12 octubre, 2021
Al jefe de Gabinete, Juan Manzur, no le gustaría repetir el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) con el argumento de que la población no percibe de quién le viene la ayuda. En cambio, prefirió modificar con una decisión administrativa el presupuesto para transferir $ 5.250 millones del Ministerio de Desarrollo Social, de un programa llamado Abordaje Territorial, a provincias y municipios.
Quiere que sean los gobernadores y los intendentes quienes repartan la ayuda social cara a cara con los vecinos, en un país con 40% de pobreza. Y así es que este viernes se publicó la decisión en el Boletín Oficial con la firma conjunta con el ministro de Economía, Martín Guzmán. El monto equivale a 525.000 IFE.
El dinero se distribuirá así. Para gastos corrientes (operativos) irán $ 630 millones a provincias y 1.084 millones a municipios. En cuanto a erogaciones de capital (obra pública y otras inversiones en equipamiento, que puede incluir electrodomésticos), girarán 1.237 millones a los gobernadores y 2.297 millones a los intendentes. No está especificado a quiénes les tocará el dinero.
La decisión también dispone que Desarrollo Social transfiera 1.100 millones para gastos de alimentos de organizaciones sociales, que llevan adelante comedores y merenderos. Equivalen a 110.000 IFE, con lo que totalizarían unos 650.000. La ayuda total extra suma $6.500 millones.
En el Gobierno se ha analizado que la falta de movilización de la población por parte de intendentes y movimientos populares en las últimas primarias redujo la cantidad de votos del Frente de Todos. Se verá si se logra revertirlo el 14 de noviembre. Juntos por el Cambio ha advertido que armará un equipo para controlar el clientelismo, aunque también debería monitorear el que sus propios gobernantes también ejercen en provincias como Jujuy.
