20 abril, 2021
A poco más de 48 horas para el próximo encuentro entre las empresas petroleras y los sindicatos del sector, el escenario en Vaca Muerta cambió poco y nada y se anticipa una nueva dilación en un conflicto que mantiene la cuerda tirante en la industria. Los gremios ya jugaron la carta pesada de un paro total la semana pasada y ahora esperan por una oferta por parte de Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH).
La tormenta por la que atraviesa el gobierno de Neuquén y nacional por los cortes de ruta estratégicos en Vaca Muerta por parte del personal de Salud hace ya 14 días, se desarrolla como telón de fondo ante el enfrentamiento que llevan adelante las operadoras y gremios hace más de un mes.
Con pérdidas diarias millonarias, con el abastecimiento de combustibles en la región limitado y con la producción de gas para el invierno seriamente comprometida por los bloqueos de caminos en la Cuenca Neuquina, la incertidumbre es altísima. Incluso una solución al conflicto en las próximas horas no revertirá el fuerte golpe que sufrió la industria al estar casi medio mes con la actividad restringida.
Los gremios esperan que el jueves las empresas pongan sobre la mesa una contraoferta al 30% de recomposición salarial que pidieron. Lo cierto es que se trata de un porcentaje que las petroleras no van a ofertar no solo por el contexto actual que se ve en la región, sino porque vienen de un 2020 de grandes pérdidas y más allá de los precios de mercado actuales, las perspectivas para el corto plazo por el rebrote de coronavirus, las nuevas restricciones y la demanda aún depreciada, no dan garantías de nada.
Pero como si fuera poco, el reclamo del gremio es sobre la paritaria del 2020 y quieren, más a delante en el año, abrir las paritarias 2021. El hecho de que las empresas aún no hayan presentado siquiera una contraoferta permite entrever la distancia que hay entre una posición y la otra, pero además las diferencias que hay entre las propias petroleras.
Además no hay que perder de vista que una vez logrado el acuerdo con los gremios, deberán ratificarlo con la Cámara de Empresas de Operaciones Petroleras Especiales (CEOPE) que pedirá que les reconozcan los mayores costos operativos.
El año pasado las empresas dieron un 16,9% de aumento para cerrar la paritaria del 2019, y otro 15% que pasó a ser remunerativo este año para la paritaria 2020. Por esto es que las petroleras dicen que dieron un 31,9% de aumento y el gremio argumenta de ese monto solo un 15% pertenece al año pasado y que falta cerrarla.
En medio de todo esto, el gremio petrolero de base de la región se prepara para las elecciones que podrían desarrollarse después de agosto, y es precisamente en esta negociación donde pone todas las fichas para lograr una reelección. Ya se adelantó que la lista actual no contará con la presencia de Guillermo Pereyra a la cabeza.
La discusión salarial es uno de los factores del negocio. En Vaca Muerta, tres petroleras controlan casi un 60% de la superficie del yacimiento. Al menos desde lo territorial, la mayor formación de recursos no convencionales fuera de Estados Unidos está controlada por apenas tres operadoras. Así lo indica un informe de la Subsecretaría de Energía, Minería e Hidrocarburos de Neuquén acerca del área concesionada en Vaca Muerta.
Según el trabajo, un 57,9% del mayor reservorio de shale gas y shale oil del país se encuentra en manos de YPF, Total y Pampa Energía. La empresa cuya mayoría accionaria le pertenece al Estado nacional, posee –por intermedio de su subsidiaria Y-Sur– un 32,6% de las tierras en cuestión.
La firma de origen francés, en un segundo escalón, cuenta con un 13,1% del territorio. El tercer puesto es para la petrolera del Grupo Mindlin que, tras adquirir los activos de Petrobras (e incluyendo las operaciones de Entre Lomas), logró acceder a un 12,2% de la superficie de Vaca Muerta.
En cuarto y quinto lugar se posicionan Pluspetrol, con un 8,2%, y Oilstone, con un 5,1%. El 28,8% restante se distribuye entre otras 12 organizaciones, algunas de las cuales son gigantes de la talla de Exxon, Shell, Chevron o el Grupo Techint.
Vale aclarar que el reporte de la Subsecretaría de Hidrocarburos neuquina, que depende del Ministerio de Energía, Servicios Públicos y Recursos Naturales a nivel provincial, sólo toma en cuenta el territorio concesionado por operador, independientemente de su participación en los contratos.
Por otro lado, debe considerarse el obvio hecho de que disponer de una mayor extensión de tierras no necesariamente asegura una mayor producción, sobre todo en una formación tan heterogénea como lo es Vaca Muerta, a criterio de diversos especialistas. De hecho, se prevé que buena parte de las superficies contabilizadas no serán puestas en valor. Pero muchas operadoras consideran conveniente manejar la mayor cantidad posible de hectáreas por un tema de costos logísticos y asociados.
Un estudio de IHS Markit estimó el nivel de inversiones que las operadoras con áreas concesionadas en Vaca Muerta deberán desplegar para promover el desarrollo a gran escala de sus recursos hidrocarburíferos no convencionales. Según la consultora, el megayacimiento tiene potencial para generar aproximadamente 560.000 barriles diarios de petróleo equivalente y 6.000 millones de pies cúbicos de gas por día para el año 2040.
D
e alcanzar esos volúmenes, la Argentina podría disminuir drásticamente su dependencia a las importaciones de hidrocarburos e incluso volver a tener saldos exportables. No obstante, el trabajo de IHS advierte que para que ello sea posible se precisarán inversiones por al menos u$s 8.000 millones anuales sólo en materia de perforación y completamiento.
Denominado “Vaca Muerta Insight: Supply Scenarios for Argentina’s Energy Future”, el estudio califica a la formación como una de las “súper cuencas” más prometedoras del mundo, aunque remarca que su puesta en valor deberá contar inexorablemente con una garantía continua de un entorno empresarial estable por parte de las autoridades
gubernamentales, lo que no significa por supuesto resignar la mano de obra ni evitar el derrame local de un recurso natural no renovable.
Mientras el conflicto de Salud en Neuquén tiene a cientos de autoconvocados en las rutas bloqueando el paso de vehículos petroleros y, en paralelo, los gremios del sector les reclaman un aumento a las empresas, referentes del oficialismo en la provincia acusaron a diversos sectores opositores de fogonear el conflicto de Salud, por esto de tratarse de un año político y plagado de confrontaciones e internismos.
Con campañas en redes sociales y comunicados oficiales de partidos de izquierda, Frente de Todos y de Libres Neuquén, la política local se midió la fuerza ante un contexto de alta incertidumbre. Lo cierto es que por ahora el gobierno provincial no encontró una salida al reclamo de Salud, y las petroleras están por cumplir medio mes de actividad y producción seriamente afectada.
*EON, RN
