Bajo el contexto adverso que atraviesa el sector agropecuario, sequía, incendios y marcadas pérdidas de rendimiento, el federado reconoció que se vuelve difícil ser un factor de contención para muchos productores y actividades debido a la fuerte presión impostiva que tiene el sector, más allá de cualquier coyuntura.
“Ante estas situaciones, todos recapacitan y entienden que muchos productores quedan en una situación de quebranto y terminan saliendo del circuito productivo”, indicó Achetoni.
Por su parte, el dirigente sostuvo que no pierde las esperanzas que suceda una reducción de las retenciones para las economías regionales y también para los principales materias primas que exporta el país. “A la vista está, que llevamos 20 años de retenciones y los principales indicadores sociales, como la pobreza y la indigencia, no cambiaron”, remarcó el directivo.
Asimismo, señaló que, “vemos con mucha autoridad el malestar por la falta de actualización del Fondo de Emergencia Agropecuaria -desactualizado desde el año 2009-. Yo comencé mi presidencia en el último año del gobierno de Mauricio Macri, en el 2018, que fue un año de mucha necesidad emergencia y en ese momento ya pedíamos un aumento del Fondo a 5.000 millones de pesos y, desde entonces, seguimos pidiendo una elevación a lo largo de toda la gestión de Basterra”.
Asamblea
“Hay muchas situaciones que requieren soluciones”, dijo el dirigente, ante el cuadro que fue describiendo.
Por ello, aseguró, que las primeras intenciones es que se realice la segunda asamblea para el 5 de marzo, en la localidad de Alcorta, ya que no vieron la posibilidad de hacerla en febrero.
De acuerdo, al directivo, al hacerla antes de Expoagro 2022, ello impide que justo se superponga con las actividades de la feria.