4 julio, 2025
UNA INVERSIÓN DE MÁS DE $20 MIL MILLONES QUE BENEFICIARÁ A 15 MIL USUARIOS EN 25 LOCALIDADES
Los gobernadores de tres povinicias centrales de la Patagonia como Chubut, Neuquén y Río Negro, firmaron el acuerdo de obra de ampliación del Gasoducto Cordillerano Patagónico. «Somos los principales generadores de la energía del país y nuestra gente no tiene gas»
El acto se llevó a cabo en el Salón de los Constituyentes de la Casa de Gobierno, y contó con la participación de los tres gobernadores de la región patagónica, que junto a Torres firmaron el acuerdo de inicio de obra; también estuvieron presentes, intendentes de la Comarca Andina, legisladores nacionales y provinciales, y funcionarios del Gabinete.
La ampliación del Gasoducto Cordillerano Patagónico implica la instalación de dos plantas compresoras en las localidades de Gobernador Costa y Alto Río Senguer, a partir de una serie de gestiones llevadas a cabo por el mandatario junto a sus pares ante los correspondientes organismos nacionales.
Las provincias de Chubut, Neuquén y Río Negro financiarán, en partes equivalentes y con fondos propios, la importante obra cuyo costo asciende a 50 millones de dólares y que será ejecutada por Camuzzi Gas del Sur S.A.
Torres sostuvo que «hoy es un día muy importante, porque no estamos anunciando algo que se va a hacer, sino celebrando lo que se viene desarrollando y con resultados tangibles», y explicó que «cuando hablamos de gasoductos, nos referimos a obras que no se ven, pero que son muy caras y necesarias, y este hermanamiento de las provincias patagónicas nos llevó a que, después de 20 años, podamos estar ejecutando a más del 80% la conexión del Gasoducto Cordillerano Patagónico con el Gasoducto San Martín, para finalizarla en agosto».
La ampliación del Gasoducto Cordillerano Patagónico «es una obra indispensable y fundamental para que, posteriormente, las plantas compresoras puedan garantizar esa factibilidad necesaria» y resaltó que «estamos hablando de una inversión de más de 50 millones de dólares, con una cuarta planta de compresión en la conexión de ambos gasoductos, más las tres que se conectarán desde ahora hasta abril del año que viene», precisó el titular del Ejecutivo.
«El objetivo es que, para el próximo invierno, no se padezcan más los trastornos que la falta de gas genera, como así también contar con un acceso a un servicio indispensable», señaló Torres, destacando que «estamos solucionando una problemática histórica porque tomamos la decisión política de encararla; sería más fácil quejarnos y decir que la obra la debería haber hecho el Gobierno Nacional, pero lo cierto es que nos pusimos de acuerdo y encontramos un esquema de apalancamiento financiero para poder realizar esta obra tan necesaria».
Asimismo, el mandatario hizo hincapié en «la necesidad de una reparación histórica para los patagónicos, ya sean chubutenses, rionegrinos, santacruceños o neuquinos» y planteó que «parece hasta surrealista pensar que, siendo el motor energético de la Argentina, en la región haya pueblos aislados que no tienen acceso al gas; es una injusticia, producto de muchos años de una mirada centralista y unitaria, donde parecería haber dos países distintos».
«Este es un debate de derechos y obligaciones, donde hay un gobierno que dice que tiene que encargarse de la macroeconomía, las relaciones exteriores y la seguridad interior, pero para mantener una macroeconomía estable hacen falta esos dólares que se producen en la Patagonia», detalló Torres, y se preguntó «cómo podemos mirar a nuestra gente y celebrar que generamos la mitad de las divisas que necesita la Argentina, cuando esos pueblos no tienen gas».
«Eso es una injusticia sobre la cual tenemos la responsabilidad moral, como dirigentes patagónicos, de poner sobre la mesa al momento de discutir qué modelo de país queremos», remarcó.
Por otra parte, el Gobernador recordó que «durante los últimos años, bajo la falsa bandera de la soberanía energética, muchos promovieron el precio sostén del barrio, mientras que nuestras provincias estuvieron subsidiando miles de millones de dólares al resto de la Argentina, y mientras no teníamos acceso al gas y al agua, pero hoy hay otra realidad: los patagónicos somos plenamente conscientes de que, para crecer, el país tiene que mirar necesariamente hacia el sur» y agregó que «desde nuestra región, tenemos que defender a la fuerza de nuestra industria, y al esfuerzo de los patagónicos que generan todas esas divisas que tan desesperadamente necesita el Gobierno Nacional».
«Estamos en un momento histórico en el que hay un grito federal que se hace escuchar, y ese grito se da desde el sur de la República Argentina», concluyó Torres.
La ampliación del Gasoducto Cordillerano se enmarca en la Resolución N°2877/03 del Ente Regulador del Gas (Encargas), y la autorización del organismo al proyecto de obras presentado por Camuzzi Gas del Sur «que consiste en la instalación, montaje, finalización y puesta en marcha operativa de las plantas compresoras sitas en las localidades de Río Senguer y Gobernador Costa, provincia de Chubut».
Además, con la Resolución de Encuadre 442 de Enargas, firmada el 30 de junio del corriente año, los Bancos del Chubut y de Neuquén ejecutarán el préstamo a Camuzzi Gas del Sur, quien dará inicio formal a la obra. De esta forma, se avanzará con el montaje de las plantas de Alto Río Senguer y luego de Gobernador Costa, quedando operativas para el próximo invierno, y permitiendo habilitar nuevas factibilidades en el corto plazo.
Las plantas compresoras, cuyo sitio de origen es la localidad de Rosario, Santa Fe, donde permanecieron en desuso durante más de seis años, ya fueron trasladadas a las localidades de Gobernador Costa y Alto Río Senguer, y su implementación permitirá ampliar la capacidad del Gasoducto Cordillerano Patagónico en 300 mil metros cúbicos diarios.
De este modo, el transporte de gas natural ascenderá de 1.200.000m³ diarios en el Ramal Sur, a 1.500.000m³, facilitando el acceso de más de 12 mil viviendas de la región a un servicio básico y esencial, incluyendo localidades cuyas dificultades geográficas y topográficas actualmente dificultan el acceso al suministro, incluyendo hospitales, escuelas e instalaciones públicas.
*PGCH