16 noviembre, 2025
Deportivo Madryn, que se había quedado sin ascenso directo al perder la final de la Primera Nacional contra Gimnasia de Mendoza, tendrá otra chance para dar el salto a la Liga Profesional.
En un partido con numerosas polémicas, con un arbitraje muy cuestionado de Pablo Echavarría y con un final escandaloso porque los jugadores visitantes se descontrilaron y terminaron reprimidos con gas pimienta por la policía, el equipo patagónico venció por 1-0 a Deportivo Morón e hizo valer la ventaja deportiva.
Ahora jugará la final del Reducido por el segundo ticket a la máxima categoría contra Estudiantes de Río Cuarto, verdugo el sábado de Estudiantes de Buenos Aires.
Hibo numerososo prólogos para la agarrada que se desató después del pitazo final de Echevarría. Fueron diez minutos de un todos contra todos porque los visitantes estallaron. Mientras algunos increpaban al árbitro, otros eligieron pelearse con sus colegas de Deportivo Madryn. La policía intentó calmar las aguas, pero estuvo lejos de alcanzar el objetivo. De hecho, se transformó en el blanco del enojo de algunos futbolistas del Gallito, quienes terminaron visiblemente afectados por el gas pimienta que lanzaron los uniformados para intentar disuadirlos.
Thiago Nicolás, Gastón González y Julio César Salvá fueron los más afectados. “Estas son las cosas que lastiman al fútbol. No tiene que pasar esto. Hay injusticias que no pueden ser. Esperemos que estas cosas no vuelvan a suceder, que no lastimen más al fútbol”, se lamentó el defensor Juan Manuel Cabrera.

¿El partido? Según los entendidos, fue muy pobre. Santiago Postel, de cabeza, fue el autor del gol del triunfo para el equipo que dirige Leandro Gracián. Fue después de un tiro libre que llegó tras un quite limpio de Cabrera sobre Diego Crego que Echavarría interpretó como foul y también fue cuestionado.
Morón terminó con diez jugadores luego un codazo artero de Joaquín Livera sobre Nazareno Solís. Fue, en este caso, un acierto de Echevarría, que debió haber sido mucho más severo con Federico Recalde y Diego Martínez, ambos del local, que zafaron de milagro de sendas expulsiones luego de dos entradas durísimas.
La final por el segundo ascenso entre Deportivo Madryn y Estudiantes de Río Cuarto será a ida y vuelta -se definirá en Chubut- y habrá alargue y penales en la revancha en caso de ser necesarios. Se jugarán el sábado 23 y el sábado 30 de noviembre.