28 agosto, 2022
POR AHORA, CHUBUT SIGUE SIN DEFINIR SU CALENDARIO ELECTORAL
Un numero importante de gestiones provinciales evitan quedar atadas al arrastre del Gobierno nacional. Cuáles son las provincias que ya activaron adelantamiento electoral y las que se mantienen alineadas a la Casa Rosada. Chubut se mantiene ‘al medio’ y Arcioni no aclara el calendario electoral.
No conformes con haber forzado el cambio de gabinete que depositó a Sergio Massa en el Ministerio de Economía -y con atribuciones plenipotenciarias-, los gobernadores del PJ buscan ahora afianzar una estrategia de desdoblamiento electoral en sus territorios que les permita despegarse de la suerte del Gobierno nacional, bajo la máxima no escrita de que “el único traidor es el que pierde”.
De eso se habló, aunque de manera informal, en la reunión que la liga de mandatarios hizo el viernes último en la ciudad de La Plata, donde el bonaerense Axel Kicillof ofició de anfitrión de un grupo de unos 14 mandatarios en total.
Preocupados ante el alto índice de inflación y la caída en la imagen de los principales referente del Frente de Todos, los gobernadores tienen prácticamente decidido que el año que viene desacoplarán las elecciones en sus provincias del calendario nacional, que prevé las PASO para agosto y las presidenciales para octubre.
Algo que a las aspiraciones de recupero kirchnerista ayudaría a compartimentar el proceso eleccionario, evaluar la reconfiguarción de mapas de poder por región, y en consecuencia tejer alianzas inmediatas con vista al turno nacional.
Los datos se basan en un sondeo periodísticos realizados en los equipos de gobierno de los distintos mandatarios. Aunque ese desdoblamiento no sería una novedad en sí misma, ya que muchas veces las provincias se separan del cronograma nacional, en esta oportunidad se traduce en una urgencia notable motivada en la necesidad de despegarse de la gestión de Alberto Fernández y de la «grieta» que es marca registrada en el AMBA entre las facciones que integran el frente gobernante.
“La mayoría ya tiene resuelto que va a implementar su propio calendario”, dijo un dirigente que se mueve muy cerca de uno de los gobernadores peronistas de más alto perfil, y que atribuyó esta determinación a la propia dinámica de la realidad política.
El funcionario explicó que, en términos de imagen, muchos gobernadores “están mejor que la Presidencia, y no quieren que la gestión nacional los arrastre”. “Si fuera al revés, estarían todos metidos ahí”, aclaró la fuente consultada, al citar el conocido pragmatismo que impera en el PJ.
También recordó que, en las buenas épocas de Néstor y Cristina Kirchner en la Casa Rosada, “a nadie se le ocurría separar” las elecciones. “Pero hoy el Gobierno es un ancla y muchos tratar de librarse de eso”, graficó, sin vueltas.
En la lista del “operativo despegue” ya hay varias provincias anotadas. Salta, donde manda el peronista “heterodoxo” Gustavo Sáenz, dio el puntapié inicial y ya anunció que las elecciones a gobernador se harán el 16 de abril.
En la misma situación está Tucumán, el territorio del jefe de Gabinete, Juan Manzur. Hará sus comicios en junio, apelando a una tradición local que dicta que siempre es el distrito que abre el año electoral. Aunque esta vez Salta se le adelantó.
Otro peronista que buscaría su propio camino es el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, que ya avisó que podría llamar a elecciones provinciales en marzo, por lo que, de concretarse, estaría adelantándose incluso al caso de Sáenz.
En Salta el gobernador Gustavo Sáenz ya anunció que las elecciones provinciales se harán el 16 de abril
Un plan similar tiene la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, que no es del peronismo pero muchas veces actúa como aliada del Frente de Todos. “No queremos quedar mezclados en una grieta que no nos representa”, avisó la mandataria. En el mal llamado «interior» nadie ve la grieta con buenos ojos.
Sugestivamente no hubo representantes de Salta en la reunión de gobernadores del viernes pasado, así como tampoco de Chubut, Misiones y Neuquén. En estas provincias gobiernan alianzas no-peronistas como Chubut al Frente, el Frente Renovador de la Concordia y el Movimiento Popular Neuquino (MPN), respectivamente, y que suelen competir contra el PJ a nivel local.
La que no está en duda, por razones de peso electoral, es la provincia de Buenos Aires, donde el kirchnerismo hizo del conurbano su principal base de sustentación. Otro aliado inclaudicable como el formoseño Gildo Insfrán, que suele revalidar sus votos con el 70%, también se mantendría alineado al cronograma nacional.
Provincia de Buenos Aires comandada por Axel Kicillof y principal bastión K mantendría su calendario con el nacional, algo que genera especulación sobre el rol de soporte a una posible candidatura de Cristina
El caso de Chubut es casi un capítulo aparte. De las últimas gestiones peronistas la mayoría surgieron por adelantamiento electoral, y el propio Mariano Arcioni logró posicionarse nuevamente merced a este mecanismo. Sin embargo otra es la historia en este nuevo turno, donde ya no puede repetir mandato y puso en marcha su plan de recuperación de imágen y de constitución del Frente Renovador en territorio, que recién logra su personería jurídica, con lo que se infiere jugará con candidato propio.
Por ahora Arcioni deslizó que no están dadas las condiciones en la Provincia para un adelantamiento electoral, algo que meses atrás lo entusiasmaba un poco más. Y aunque hay interés de sectores del peronismo chubutense de desdoblar las elecciones provinciales de las nacionales en 2023, Arcioni evidenció no estar convencido: «Hay que esperar. Yo ya dije que eso era un acuerdo entre todos los sectores políticos», respondió hace una semana ante la consulta de la prensa en Comodoro Rivadavia. «Por lo que uno ve hoy en día, todos los sectores políticos quieren ir con las generales», afirmó.
A esto se sumó su distanciamiento por lo menos formal de la «Liga de Gobernadores» y su reporte directo al Frente Renovador que lidera Sergio Massa. Además de concretar el partido a nivel provincial con su secretario de Gobierno como presidente del sello, Arcioni mantiene vínculo y línea directa con el actual superministro nacional, algo que obliga a mover fichas en sintonía fina.
El viernes sin más, mientras en la casa de Kicilloff se hablaba de adelantamientos y coyuntura, Arcioni se mantuvo en otras mesas de reuniones ‘por temas de gestión’ y posteriormente se mostró en breve reunión a solas con el propio Sergio Massa. Gestos de jugada individual de Massa-Arcioni diferencianda de las del pelotón de los distritos kirchneristas y peronistas que ya evalúan abiertamente el desdoblamiento en las urnas.
El gobernador de Chubut, Mariano Arcioni se reunió el viernes con Sergio Massa y no participó de la foto de la «Liga de Gobernadores». Afirma que por ahora no están las condiciones para adelantar elecciones en Chubut
Claro que para poner en marcha este operativo los gobernadores necesitan aval constitucional. En la mayoría de los distritos las cartas magnas provinciales permiten el desdoblamiento.
“En algunas provincias, y por la Constitución, la elección a gobernador e intendentes debe hacerse separada de la presidencial y dentro de los 90 días anteriores a la finalización del mandato”, explicaron desde una de las comarcas del PJ, de manera que cada Poder Ejecutivo puede decidir cuándo llamar a las urnas.
¿Qué genera esto? Que el peronismo se vaya “feudalizando”, según la mirada de los propios gobernantes involucrados. “Más que un movimiento nacional parece un grupo de señores feudales, cada uno metido en su mundo”, resumen entre los justicialistas.
Pero, para excusarse, en el PJ dicen que se busca “salvar la ropa” y advierten que “el mejor homenaje que se le puede hacer al peronismo es ganar las elecciones”. De esa otra máxima no escrita en el partido de poder se habló el viernes entre los gobernadores que estuvieron en La Plata.
“Aunque no lo digan, todos tienen su plan de contingencia y la prioridad es retener lo que se tiene, por eso van a hacer lo imposible por aferrarse a su territorio”, confirmaron en uno de los distritos consultados.
El viernes pasado estuvieron en La Plata Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Sergio Ziliotto (La Pampa), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Alberto Rodríguez Saá (San Luis), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Ricardo Quintela (La Rioja), Jorge Capitanich (Chaco) y Sergio Uñac (San Juan), además de Insfrán, y los vicegobernadores Rubén Dusso y Eugenio Quiroga, de Catamarca y Santa Cruz, respectivamente.
La crisis económica y la incertidumbre política determina que “no es momento de expandirse sino de mantener, a como dé lugar, lo que se tiene”, confían entre los peronistas del interior.
Y apelan a una consigna de corte económica para explicar el momento actual: “No hay que descapitalizarse”.
*A24/RCH
