Papelón institucional

Diego Carmona fue desmentido categóricamente por el enfermero de Pirámides, Hugo Castro, con oficio y documentación en mano.

El Fiscal Anticorrupción apareció en escena precisamente al cierre de una gestión y el inicio de otra, protagonismo que se preveía, en el marco del ‘orejeo’ de poder que se inicia, pero lamentablemente a través de un verdadero papelón institucional.

No se sabe bien si el funcionario que se erige como ‘guardián de la república’ chubutense, parangonenando a Carrió, se fue de boca y le agregó un poco de imaginario a un hecho por error o le pasaron mal los datos y en el fragor mediático, terminó falseando inormación. Lo cieto es que sea como fuere, el hecho le resta absoluta seriedad a un cargo que ya viene sospechado por ‘inactividad manifiesta’, porque si hay algo que sobran serían casos de corrupción sin ventilar, al decir de la ciudadanía.

Resulta que Diego Carmona, el controvertido Fiscal Anticorrupción que fue nombrado la trágica noche del incendio masivo en Rawson en el marco de una sesión plagada de irregularidades y repudio por los grupos antimineros, había declarado públicamente hace menos de una semana que el organismo quue dirige «logró recuperar» una ambulancia que llevaba 5 años «desaparecida» en Puerto Pirámides, preuntamente «gracias a una denuncia anónima» y que el vehículo «estaba siendo desguazado en un taller» de Trelew, tal lo documentado por Radio 3 Cadena Patagónica.

El tema es que un enfermero salió a desmentirlo y al final, la ambulancia del hospital de Puerto Pirámides no había sido robada y estaba en un taller.

La situación fue aclarada hoy por el enfermero Hugo Castro, quien está a cargo de la dirección del hospital de Puerto Pirámides. El profesional afirmó que él mismo dió la información a la Fiscalía que representa Carmona a través de un oficio, o sea que hay documentación oficial además, y aunque reconoció que lo hizo para alertar sobre la necesidad de subsanar la irregularidad porque el vehículo  estaba en ese taller desde 2018, confirmó que la ambuacian no había sido sustraída en un hecho delictivo, ni fue recuperada exitosamente por Carmona, sino que ellos mismos la llevaron para que sea reparada.

No está claro si por falta de repuestos, pagos del estado o por falta de seguimiento del trámite por parte del ministerio de Salud el vehículo permanecía en el taller, pero el hecho fue absolutamente diferente a como lo ventiló Carmona.

A veces la necesidad de títulos resonantes por abstinencia mediática ‘positiva’ pueden ser un grave problema para el trabajo público, como también los amagues de funcionamiento como mensaje encriptado, dicen los mensajeros de todos los reinos.

En una Provincia como Chubut, donde se han desaparecido tantos elefantes blancos, la ciudadanía necesita confiar por lo menos en la palabra Anticorrupción, no? En fin…