9 octubre, 2022
La flota amarilla negocia con los diferentes gremios marítimos la actualización salarial y el precio del langostino. En la segunda quincena de octubre se realizaría una prospección. La zafra en aguas provinciales iniciaría en las primeras semanas de noviembre.
Concluida la temporada de langostino en aguas nacionales y en momentos en que se evalúa la situación de los mercados internacionales en la Feria de Vigo, y la evolución de los precios de aquí al cierre del año, se empieza a trabajar en la definición de plazos para que arranque la zafra en Rawson.
La flota amarilla inició conversaciones con los sindicatos marítimos, cruzando primeras propuestas para la actualización salarial que anualmente se da a esta altura del año, antes que comience la temporada provincial.
El proceso inflacionario que atraviesa el país obliga a esta revisión casi permanente de los valores salariales, en todas las actividades económicas, y en el caso particular de la flota que opera sobre el langostino en aguas provinciales tiene la característica de compartir costos con el sistema a la parte, lo que lleva a acordar precios de referencia por kilo de especie.
El atraso cambiario y los precios deprimidos en los mercados receptores del langostino salvaje patagónico, son también factores que forman parte de la ecuación económica de la industria pesquera, en sus diferentes estratos.
Hay cierto consenso en el sector de avanzar en las tratativas con los gremios, que las negociaciones estén encaminadas, para recién solicitar formalmente a la Secretaría de Pesca de Chubut la realización de un relevamiento del recurso con la flota comercial, a fin de evitar fricciones entre los sectores del trabajo y los armadores.
La fecha no está determinada, pero la prospección se concretaría en las dos últimas semanas de octubre, y a la luz de lo que dejó la pesquería en aguas nacionales hay buenas expectativas en cuanto a la abundancia y talla del recurso que migra a aguas jurisdiccionales de Chubut.
Con todo, la temporada provincial comenzaría a principios o mediados de noviembre, dependiendo claro de los indicadores biológicos que arroje el relevamiento que se hará en diversas subáreas. En la temporada anterior se había abierto la pesquería de forma apresurada, pero la presencia de tallas chicas y by catch, llevó a que se haga una suspensión biológica de las operaciones y después de diez días se retomó la actividad.