22 abril, 2025
La empresa estadounidense de servicios petroleros Weatherford despidió a más de cincuenta operarios en Comodoro Rivadavia, profundizando el proceso de desmantelamiento de sus operaciones en la Cuenca del Golfo San Jorge. La medida, que responde a un ajuste de actividades y a una estrategia de repliegue en varias provincias, motivó la intervención de la Subsecretaría de Trabajo, que dictó la conciliación obligatoria.
Sin embargo, el antecedente de Halliburton —que entre febrero y marzo concretó el despido de 290 trabajadores bajo el mismo procedimiento— genera desconfianza entre los sindicatos. Voceros gremiales advirtieron que “la conciliación solo sirve para maquillar los despidos con plazos extendidos y acuerdos disfrazados”.
Weatherford mantiene hoy una presencia mínima en Comodoro, pero los rumores de cierre total crecen. En otras ciudades patagónicas como Río Gallegos, Cañadón Seco y Las Heras, se habla de un futuro similar. En Neuquén, la firma ya concretó la venta de su unidad de fractura hidráulica a Pluspetrol, lo que confirma la retirada progresiva del país.
En Comodoro, la empresa ya había cedido su línea de equipos de Slickline a la firma regional Endurance. En esta nueva ola de cesantías, Weatherford propone acuerdos bajo el artículo 241 de la Ley de Contrato de Trabajo, ofreciendo compensaciones adicionales y continuidad médica, aunque evitando registrar despidos con las indemnizaciones plenas del artículo 245.
Mientras tanto, la incertidumbre crece entre los trabajadores del sector petrolero, golpeado por un contexto nacional de recesión, ajustes y desinversión. “No es un conflicto, es una retirada”, resumió un dirigente sindical.
*RP