8 septiembre, 2023
Las famosas ‘redeterminaciones’ de precios de las contrataciones públicas están haciendo estragos en varias administraciones municipales y provinciales. Hay empresas que efectivamente deben actualizar compra de insumos, otras aprovechan la situación coyuntural y cultivan casi ‘un plazo fijo’ con la escalada inflacionaria.
En ese marco, el Municipio de Trelew está ahora afrontando uno de esos reclamos por deuda y redeterminación de parte de la siempre vigente Ashira, que a su vez busca garantizarse la continuidad del servicio con la nueva gestión.
El hecho es que pese a tratarse de un servicio esencial y de grave impacto en la salubridad de la ciudad, la empresa suspendió directamente la recolección de residuos con el absoluto colapso de basura.
Ashira tiene unos 80 trabajadores y 14 camiones. Ayer, el servicio consistía en cuatro salidas diarias, dos a la mañana y dos a la tarde, en tanto el día 17 de este mes los empleados revelaron que la mitad de ellos dejarían de trabajar, sin conocimiento aún si lo harán con algún tipo de licencia, o directamente recibirían un telegrama de despido. Algo que pone presión sobre el pago municipal, pero también sugiere la puesta en valor de la empresa para que se le garantice la continuidad de trabajo con la próxima gestión.
Según el apoderado legal, Gustavo garcía Moreno, la empresa presentó un procedimiento de crisis ante la Secretaría de Trabajo, un mecanismo bastante utilizado por empresas de servicio en Trelew para ‘cubrirse’ de reclamos laborales, en vista a los cambios de conducción política y nuevos acuerdos de contratación que deberá realizar la firma vinculada a un poderoso grupo económico de la ciudad que oficiaría como socio y administrador.
Ashira es una empresa recolectora que opera en los distritos bonaerenses de Junín, Balcarce y San Pedro, además de los chubutenses Puerto Madryn y Trelew. Su negocio más suculento lo emplaza en la Ciudad de Buenos Aires en U.T.E. con Martín & Martín S.A., con la que, desde 2014, están a cargo de la recolección y barrido de la Zona 6 de la Ciudad y se la vincula a Hugo Moyano, el temido líder del sindicato de Camioneros.
No está claro por ahora si Merino, en su caracter de intendente electo, accederá a continuar con los servicios de Ashira u optará por realizar un cambio de plano de las presiones de dos servicios monopólicos y en manos de sectores ‘amigos’ como han sido el transporte público de pasajeros y la recolección de residuos. Una decisión vital que expondrá para donde irá la nueva gestión en términos de alianzas y recomposición de las arcas públicas.
En ese marco, el intendente de Trelew, Adrián Maderna, admitió las severas dificultades económicas que tiene para cumplir con los servicios básicos más onerosos, por lo que está llegando como puede a terminar la gestión y entregarle, el 10 de diciembre la intendencia a su sucesor, Gerardo Merino.
El intendente de Trelew, Adrián Maderna afirmó que se tratará de llegar a un acuerdo con la empresa por la deuda de servicios y lo que piden de redeterminación de precios por la inflación
Trelew, al igual que Esquel y otros Municipios considerados ‘discolos’ políticamente fueron de los ‘castigados’ por Provincia, negándoles las asistencias financieras posibles que la administración provincial aporta a las ciudades. De allí que deban transitar los últimos tiempos de gestión en absoluta soledad y escasez.
Mientras tanto Trelew deberá superar una situación extrema en la ciudad, marcada por el cese de la recolección de residuos que muestra su costado más repugnante en las imágenes que los propios vecinos muestran de montañas de basura acumulada en distintos puntos de la planta urbana.
El intendente Adrián Maderna, en dialogó con LU20 Radio Chubut reconoció que le deben a la empresa Ashira 40 millones por el último mes que no pagaron.
A esto hay que sumarle lo que definió como «redeterminación de precios», lo que elevaría la suma por encima de los 100 millones de deuda que la municipalidad le debe a la flota de camiones que junta la basura. Aunque desde la empresa hablan de una deuda de $600 millones que no fue aun aclarada. Se supone que el recorrido de la recolección se monitorea con chips y kilometraje, y a partir de eso se abona el servicios, lo que requerirá un minucioso análisis de lo que se deberá pagar en caracter de deuda.
Maderna se mostró optimista en arribar en las próximas horas a una solución pero prometió que si no es así tomará medidas de emergencia porque no puede dejar que la basura se siga acumulando.
Aclaró sin embargo que todo este mecanismo deberá contar en la previa con un trámite ante el Concejo Deliberante que deberá autorizar una ampliación presupuestaria para imputar los nuevos valores.
Anunció que este fin de semana estará pagando el sueldo de los empleados municipales, y luego de ello se abordará el pago de proveedores.
Y dijo que, a pesar de todas las dificultades, llegará al final de la gestión con los sueldos al día y sin mayores deudas a pesar de la falta de ayuda del gobierno provincial, sobre lo cual se mostró resignado a que no haya aportes en lo que a esta altura tomó como «algo personal».
