7 marzo, 2022
¿Se acuerdan de «Orly» Terranova, el exitoso corredor que alguna vez manejó la cartelería ‘presidenciable’ del exgobernador Mario Das Neves durante el esplendor chubutano que aspiraba a gobernar el país? Bueno, ya en ese entonces el mundo criollo se dividía entre entreempresarios K y anti k, y Orly era un bastión anti. Una guerra no tan fría que fue escalando y por estos día, «Orly» fue procesado por «intento de extorsión» a accionistas del Grupo Indalo, léase Cristobál López.
Concretamente la jueza federal María Romilda Servini procesó hoy al empresario Orlando «Orly» Terranova por tentativa de extorsión a los accionistas del Grupo Indalo en la causa en la que se investigan las supuestas maniobras desplegadas durante el gobierno de Cambiemos para ‘presionar y asfixiar en términos financieros’ al conglomerado de firmas que opera la señal de noticias C5N y Radio 10.
La magistrada le trabó además un embargo por 5.100 millones de pesos y también procesó al directivo de empresas Gerardo Molinaro y al abogado Gustavo Casir, a quien le incautó una suma millonaria, según surge una resolución de 180 carillas a la que accedió Télam.
A los tres procesados se los acusa de haber intentado quedarse con las empresas del Grupo Indalo –principalmente con Oil Combustibles- bajo la amenaza del encarcelamiento de sus principales accionistas, Cristóbal López y Fabián de Sousa, y presentándose como emisarios del gobierno que por entonces encabezaba Mauricio Macri.
Al analizar el encuadre penal de los hechos investigados, la magistrada señaló que se encuentran cumplidos los requisitos para analizarlo bajo el prisma de una extorsión porque pudo probarse “el desplazamiento patrimonial motivado en las amenazas recibidas –de ser privado de su libertad si ello no ocurría -, para lo cual Orlando Terranova se transformó junto con la participación de Gustavo Casir y Gerardo Molinaro en un eslabón fundamental”.
“Orlando Terranova, principalmente, junto con Gustavo Casir y Gerardo Molinaro tuvieron una activa participación en toda esta operación, se montaron en las amenazas que partieron desde los altos cargos del Gobierno que encabezaba Mauricio Macri, lo que denotaba su inminencia y verosimilitud, y se aprovecharon de la situación de vulnerabilidad que estaban atravesando los querellantes, y en base a ello los conminaron a suscribir la Carta Oferta en cuestión, y tomaron a su cargo, principalmente Terranova, toda la operación”, puede leerse en el fallo de 180 carillas con la resolución judicial
Se trata del mismo expediente en el cual se encuentra prófugo el diputado del Parlasur y exdirector de YPF, Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, quien fue llamado a indagatoria por la jueza Servini pero nunca se presentó a declarar.
Hace unos doce años, «Orly» era una de las estrellas chubutanas que había adoptado el imperio dasnevista, siempre en el marco de su puja con el reinado K. De hecho, el piloto de rally y ex candidato del PRO a concejal en Mendoza le dió un caro y contundente soporte publicitario a la alocada campaña presidencial del extinto don Mario Das Neves que se plantó al matrimonio presidencial. Pero ya por ese entonces hubo una pelea que dejó al exgobernador chubutense al medio de las peleas de los grandes jugadores como Manzano.
Por ese entonces una fuerte pelea entre José Luis Manzano y Orlando Terranova, ya amagaba con resultados nefastos. El empresario del Grupo Uno era lobbysta de don Mario y el que le cerraba los negocios petroleros de la zona, decían por ejemplo los kuwaitianos. De hecho, en el reparto de bienes que hizo con su socio Daniel Vila, el ex ministro menemista se quedó con los negocios petroleros.
En esa tarea se cruzó con un el piloto de rally «Orly» Terranova, concecionario además de una de las zonas de mobiliario urbano de la CABA y principal espada del grupo Publicidad Sarmiento que lideraba su padre y su tío, ya por ese entonces procesados y camino a juicio oral por la irregular concesión porteña.
De Manzano, sobran muchas presentaciones, pero históricamente fue «el hombre fuerte de Das Neves» en los negocios petroleros. Una anécdota que contaba LPO grafica hasta dónde llega ese poder. Cuentan en la provincia que cuando los príncipes de Kuwait hicieron saber su intención de invertir en una refinería de Chubut, el gobernador simplemente les habría dicho: “Hablen Con Manzano”.
La “traición” de Terranova
El problema que le surgió ya por ese entonces a Das Neves era que Manzano, junto con su socio Vila, estaban en guerra con Orly Terranova, el empresario al que según confesó el propio gobernador en una entrevista al diario La Nación el 29 de agosto de 2010, le dio una “ayuda” con las gigantografías que promocionan su candidatura a Presidente para 2011. Por supuesto, se apresuró a aclarar que no tenía «ninguna relación contractual ni es proveedor del Estado».
Sin embargo, la UCR de Chubut presentó una denuncia en la que constan 18 órdenes de publicidad durante 2009, cada una por un monto de 39.930 pesos, a favor de la agencia de publicidad OTI, sociedad que está integrada por María Terranova, hermana de Orly y amigo del gobernador Das Neves, según revelaba el propio matutino.
El contacto de Orly se engendró con los Das Neves cuando Mario estaba a cargo de la Aduana en el gobierno de Duhalde y contaba con ‘asesores de lujo’ para agendar vínculos influyentes.
Las idas y vueltas de estos entuertos siempre son por guita ‘dudosas’ aunque siempre del Estado, dicen los entendidos. En aquel tiempo, la volcánica pelea entre Orly y Manzano se originó en Mendoza. Manzano y Vila apoyaron a Orly en su enfrentamiento con el ex secretario de Medios de la Nación, José “Pepe” Albistur, por la cartelería cuyana. Allí -como en el resto del país- a través de sus empresas Publicidad Sarmiento –la del macrista- y Wall Street –la del kirchnerista- se disputaban, con denuncias cruzadas, el millonario negocio de mobiliario.
Pero los socios del Grupo Uno lo pusieron en la lista de enemigos, cuando Terranova decidió abrir, sin previo aviso, su portal de noticias MDZ, iniciativa que vivieron como una traición ya que desde su particular visión de las cosas, entendían que el «negocio de los medios» les estaba reservado.
Esa pata mendocina después tendría su versión chubutana de la mano del siempre vigente multiempresario Jorge Aidar Bestene, que posteriormente con el declive dasnevista comenzó su retirada parcial.
Ahora este procesamiento de «Orly» remueve todos esos recuerdos y lazos, y demuestra que la ‘vendetta’ de los grupos económicos que subyacen tras la política no declina. Después de todo los vientos de los negocios empujan el barco del poder, y viceversa.