20 octubre, 2022
Los mandatarios del Norte Grande lograron que el ministro ceda a su reclamo y amplíe a $85 mil millones la partida del año próximo para subvencionar el precio del boleto del transporte de pasajeros en sus provincias. Cumbre nocturna en Santiago del Estero y guiños para habilitar la aprobación de la Ley de Leyes que se discute en Diputados.
En la recta final del tratamiento del Presupuesto 2023 en la Cámara de Diputados, el ministro de Economía enfrentó el martes en una cumbre en Santiago del Estero al bloque de los gobernadores del Norte Grande, que le exigieron ampliar el subsidio que reciben las Provincias para el transporte, en claro reclamo a la situación de privilegio que tiene el área metropolitana de Buenos Aires.
La discusión fue clave para el derrotero de la Ley de Leyes en el Congreso, porque atraviesa transversalmente a todas las fuerzas políticas, sobre todo a los diputados que dependen directamente de los jefes provinciales. Además, tiene un condimento a la interna oficialista: de los diez gobernadores de la región, ocho son peronistas e integran el Frente de Todos, apenas dos –Gerardo Morales, de Jujuy, y Gustavo Valdés, de Corrientes– son opositores, de Juntos por el Cambio.
Los mandatarios provinciales concretamente le exigieron al ministro actualizar el subsidio al transporte público de pasajeros a 113.700 millones de pesos –el doble de lo pautado en el Presupuesto 2023–, o bien generar un criterio equitativo de distribución para todo el país. Tras una reunión de más de dos horas que se extendió hasta después de las 21, el ministro y los gobernadores acordaron un punto medio: la partida para subsidiar el transporte en las provincias finalmente será de 85 mil millones de pesos.
Además del local, Gerardo Zamora, y de Morales –Valdés no pudo viajar–, se encontraron con Massa los gobernadores Jorge Capitanich (Chaco), Gustavo Sáenz (Salta), Oscar Herrera Ahuad (Misiones), Gildo Insfrán (Formosa), Ricardo Quintela (La Rioja), Osvaldo Jaldo (Tucumán) y Raúl Jalil (Catamarca).
“Este aumento de recursos no implicará aumento en el gasto público nominal sino reasignación de partidas previstas en el proyecto enviado al Congreso”, se aclaró tras el cónclave en un comunicado de prensa. En la reunión también se propuso crear un Consejo Federal de Administración como órgano de aplicación de los subsidios por jurisdicción y para que implemente la tarjeta SUBE en todos los sistemas de colectivo.
Massa tiene directa influencia en el área de Transporte, no solo por manejar la billetera estatal, sino porque el ministro del área, Alexis Guerrera, es un hombre de su propio riñón.
Otra de las demandas planteadas por los gobernadores a Massa tuvo que ver con la tarifa energética diferencial, además del proyecto de provisión de 1.000 megavatios de energía limpia comprometido por el Gobierno. Se acordó que las jurisdicciones tendrán una segmentación con proyección diferencial por altas temperaturas en el marco de la eliminación de subsidios programados. Aunque no se detalló cómo quedará el cuadro tarifario, el planteo original era extender los límites de los subsidios a usuarios residenciales entre los meses de abril a octubre a 550 kw mes/hora, y desde noviembre a marzo a 750 kw mes/hora.
Los mandatarios lograron también articular un modelo de financiamiento para el llamado corredor bioceánico del norte para los próximos 15 años. Y se avanzó en un programa de amortización de las deudas de las empresas energéticas provinciales con Cammesa, la distribuidora de energía.
El Presupuesto de Massa estima para el 2023 un crecimiento de la economía del 2%, una pauta inflacionaria del 60% y un descenso del déficit fiscal del 2,5% al 1,9%, en línea con lo acordado con el FMI. Estima un gasto total de casi $ 29 billones, con una recaudación aproximada de $ 22,5 billones y un déficit primario de $ 6,3 billones. Si el jueves avanza la firma de un dictamen, la intención del oficialismo es que la iniciativa se discuta en el recinto la semana próxima: se convocaría a una sesión para el 25 o 26 de octubre.
*EDA/ Télam