27 diciembre, 2022
La disposición, publicada en la edición del lunes 19 del Boletín Oficial, elevó a 1.100 pesos un gravamen hasta principios de mes no alcanzaba los 615 pesos. Añadido el IVA, los vuelos que se compren ahora, pero para servicios a utilizar desde febrero, tendrán un adicional de 1.331 pesos por tramo.
En plena efervescencia por la reciente celebración de la Copa del Mundo, el Gobierno movió las piezas y a través de un organismo bajo control de La Cámpora fijó una suba en las tasas de uso aeroportuario que pegará en los pasajes para vuelos a partir del segundo mes de 2023.
Si bien la medida fue «celebrada» por Aeropuertos Argentina 2000 (AA2000), la principal concesionaria aérea del país y uno de los principales arietes comerciales de Eduardo Eurnekian, lo cierto es que la medida le garantiza caja «fresca» al Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA), una dependencia controlada por la agrupación que encabeza Máximo Kirchner.
Sobre el ORSNA sobrevuelan cuestionamientos a partir de las partidas que recibirá el año próximo, según lo establecido en el Presupuesto Nacional aprobado en el Congreso: más de 2.100 millones de pesos, de los cuales el 90 por ciento tendrá como destino el pago al personal del organismo.
En el ámbito aerocomercial dan por descontado que este incremento en los impuestos redundará en menos viajeros por el aumento de los pasajes. La medida, entienden, afectará los números del sector tras un año positivo para la actividad aerocomercial.
En ese sentido, en lo que va del año se movilizaron 11.004.311 pasajeros en vuelos domésticos. Esto representa una recuperación del 83 por ciento respecto de los números registrados durante el peor momento de la pandemia.
En la actualidad, la dependencia cuenta con un plantel de 276 empleados más una cúpula encabezada por el santiagueño Carlos Pedro Lugones Aignasse.
Respecto de este último también proliferan datos poco afortunados. En 2013, Lugones Aignasse estuvo imputado por defraudación contra la administración pública a partir de funciones que cumplía en el Ministerio de Defensa.
En mayo de 2021, el ORSNA también fue eje de señalamientos críticos por una polémica en torno a un laboratorio –LabPax– que facturaba hisopados para detectar Covid-19 en el Aeroparque Jorge Newbery. Y que presentaba como titulares de la firma a dos monotributistas de las categorías más bajas.
En cuanto a las terminales alcanzadas por el adicional de 1.100 pesos, entre estas se ubican 36 aeropuertos que van desde Ezeiza al Aeroparque pasando por las instalaciones de Iguazú, Córdoba, Jujuy, Mar del Plata, Paraná, Neuquén, Bariloche y Ushuaia, por mencionar algunos puntos.
Otro pelotón de aeropuertos, entre ellos San Fernando, San Martín de los Andes, Puerto Madryn y Río Cuarto, incorporarán un gravamen que ahora asciende a 767 pesos sin contar el IVA.
No se trata del único impuesto aplicado a los viajes en avión en este tramo final del año. A fines de octubre se dispuso la creación de una tasa destinada a financiar a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
En ese momento, la aprobación levantó polvareda luego de que Javier Milei, crítico acérrimo de los nuevos impuestos, abandonara la sesión junto con parte de su bloque, lo cual permitió un resultado 121 a 120 a favor del Gobierno.
¿En qué consiste la nueva tasa que se avaló en ese momento? La norma estableció un monto fijo a determinar por el Ministerio de Seguridad de la Nación, cuyo valor no podrá superar el equivalente a 0,25 por ciento del sueldo básico del grado jerárquico de Oficial Principal del Escalafón General del Personal Policial de la PSA.
Ese porcentaje equivale a 250 pesos calculados sobre el sueldo de referencia, que hoy en día se ubica en torno a los 100.000 pesos. Pero que irá ajustando hacia arriba a medida que se modifiquen los montos salariales.
Ese nuevo impuesto se sumó a los ya vigentes para los viajes aéreos como la tasa de uso aeroportuario (57 dólares), la tasa de migraciones y aduana (10 dólares), la Tasa de Seguridad (8 dólares), la Percepción al Impuesto a las Ganancias (45 por ciento), el Impuesto PAIS (30 por ciento) y la Percepción a cuenta de Bienes Personales (25 por ciento), entre otros.
