El proyecto demandó una inversión de 180 millones de dólares y tendrá una capacidad instalada de 123 MW que le permitirán abastecer de electricidad al equivalente de 150 mil hogares.
En rigor, sus 29 aerogeneradores destinarán 101,52MW de capacidad instalada para la provisión de CAMMESA, mientras 21,15MW se destinarán al Mercado a Término de Energías Renovables (MATER), es decir, a empresas privadas que son grandes consumidoras.
El parque cuenta con un factor de capacidad de 53% y evita la emisión de más de 312.000 toneladas de dióxido de carbono por año. Es el tercer parque eólico de la compañía, luego de Manantiales Behr, ubicado en Chubut y operativo desde 2018; y Los Teros, puesto en marcha en 2020 y ubicado en Azul, provincia de Buenos Aires.
“Con gran alegría e inmenso orgullo finalizamos el tercer Parque Eólico de YPF Luz en el país: Cañadón León. Significó mucho esfuerzo y responsabilidad de los equipos de trabajo en un contexto sumamente desafiante”, sostuvo Mandarano.
Luego de esta apertura, se termina momentáneamente la fase de los parques eólicos y la subsidiaria eléctrica de la petrolera pasará a concentrarse en el desarrollo de proyectos fotovoltaicos.
En primer lugar, se empezará por el parque solar El Zonda de San Juan -para el cual ya se consiguió una línea de financiamiento del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS)- y luego se está analizando algunas alternativas en Catamarca y La Rioja, tal como anticipó Pablo González a EOL.
Esto se fundamenta en la saturación de las líneas de alta tensión en la Patagonia, para las que se está gestionando un crédito de 1.200 millones de dólares a fin de poder seguir desarrollando la actividad. Mientras tanto, la única alternativa es aprovechar los pocos lugares con capacidad de transporte disponible que, en general, se encuentran en el NOA y en Cuyo, donde el recurso predominante es el sol.
