán del 9 de julio; la encontraron agentes de AFIP en una librería porteña donde realizaron un operativo para hallar un manuscrito histórico robado de una universidad y reclamado por el gobierno de Perú
Un allanamiento en una librería virtual dedicada a la venta de ejemplares antiguos e incunables que ofrecía un manuscrito de 250 años reclamado por el gobierno de Perú, posibilitó el hallazgo de un documento histórico: una de las 1500 copias de la declaración de la Independencia que, un mes después de magno evento del Congreso de Tucumán, el director supremo, Juan Martín de Pueyrredón, mandó a imprimir para informar al mundo la ruptura definitiva de los vínculos de dependencia política de las Provincias Unidas del Río de la Plata con la monarquía española, el manifiesto de libertad y acto fundante de la República Argentina. El acta original manuscrita, firmada por todos los representantes, ha desaparecido.
Según informó la Dirección General de Aduanas, el operativo encabezado por personal de la dependencia tenía como objetivo la recuperación de un libro manuscrito, escrito entre 1772 y 1773, que había sido sustraído de la Universidad Nacional San Antonio Abad, del Cusco, donde estaba a resguardo. El procedimiento fue fruto de una investigación que fue posible gracias al intercambio de información internacional con el Ministerio de Cultura de Perú.
“Una tarea de investigación detectó que el documento estaba a la venta en una librería virtual especializada en la comercialización de libros raros y antiguos, con sede en Buenos Aires. Fue en ese contexto que la Aduana dio intervención a la Justicia en lo Penal Económico y realizó ocho allanamientos en distintos domicilios del Área Metropolitana de Buenos Aires”, informó el organismo.
En los operativos se recuperaron libros, pinturas y hasta relojes Rolex de oro, todo ello carente de la debida documentación respaldatoria. Entre los tesoros patrimoniales hallados –además del libro que reclamaba Perú, que fue incautado y restituido– estaba el documento impreso de la Declaración de la Independencia Argentina, hecho el 13 de agosto de 1816, un mes después del original.
Se trata de una de las 1500 copias –hoy consideradas originales por la desaparición del original– que llevan un pie de imprenta que las certifica. En los últimos 200 años son pocas las que han sobrevivido en museos y archivos, lo cual las convierte en auténticos tesoros nacionales.
El documento refleja la enmienda realizada el 19 de julio de 1816 por pedido de Pedro Medrano –representante de Buenos Aires en el Congreso de Tucumán–, en una sesión secreta: el diputado había solicitado agregar que no solo seríamos independientes del rey Fernando VII, sus sucesores y sus metrópolis, sino también de cualquier otra dominación extranjera.
En 1916, cuando se preparaban los festejos del Centenario de la Independencia, el presidente Victorino de la Plaza ordenó la búsqueda del acta manuscrita original, sin suerte. Lo mismo hizo cincuenta años más tarde el presidente Arturo Illia, pero el acta original aún hoy sigue desaparecida.
El director de la Aduana, Guillermo Michel, señaló: “Recuperamos una pieza fundamental de nuestro patrimonio nacional que tiene un gran valor histórico y simbólico. Quiero destacar el trabajo de los agentes aduaneros, que evitaron que una parte fundamental de nuestra historia se fugara del país”.
“La recuperación de este documento no solo implica hacer cumplir las leyes aduaneras y velar por el patrimonio cultural. También significa un acto de soberanía nacional, de cuidado de la memoria colectiva de nuestra nación, desde el presente y con arraigo en el pasado, de cara al futuro. La pieza es una fuente primaria para la investigación histórica”, concluyó Michel.
