26 octubre, 2021
La obra fue inaugurada hace pocos meses luego de haber sufrido el derribo de 52 torres. Su nuevo diseño fue clave para soportar el impacto, pero preocupa el crecimiento de estos fenómenos por el cambio climático.
A poco más de un año del histórico temporal que derribó 52 torres de la línea Futaleufú-Madryn, la provincia de Chubut volvió a sufrir un evento climático que puso en tensión a la red que conecta su principal represa hidroeléctrica con la planta de aluminio de Aluar.
La nueva línea de 330 kv fue reinaugurada a fines de junio con un diseño moderno que reforzó las estructuras con cross rope y se “ultra sobredimensionaron” las medidas de seguridad para evitar un accidente semejante.
Gracias a ello es que las ráfagas superiores a los 150 kilómetros por hora que soplaron este domingo no volvieron a producir un desastre. Aún así, el sistema entró en tensión por momentos y tuvo que salir de servicio por algunas horas.
“El temporal ha sido muy fuerte, pero todas nuestras instalaciones están en servicio. Ayer salieron por unas horas solamente. Si mirás la declinación de las cadenas, se acercaron mucho a las torres disminuyendo la distancia de seguridad, lo que puede producir una descarga a tierra”, explicó a este medio el Gerente General de Transpa, Fernando Aenlle Guerra.
El problema es que, a la luz de los acontecimientos, se observa un crecimiento en este tipo de desastres climáticos vinculado al proceso de calentamiento global que amenaza con profundizarse año a año.
De hecho, según el propio Guerra, “las condiciones de diseño de las torres son muy cercanas a estas velocidades de viento”, aunque aclara que “este tipo de fenómenos puede afectar más a soltar conductores que a la estructura de las torres”.
Además del peligro sobre esta infraestructura energética, el temporal causó cortes de ruta y daños materiales a lo largo de toda la Patagonia, donde varias localidades sufrieron cortes de luz.
El Servicio Meteorológico Nacional declaró un “alerta rojo” que ahora pasó a “moderado”, pero se mantendría varios días más por la permanencia de un ciclón que ingresó desde la Antártida.