10 julio, 2021
Flexibilidad en las reservas, tarifas accesibles y protocolos Covid-19, las estrategias de las empresas relacionadas al turismo en este invierno 2021
Con un 40% de la población vacunada con la primera dosis, el gobierno aseguró que no habrá restricciones para viajar por el país. Ante este nuevo escenario, los empresarios del turismo dicen estar listos para recibir al turismo que ahora, coinciden, organizan viajes más cortos, con reservas de último momento y a destinos alejados de las concentraciones de población para evitar posibles contagios.
Juan Manuel Zorraquín, CEO de Puerto Bemberg, un hotel que funciona desde 2008 en una antigua casona anclada en la selva misionera entre el río Paraná y las Cataratas del Iguazú, redujo sus precios un 45% para incentivar las ventas. «Hoy el precio de una habitación arranca de los $ 7900 finales, pero además, como no vienen extranjeros estamos trabajando en pesos; antes de la pandemia el valor arrancaba de los u$s 135», remarca. Para estas vacaciones de invierno el empresario está enfocado en el turismo misionero ya que cree que apostar por el turismo nacional es un riego. «Para el fin de semana largo del 25 mayo nos pasó que teníamos todo reservado, pero por las restricciones de circulación se nos cayeron el 80 %. Hay mucha volatilidad en la reserva. Además, en 2019 teníamos 23 vuelos diarios a Iguazú, y ahora tenemos solo dos. No veo que tengamos una temporada de turismo nacional fuerte», opina Zorraquín.
Según el Observatorio Argentino de Turismo (OAT), en el primer trimestre del año se contabilizaron 45.400 ingresos de pasajeros no residentes al país lo que representó una caída de 93,2% anual y de 94,6% respecto al mejor primer trimestre del último quinquenio.
Desde Ushuaia (Tierra del Fuego) Patricio Cornejo, socio gerente de la agencia de expediciones Tierra del Fuego Aventura lamenta la pérdida del turista extranjero que le generaba un volumen de negocio mayor. Sin embargo define como ganancia la llegada de nuevos pasajeros argentinos.
«Son personas que antes de la pandemia viajaba a las capitales del mundo y ahora miran a Tierra del fuego y Ushuaia como un ‘destino internacional dentro de la Argentina’. Esto es algo que supimos atender y tradujimos en una altísima gama de servicios turísticos con tarifas congeladas de diciembre 2019», destaca el empresario que ofrece expediciones desde $ 3800.
Como resguardo para los clientes, pero que también le sirve a la empresa para mantener un flujo de caja, lanzaron el programa de «compre hoy y viaje cuando quiera o pueda».
También, para recuperar el nivel de actividad que tenían antes de la pandemia (facturaban alrededor de $ 27 millones), invirtieron $ 19 millones en tecnología para digitalizar la operación de la agencia y en dos mini buses con capacidad para 24 pasajeros. Cornejo cree que tendrá una buena temporada de invierno y, si su pronóstico no falla, calcula que para diciembre podría duplicar su facturación actual que ronda los $ 5 millones.
En San Patricio del Chañar (Neuquén) desde 2002 funciona la Bodega Familia Schroeder elaborando y comercializando sus vinos, ofreciendo visitas guiadas por el predio y ofreciendo servicio gastronómico de su restaurante Saurus.
Pero, desde la pandemia y para dar seguridad a sus clientes se manejan exclusivamente con reservas. Para las visitas a la bodega (están expuestos los restos de un dinosaurio) se manejan en grupos de seis ($ 500 por persona que se reintegran contra compra en el wineshop) y para el interior del restaurante 45 por turno, aunque este año reabrieron con Saurus Garden, una propuesta 100% al aire libre con vista a los viñedos.
«La inversión rondó los $ 500.000 y se destinó a mobiliario, utensilios, mantelería, cubiertos plásticos y todo lo relacionado a la higiene que exigía el COVID como así también un «techo» especial para tener sombra», cuenta Roberto Schroeder, presidente de la bodega.
En 2019, último año de actividad completa, la bodega recibió a 9000 visitas y en 2020 solo 2000. «Las pérdidas en el restaurant fueron de $8 millones, fue gracias a que la familia Schroeder posee otras unidades de negocios no hubo que cerrarlo», cuenta el empresario quien que en 2020 vendió 1,7 millones de botellas y para este año espera superar los dos millones.
Desde Agrelo, Mendoza, Claudia Ortiz que está a cargo del área de turismo de la Bodega Susana Balbo Wines cuenta que lo positivo de la pandemia fue que gracias al delivery de vinos y comidas de su restaurante Osadía de Crear pudieron conectarse con el público nacional; especialmente con el mendocino que no los conocía por ser una bodega fundamentalmente exportadora (exportan el 98% de su producción).
En las vacaciones de invierno del 2019, cuando la pandemia era inimaginable, llegaron a recibir alrededor de 2000 personas, en julio del año pasado unas 600 y para este mes ya tienen consultas para la primera quincena. «Por la incertidumbre la gente planifica su viaje a último momento y hacen la reserva una vez que llegan a destino. Por eso los hoteles se convirtieron en nuestros mejores promotores y aliados. Estimamos que tendremos un 43% más de visitas respecto al año anterior y un crecimiento del 61 % en facturación», estima Ortiz. Otro gran aliado, remarca, es el resto de las bodegas mendocinas que «solidariamente» se van recomendando.
Pero no todo es supervivencia. Algunos empresarios guiados por la idea de que crisis es igual a oportunidad, también crearon emprendimientos a pesar del contexto. Es el caso de Santiago Hidalgo Sosa que inaugura en estos días el Parador El Zorro en el centro de Sky La Hoya (Esquel, Chubut). Con un equipo de 17 empleados ofrecerá comida rápida, pero gourmet y con foco en productos locales y de estación.
En realidad, cuenta Hidalgo Sosa, ganaron la concesión en 2020 e invirtieron unos u$s 100.000 para equipar el parador. En eso estaban cuando los sorprendió la pandemia y sus planes de temporada de invierno quedaron frustrados.
«Somos optimistas. Hace un año el esquiador no tiene temporada y están con ansias de volver a la nieve», festeja el emprendedor que espera alcanzar una facturación de alrededor de $ 30 millones para el receso invernal. Para evitar aglomeraciones en espacios interiores, disponen de espacio en el exterior, tendrán una capacidad interior reducida en un 40% y usarán llamadores para la entrega de comandas.
El impacto negativo que la pandemia del Covid 19 tuvo para el sector del turismo resulta obvio a esta altura. Sin embargo, Arturo Navarro, CEO de aadesa Management, cree también sirvió para ordenar el mercado filtrando ineficiencias y abrió oportunidades excepcionales para los más innovadores:
«Para salir de esto es importante trabajar agrupado ya sea a una cámara empresaria, entre pares o a un plan de lealtad de algún buscador; pero además hay que estudiar y adaptarse a los nuevos comportamientos del consumidor», recomienda.
