8 abril, 2025
Hay un trasfondo político en el caso de Elías Piccirillo, ex marido de Jesica Cirio, preso, acusado de plantarle cocaína y un arma al empresario Francisco Hauque, para no pagarle una deuda de 6 millones de dólares. El escándalo parece que apenas empieza y amenaza con estallar con mucho más fuerza durante la campaña electoral.
El financista Elías Piccirillo, el ex esposo de la conductora Jesica Cirio, solicitó ampliar su indagatoria en el caso que lo investiga por la presunta plantación de un arma, según confirmó la Agencia Noticias Argentinas.
Así lo informó su defensor, Francisco Sicilia, quien solicitó que la declaración de su cliente se amplíe «una vez levantado el secreto de sumario para conocer el estado de las actuaciones».
En el escrito, el letrado sostuvo que «se observa un dominó de ‘arrepentidos’ de dudosa sinceridad». La indagatoria podría darse este martes y la expectativa está puesta en lo que diga de nuevo Piccirillo y sobre todo, a quien apunte. Los cañones van derecho a los hermanos presidenciales
Lo concreto es que este martes, la ex pareja de Jesica Cirio tendrá una audiencia clave en la que podría definirse su excarcelación.
Desde el inicio en el que se produjo la detención del mediático, su defensa solicitó su excarcelación, pero la medida fue rechazada ante una posible fuga y entorpecimiento de la causa.
Sin embargo, Sicilia envió un recurso contra dicha apelación y ahora el juez Roberto José Boico autorizó la realización de una nueva audiencia.
La discusión en principio se trata de circunscribir a la estafa y haber organizado un operativo policial falso para concretar el arresto de Francisco Hauque, pero la causa amaga con ir mucho más allá y enchastrar a las ‘castas’ de los principales colores políticos en pugna.
Según la investigación sobre Piccirillo, apodado «el rey del dólar blue», habría una estrecha relación con el lavado de dinero a través de casas de cambio en Argentina según resume el periodista Nicolás Pizzi.
La pieza destaca la cifra de 200 millones de dólares involucrados en sus operaciones, según datos del Banco Central.
Se menciona la investigación de varias casas de cambio, así como vínculos con figuras políticas y operaciones ilegales.
Se discuten las regulaciones del mercado de cambios, el impacto de la economía controlada y las conexiones entre el formal y el mercado negro.
También se aborda la implicancia de la modelo Jesica Cirio, en las investigaciones en curso, ex de Insaurralde, propietaria de más de 40 departamentos y presunta punta de un ovillo de dinero sin justificar que compromete a parte del ex gobierno. En ese contexto, el matrimonio con Piccirillo afirman que habría oficiado de modo de convertir activos difíciles de explicar en ‘bienes gananciales’ patrimonio de la felíz aunque breve unión.
“Cuando Hauque levantó la deuda por la denuncia de criptoestafa, Piccirillo le decía que no pagara así lo perjudicaba a Milei en la campaña presidencial”, dice una fuente que conoce el vínculo de negocios entre los exsocios.
Hauque es dueño de CoinX, una empresa cripto, que Milei promocionó en 2021 cuando era diputado nacional, y fue denunciada por ahorristas.
“Están revolucionando la manera de inversión para ayudar a los argentinos a escapar de la inflación. Desde ya puedes simular tu inversión en pesos, dólares o criptomonedas y obtener una ganancia. Escribanles a CoinX de parte mía, así los asesoran con lo mejor”, había posteado Milei en X.
Una veintena de inversores denunciaron la maniobra en una causa que el juez Ariel Lijo, recientemente designado por el Presidente para integrar la Corte Suprema de Justicia, archivó en 2023, en el año de las elecciones presidenciales.
Los ahorristas colocaron entre mil y 10 mil dólares. La deuda en total rondaba los 40 millones de pesos, según precisó entonces el abogado Juan Pablo Chiesa, que también llevó a la Justicia a las causas Generación Zoe y Vayo Coin.
Entonces a Piccirillo y Hauque los unían los negocios, pero los separaban los intereses políticos. “Piccirillo apoyaba a Sergio Massa y Hauque a Milei”, cuentan. El marido de Cirio -separados de hecho, ella empezó el divorcio cuando cayó detenido- se convirtió en mega millonario en menos de cinco años. Explotó financieramente en 2023.
Todo indicaría que Piccirillo no actuó solo y que de eso se agarraría para tratar de garantizarse su libertad. Investigaciones periodísticas sugieren que funcionarios de alto nivel, posiblemente vinculados a la Aduana y al Banco Central, podrían haber facilitado las maniobras. Esto refuerza la hipótesis de una asociación ilícita para defraudar al Estado. Según la denuncia, Piccirillo habría utilizado los fondos obtenidos mediante estas maniobras para comprar, en junio de 2023, el 19% de las acciones de Valle Fértil S.A., empresa controlante del Banco Sucrédito, con fuerte presencia en Tucumán. Pero también con operaciones en diferentes lugares del país.
«Estamos ante un caso de una gravedad institucional sin precedentes, donde un entramado de funcionarios y empresarios montó un esquema de desfalco al Estado. Exigimos una investigación profunda y que la justicia actúe con celeridad», afirmó Santoro a los medios.
Desde que se casó con la modelo y conductora el 26 de mayo de 2024 en el Palacio Duhau, Piccrillo pasó a ser conocido como “El rey del bue” y “El nuevo Leonardo Fariña”. En el mundillo financiero le adjudican casas de cambio, “cuevas”. “Va a empezar a correr más información sobre una estructura de 20 casas de cambio, seguramente más cerca de la campaña electoral”, dice una fuente. Piccirillo y Hauque se acusan mutuamente de operar amparados por resortes de poder en el Banco Central en la era Sergio Massa. ¿A cuantos podría alcanzar el escándalo? No se sabe, pero dicen que el temor a las implicancias es importante a lo largo y ancho del país.
Según un informe de Migraciones adjuntado al expediente las salidas del país del acusado hacen especular con gestiones de dinero en el exterior y lavado. Desde el 2021 hasta febrero de este año, Piccirillo viajó 41 veces al exterior. Muchos de esos vuelos eran en aviones privados y hubo destinos en los que estuvo menos de 48 horas.
Cuando Piccirillo daba un salto con la compra de acciones del Banco Sucrédito, Ivo Rojnica, apodado “El Croata” y acusado de ser el dueño de una de mayores cuevas financieras que operaban dólar blue, era detenido el 24 de octubre de 2023, dos días después de la primera vuelta electoral. El candidato a presidente más votado fue Sergio Massa (Unión por la Patria) con el 36,6% de los votos. En segundo lugar quedó Javier Milei (La Libertad Avanza) con el 29,9%.
La operatoria con las cuevas consistía en simular importaciones a través de autorizaciones que daba la Aduana -certificados SIRA- y vender los dólares al valor blue. La brecha en octubre de 2023 llegó a ser del 200%. Picirrillo habría sumado la increíble suma de un millón de dólares diarios de ganancia. ¿Era toda de él? Poco probable…
Piccirillo llegó a Sucrédito de la mano de Jorge Blanco, dueño del Banco con actividad financiera en Tucumán desde 2006. El 8 de agosto de 2024, Piccirillo, Blanco y el conductor Marley visitaron al gobernador Osvaldo Jaldo en la Gobernación de Tucumán para promocionar la tarjeta Sucrédito. En diciembre, Piccirillo denunció a Hauque por extorsión y ofreció a Blanco como testigo.
Cuando Piccirillo fue detenido, el Banco se despegó: “SuCrédito, entidad financiera comprometida con la transparencia, la ética y la responsabilidad social, emite el presente comunicado en virtud de los recientes acontecimientos mediáticos relacionados con el Sr. Elías Piccirillo. En este contexto, se precisa que el Sr. Piccirillo nunca fue accionista ni director de Banco Sucrédito. Su relación con la entidad fue exclusivamente profesional, desempeñándose como Gerente de Desarrollo durante un periodo de 10 meses, finalizado el 12 de diciembre de 2024″. Sin embargo, el Boletín Oficial acredita que Piccirillo compró acciones de Sucrédito.
La maniobra no habría sido exclusiva con el Banco de Tucumán, y la investigación amaga con quitarle el sueño a varios responsables de gestiones anteriores en las más variadas provincias de norte, centro y sur del país.
Ahora, la Justicia abrió a la fuerza dos cajas fuertes porque Piccirillo se negó a dar las claves y afirman que podría haber novedades en la causa y documentación comprometedora: ¿otro detenido ofrece ser imputador colaborador? Ya hay uno: un policía de la Ciudad que admitió haber participado en la causa armada. Ese uniformado declaró que un ex de la Federal Sebastián “El Lobo” Smith que trabajaba para Piccirillo, los contactó para detener a Hauque.
El nexo, según la Justicia, fue el comisario de la Brigada de Robos y Hurtos de zona norte, Iván Helguero. Hay seis policías detenidos por el caso. La incógnita es si Smith ¿para beneficiarse? aceptaría ‘contar todo’ como nuevo imputado colaborador.
Smith aparece en videos visitando la casa de Piccirillo en Nordelta después del operativo en el que cayó Hauque. El abogado de Piccirillo denunció una maniobra para “comprar imputados” y sospechan que la cosa irá empeorando.
La trama que amaga con ser la punta del iceberg de las operatorias financieras que podrían llegar hasta Massa y la exgestión nacional, pero abrir un ‘ventilador’ con implicancias inimaginadas, tiene aristas increíbles. En la última cena, de la supuesta traición, en el Palacio Duhau armada por Piccirillo para que la policía detuviera a Hauque y su esposa Anahí Aquino, un detalle llamó la atención de los investigadores. Piccirillo dijo que Cirio llegaría de un momento a otro a la velada, pero después se fue de apuro e incluso se llevó la comida.
Dicen que ya el mozo le había traído el salmón. Pero Piccirillo atendió el celular y dijo que hablaba con su esposa, que no está imputada en la causa: “Osa, ya voy para allá”, se excusó ante la pareja. “La Osa se siente mal, me tengo que ir”, les dijo a Hauque y Aquino, antes de entregarlos al operativo armado. Le pidió al mozo que le arme un paquetito con el salmón y ‘el oso’ salió por el subsuelo del Palacio Duhau. Peculiar apodo para alguien señalado como “cuevero”, reflexionaron los que aún le ponen humor a las desgracias criollas que conjugan poder, estafas con dineros públicos, política y farándula.
Como dijera Tato: «Vermú con papas fritas y good show!»
