17 mayo, 2021
A finales de mayo recibiría la materia prima por parte del Instituto Gamaleya para elaborar un millón de dosis del primer componente y otro millón del segundo componente. En Gobierno estiman que en julio se aceleraría la producción y así lograr completar la inmunización de la población de riesgo objetivo.
Un avión de Aerolíneas Argentinas ya arribó a Moscú para buscar más vacunas Sputnik V. La ministra de Salud, Carla Vizzotti, confirmó el martes que el país estima recibir cerca de 5 millones de dosis de AstraZeneca, de las cuales 861.600 corresponden al fondo Covax.
Pero una de las aristas de estas negociaciones que más hincapié ha puesto el Gobierno en las últimas semanas es en la producción propia de vacunas. Se han iniciado negociaciones con China para fabricar la Sinopharm y también con Israel.
En paralelo a esos diálogos, el presidente Alberto Fernández, desde Europa, escuchó una buena noticia. El laboratorio Richmond avanza en la producción local de la Sputnik y se estima que en junio se podrá contar con 2 millones de esas dosis, producción que se aceleraría en el mes de julio, según confiaron fuentes de la cartera sanitaria a Data Clave.
El martes circuló la información de que el Instituto Gamaleya había aprobado a la farmacéutica que dirige Marcelo Figueiras para avanzar en la producción. Desde el laboratorio detallaron que “es un proceso que lleva su tiempo y que marcha tal como estaba previsto”.
En estos momentos, en Rusia se analizan las primeras 21 mil dosis de la Vacuna de Inmunización para el Desarrollo Argentino (V.I.D.A.). Y según pudo averiguar este medio, a finales de mayo el instituto Gamaleya le enviará a Richmond la materia prima para elaborar un millón de dosis del componente 1 y otro millón del componente 2.
Esas dosis deberán regresar a Moscú para una última aprobación, pero desde el laboratorio argentino señalan que “el material elaborado en Buenos Aires responde perfectamente a los parámetros requeridos por los creadores de la Sputnik”. El procedimiento tiene que ver con efectuar un “exhaustivo análisis para corroborar que el componente que fermentaron, sea efectivo”, pero desde Argentina son más que optimistas respecto al resultado de cada uno de estos pasos. “No existe una única aprobación, es un intercambio constante de transferencia de tecnología”, agregó una fuente cercana al proceso de producción de la versión criolla de la Sputnik.
En tanto, desde el Ministerio de Salud confían en que “se viene la etapa en la que comienza a producirse en grandes cantidades para preparar los lotes comerciales que luego se podrían empezar a distribuir”.
El Gobierno ya aprendió, con la experiencia, a no precipitarse con las fechas. No obstante, sostienen que el objetivo es que “en el mes de junio, esas vacunas ya estén listas para ser aplicadas a la población objetivo”.
Actualmente, y según los números del Monitor Público de Vacunación, la cartera sanitaria ya ha distribuido a todas las provincias 11.373.872 vacunas y se han aplicado 9.495.304: 7.897.327 de la primera dosis y 1.597.977 del segundo componente.
*DC