11 marzo, 2024
El gobierno nacional incorpora este lunes dos cambios fundamentales en los pagos con tarjetas de crédito y débito en comercios: mientras, por un lado, ya no será necesario presentar el Documento Nacional de Identidad (DNI) u otra credencial para acreditar identidad, por el otro, los plásticos solo podrán ser manipulados por el cliente.
Estas medidas se oficializarán este martes 12, con la publicación de una resolución en el Boletín Oficial. Sin embargo, su adecuación y aplicación, al ser de alcance nacional, podría demorar entre tres y seis meses; estando disponible, de ser así, en la segunda mitad del 2024.
Con este nuevo sistema, y a diferencia del procedimiento vigente, los cobros con tarjetas deberán hacerse con la presencia del cliente, ya sea en el mostrador, con un posnet normal, o con la disposición de un posnet inalámbrico, que no muchos locales poseen.
La propuesta consiste en que el portador de cada tarjeta sea quien utilice el dispositivo: si la tarjeta es contactless (tecnología de comunicación sin contacto que permite realizar pagos acercando la tarjeta o dispositivo inteligente a una terminal), simplemente deberá apoyarlo en el aparato; en caso de tener chip, deberá insertarla en el terminal en cuestión.
En ningún caso, con la manipulación de un tercero, misma situación que con el DNI, que solo podrá ser chequeado a modo de confirmación delante del cliente, con éste sosteniéndolo.
En la actualidad, y tomando como ejemplo el sector gastronómico, en la mayoría de los restaurantes o bares, un empleado retira la tarjeta de la mesa, la lleva al dispositivo y cobra la cuenta sin la participación activa del cliente, quien permanece en su mesa o silla. Sin embargo, con esta innovadora dinámica, será el aparato el que deba acercarse al lugar de la persona por pagar para procesar el mismo, permitiendo que sea el comensal quien pase la tarjeta sin la manipulación ajena del plástico durante el proceso.
Esta iniciativa tiene el objetivo de minimizar los casos de robo de datos de titulares y fraude con los plásticos, uno de los delitos cibernéticos más convencionales y por los cuales la Secretaría de Defensa del Consumidor recibió alrededor de siete mil denuncias en 2023.
A su vez, va en línea con las recomendaciones de seguridad que las propias entidades bancarias le dan a sus clientes. Lo que sucede muchas veces es que en el tiempo que la tarjeta está lejos de su dueño, alguien aprovecha para sacarle fotos de ambos lados, junto con el DNI del titular.
