Julia Fernández, guía del Monasterio de Samos, comentó en un programa de radio español de la Cadena SER que “los monjes de la orden benedictina son contemplativos y en su regla hay una parte que obligaba a los monjes a ir meditando de modo sumiso, mirando hacia el suelo”. Y agregó: “La clave es la contradicción a esa contemplación. Si a algunos de los monjes se les ocurría elevar el rostro mientras meditaba, la respuesta era ‘qué mirás bobo’ para que vuelvan a meditar”.
La experta detalló que el monasterio español se construyó en el siglo VI, pero que la frase inscripta data del siglo XVI. «Es una de las 140 claves que coronan esa nervadura gótica y que no se puede precisar si fue un acto de humor o un reto para quienes miraban hacia arriba», precisó.
Sobre la idéntica frase esbozada por Messi, la guía expresó que “lo comentábamos con los más jovencitos y dijimos que iba traer revuelo. Por lo menos entre la gente del pueblo. No pensábamos que iba a extrapolarse tanto, pero sí, con la gente del pueblo fue comentado».