29 septiembre, 2020
El reordenamiento tributario que presentará el gobierno la semana próxima prevé incrementar la recaudación a partir de un ordenamiento de tributos, poniendo al cobro algunos que no se estaban exigiendo. Por esa vía, la recaudación podría incrementarse en 2.100 millones de pesos anuales, según calculan desde el oficialismo.
Pero además se contempla recuperar los montos de recaudación previos a la pandemia, en la que se perdieron este año “12.000 millones de pesos en recaudación”, afirman los asesores del Ejecutivo.
Así lo explicó recientemente Diego Touriñán: “No estoy hablando de la ‘gran’ reforma tributaria, sino de medidas que apuntan a dar mayor eficiencia en aquellos tributos que estaríamos en condiciones de cobrar y por algún motivo no se está cobrando, o bien no se recauda en los niveles que deberían estar. Y después sí, se agregan algunas medidas que son de tipo legislativo que se estarán remitiendo en estos días”.
Dos de los sectores en los que se trabaja específicamente es en el impuesto Inmobiliario Rural y el canon por Uso de Agua. En el primer caso, Touriñán indicó que no está al cobro desde el año 2004, a partir de sucesivas emergencias climáticas y otros problemas del sector que afectaron a los propietarios de campos, pero que ahora se pondrá el cobro, aunque se mantendrán exenciones de acuerdo a cada situación que atraviesa cada sector.
“Sobre una base tributaria de 2.100 millones de pesos, estimamos que podríamos recaudar el 40 por ciento, es decir unos 840 millones de pesos”, indicó el funcionario.
En cuanto al uso de agua, la actualización de cánones que involucra a cooperativas de servicios y regantes particulares en zonas rurales, como también a las empresas petroleras y mineras, señaló que podrían recuperarse otros 200 millones de pesos anuales.
“Esto es un monto posible y factible, sin cuestiones fantasiosas”, añadió.
Además, se busca poner el cobro una deuda acumulada que, según registros del IPA (Instituto Provincial del Agua) asciende a 350 millones de pesos. “La idea es analizar, sin que esto impacte en la gente, algún régimen especial para que estas entidades pongan al día con los pagos”, explicó.
Por otro lado, hay alrededor de 1.000 millones de pesos para recuperar por vía judicial, a partir de impuestos provinciales impagos de distintos sectores. En relación a ese tema, señaló que se buscará evitar la judicialización de todas las deudas, por lo que se trabaja en un plan de facilidades de pago.
Más allá de los montos a cobrar con el ordenamiento tributario, Touriñán remarcó la importancia de que los niveles de recaudación vuelvan a los valores previos a la pandemia. En ese marco describió que la pérdida en recaudación de impuestos, tanto provinciales como los que se reciben de Nación a través de la coparticipación federal, alcanza los 12.000 millones de pesos:
“Hay dos masas salariales perdidas solamente por la caída de la recaudación –puntualizó, en referencia a los retrasos salariales del gobierno-. Nosotros estamos estimando que en enero de 2021 volvamos a la misma recaudación de enero de este año, ni siquiera estamos proyectando que aumente. De ese modo, recuperando la recaudación previa a la pandemia, para el mes de junio o julio estaríamos con un aumento de la recaudación de un 30 ó 40 por ciento”.
Esto se sumaría a los ingresos nuevos, a partir de la puesta en vigencia de impuestos o actualización de cánones, que sumaría 2.100 millones de pesos al año.
*ADN