13 octubre, 2021
El número de personas que afirma que su salud mental se ha visto afectada ha aumentado como consecuencia de la pandemia. Según un estudio privado 7 de cada 10 trabajadores creen necesario contar con ayuda para la salud mental en el futuro. ¿Tiene que ver solamente con el traumático proceso que generó el Coronavirus o se debe al tipo de procedimientos laborales, el uso de la tecnología y la afectaión de la energía humana?
El bienestar es un factor importante a cualquier edad, tanto para hombres como para mujeres. Y la mitad de los líderes no son capaces de verlo. Entre las generaciones más jóvenes: más de la mitad de los líderes (54%) afirma que ha experimentado agotamiento.
A más de la mitad de los supervisores les resulta difícil identificar cuándo el personal puede estar luchando contra problemas de salud mental (53%) o exceso de trabajo o agotamiento (51%).
Los datos surgen del estudio Resetting Normal 2021, donde participaron 14.800 encuestados de 25 países, entre ellos, Argentina, Bélgica, Brasil, Canadá, China, Dinamarca, México, Noruega, Países Bajos y Suiza.
La salud mental es un factor global y universal que afecta a todos los encuestados, independientemente de la edad y el género. El número de personas que afirma que su salud mental se ha visto afectada como consecuencia de la pandemia es llamativo. Por lo tanto, es un reto futuro clave para las empresas y los líderes.
Las horas de trabajo han aumentado 14% desde 2020 y 63% de los trabajadores indicó que ha trabajado más de 40 horas a la semana en los 12 últimos meses, asi el agotamiento se destaca como preocupación para casi el 40% de los empleados en todas las zonas geográficas.
El deterioro de la salud mental y el bienestar físico arroja otro elemento de desconexión, ya que 7 de cada 10 (71%) afirman que será importante para ellos poder contar con ayuda para la salud mental en el futuro. Casi tres cuartas partes (74%) esperan que su empresa dé más prioridad a este problema.
Sin embargo, no parece que los líderes estén preparados para ayudar con el bienestar de los empleados. Este hecho lo confirman los no supervisores, ya que el 67% de ellos opina que sus líderes no cumplen sus expectativas en cuidar de su salud mental.
“A medida que miramos más allá de la pandemia, mayores expectativas de ayuda para la salud mental han venido para quedarse. Ya era una preocupación creciente antes de la Covid-19 y ahora los trabajadores esperan que las empresas apliquen las medidas correctas para ayudar al bienestar en el trabajo de aquí en adelante”, puntualizó Alexandra Manera, Directora de Recursos Humanos de Adecco Argentina y Uruguay.
El agotamiento podría ser la próxima pandemia laboral, sin dudas, la salud mental es un factor global que afecta a todos los trabajadores, con independencia de la edad y el género. El número de personas que afirma que su salud mental se ha visto afectada ha aumentado como consecuencia de la pandemia.
Las empresas deben reevaluar su ayuda para mantener una buena salud mental entre sus empleados en el nuevo modelo de trabajo híbrido.
Cada vez es más necesario que las empresas establezcan procesos, recursos, coaching y herramientas para fomentar la apertura y escuchar las necesidades de los empleados.