2 noviembre, 2025
River estaba obligado a ganar para no perderle pisada a Boca en la antesala del superclásico de cara a la pelea por el torneo Clausura y sobre todo la clasificación a la Copa Libertadores 2026. Pero tuvo otra noche para el olvido y perdió ante Gimnasia por 1-0 en una noche que tuvo de todo: fue un final increíble, en donde luego de los nueve minutos adicionados por el árbitro Nazareno Arasa sancionó penal por un agarrón de Suso a Martínez Quarta. Pero al final, entre revisiones de VAR y discusiones, Miguel Borja terminó ejecutando la falta a los 62 minutos y ahí fue cuando apareció el gran héroe del encuentro: Nelson Insfrán le desvió de gran manera el remate y así sostuvo los tres puntos del Lobo en una lucha desesperada por salvarse del descenso.
De esta manera, River perdió su cuarto partido seguido como local, tomando como referencia la derrota ante Palmeiras, por la Copa Libertadores (1-2) y luego las caídas ante Deportivo Riestra (1-2), Sarmiento (0-1) y Gimnasia (0-1), por el certamen doméstico. Los hinchas, furiosos, terminaron cantando “que se vayan todos”.
El equipo de Marcelo Gallardo no jugó bien y estaba en desventaja por un penal que Portillo le había cometido a Merlini y que también necesitó de una revisión del VAR por parte de Arasa. Cuando todos analizaban el posible empujón en la espalda del exTalleres, lo que se sancionó fue el toque con la rodilla en el tobillo del rival. Lo ejecutó muy bien Marcelo Torres, exdelantero surgido de las inferiores de Boca, engañando a Armani.
River sigue probando esquemas y nombres, pero no termina de afianzar su estructura.
*LN