25 noviembre, 2021
La propuesta ya obtuvo dictamen en la Cámara de Diputados y busca prevenir y reducir el impacto de los envases sobre el ambiente. Advierten que la suba de costos de las empresas se trasladará al mostrador; para el oficialismo, el impacto no llegará al punto del IPC; en el sector alimentos hablan de hasta 3%. Al kirchnerismo le significará una nueva caja millonaria que manejará Cambandié.
¿Otro ‘paquetazo’?: de qué se trata la Ley de Envases y porqué generaría mas aumento de precios
En un mundo en el que se recalientan los precios, en una Argentina que sufre un aumento del costo de vida galopante, el Frente de Todos impulsa en el Congreso –con un tinte vinculado a la protección del medio ambiente- un proyecto de ley de gestión de envases que sumará presión a la actual inflación por su impacto en los costos empresarios.
Lo admiten en el Gobierno, lo denuncian en la industria alimenticia y lo prevén los economistas consultados. La Tasa de Responsabilidad Extendida del Productor (Tarep), que incluye la iniciativa, se cobraría a los productos envasados–en sus precios mayoristas– e impactará en la ecuación empresaria. Ese golpe se trasladará al mostrador.
El proyecto de Ley de Envases, impulsado por el Poder Ejecutivo tiene un discurso ambiental aceptable: apunta a reducir su impacto sobre el medio ambiente y también sobre la población que se dedica a su reciclado. Sin embargo, desde la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina (AmCham) se mostraron en contra de esta iniciativa al considerarla «anacrónica».
La propuesta, que ya obtuvo dictamen en la Cámara de Diputados, aspira a la creación de una tasa ambiental que será abonada por los productores responsables de los envases puestos en el mercado y la generación de un sistema propio de recolección y reutilización.
Con lo recaudado por el pago de esa tasa se creará un fideicomiso, administrado por la banca pública que servirá para fortalecer los sistemas públicos de gestión de envases, promover la inclusión de las y los recicladores, impulsar la valorización de los envases y fomentar el desarrollo del ecodiseño, entre otros objetivos.
• Minimizar el impacto ambiental que los envases tienen a lo largo de todo su ciclo de vida, regulando su introducción en el mercado y la gestión post consumo.
• Reconocer, dignificar y mejorar el trabajo realizado por las y los cartoneros.
• Generar nuevos puestos de trabajo y circuitos productivos en el marco de la economía circular.
• Incentivar a través del eco-diseño la producción de envases y embalajes menos nocivos para el ambiente.
• Crear un Sistema Nacional de Gestión de Envases que coordine las gestiones con los gobiernos locales.
Cuáles son los fundamentos del proyecto
• En Argentina diariamente se producen 50.000 toneladas de residuos. Los municipios invierten entre el 10% y el 40% de sus presupuestos para gestionarlos.
• El 20% de los residuos son desechos sólidos urbanos generados por el consumo de envases, sólo el 9% termina en circuitos de reciclaje.
• Existe una red nacional de 150.000 cartoneros y cartoneras que se dedican a la recolección y reciclaje de los materiales. Un gran porcentaje de estos trabajadores realizan su actividad en condiciones precarias e insalubres.
• El proyecto fue escrito en conjunto con el sector de cartoneros y cartoneras, consensuado con las principales empresas del sector y la industria petroquímica. Las casas matrices de las multinacionales ven con buenos ojos esta ley.
• Desarrolla una política integral para la problemática del envasado que incluye al Estado Nacional, los municipios, los cartoneros y las empresas.
• Prevé mecanismos para articular el entramado productivo e industrial de las empresas, con los sistemas de reciclado desarrollados por los recuperadores.
• Establece las responsabilidades de los actores involucrados en el ciclo de vida de los envases, promoviendo un cambio de paradigma hacia un sistema más responsable.
• Los productores aportarán a una Tasa Ambiental que se destinará a reforzar los Sistemas de gestión.
• Actualmente, son los ciudadanos y el Estado quienes pagan por la gestión de los residuos, con una ley de envases, se reasignaría una parte de esta carga económica.
• Las empresas productoras asumirán el compromiso de responsabilizarse por la gestión ambiental de los envases que introducen en el mercado. Lo harán a través del pago de una tasa ambiental.
• Lo recaudado será destinado a fortalecer los Sistemas de Reciclado con Inclusión Social, mejorando las condiciones laborales de los recuperadores y recuperadoras.
Empresas de Estados Unidos que operan en la Argentina están en contra de la Ley de Envases
La Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina (AmCham) repudió la Ley de Envases luego de que la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados emitiera dictamen del proyecto en la tarde de ayer. En un extenso mensaje, detalló los motivos por los cuáles considera «preocupante» el avance de una ley «anacrónica».
En su descargo, AmCham expresó: «Ante la presentación de esta iniciativa, y su tratamiento en comisiones, la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina (AmCham) expresa su preocupación frente a una propuesta anacrónica, que no soluciona el problema de fondo y que, por el contrario, genera una mayor carga tributaria al tejido productivo, sin una clara contraprestación por los fondos que generaría este programa mediante el establecimiento de una nueva tasa para compensar los gastos que el sistema de gestión pública de residuos requeriría a futuro, poniendo en entredicho incluso el carácter federal de la norma».
Por otra parte, afirmaron su compromiso con el cuidado del medio ambiente y de la necesidad «de un adecuado marco regulatorio para el tratamiento y manejo de los envases utilizados en la comercialización de todo tipo de productos, que sea armónico con los estándares internacionales y compatible con la tecnología disponible en el país». Por otro lado, remarcaron su apoyo a los esquemas de reciclaje inclusivo, «pero cuando estos son factibles y lógicos, y sobre todo cuando consideran incentivos y beneficios para aquellas empresas que emplean materiales reciclables en sus envases y/o realizan inversiones en tecnología para mejorar el acopio y la reutilización».
Los puntos débiles de la Ley marcados por Amcham son: «que no permita a los sujetos obligados optar con claridad por sistemas locales de gestión implementados y financiados por el sector privado, bajo el control y la supervisión de la autoridad de aplicación» y agrega: «Otro de los puntos débiles del proyecto es el cálculo de la tasa ambiental, cuya fórmula se basa en el precio de venta (hasta el 3%), o bien, en el peso del material, sin tener en consideración el costo asociado al sistema de gestión propiamente dicho, y lo que es peor, cuya administración recae en un fidecomiso administrado por el estado, sin pautas claras de asignación, en especial, en un modelo de tratamiento de los residuos de carácter federal, por lo que desde varios sectores se ha solicitado la conformación de un ente mixto público-privado con representación pública pero también de los productores y recuperadores, los fabricantes de envases y la sociedad civil».
Además afirmaron: «Lo lógico, si todos estuviésemos de acuerdo, sería que la norma establezca la responsabilidad extendida y compartida del productor, fije metas graduales de recupero a nivel nacional, diferenciales por tipo de material y que incentive a los sujetos obligados a organizarse para alcanzar dichas metas un tiempo razonable y progresivo de implementación».
Amcham resalta que el proyecto es cuestionable por su «debilidad constitucional» al «vulnerar derechos de las provincias, básicamente, porque crea una caja gestionada por un fideicomiso de administración 100% público, una alquimia que lamentablemente se ha hecho habitual en la práctica legislativa, y otorga a la Nación potestades discrecionales para distribuir dineros públicos a actores municipales y sociales, pasando por encima de las autoridades provinciales, y alejándose de los parámetros más elementales en materia de ética y transparencia».
Las empresas señalan al Poder Ejecutivo en la creación de nuevos impuestos (en los que se estima será del orden del 3%) «sabemos que el pago de nuevos impuestos es un camino fácil, y nada efectivo».
Por último advirtieron las consecuencias que puede llegar a tener la medida en la industria: «obstruyen la generación de empleos, limitan las nuevas inversiones, propenden a escaladas de precios y crean un ambiente regulatorio hostil, restrictivo e imprevisible» resaltando la necesidad de mantenerse bajo reglas de libre empresa.
“Esas tasas siempre se pasan a precios”, afirmó Guido Lorenzo, director de la consultora LCG a LN. “El proyecto no es claro respecto a qué envases aplica. Puede haber más de un envase en la cadena de producción”, coincidió.
“Esto es one shot en precios. Sube una vez la tasa y después queda fija. Va generar un aumento de costos que se trasladará a precios. Está claro que si es a todo el universo de envasados se trata de un universo sensible, que incluye alimentos y los productos de higiene y limpieza”, dijo Lorenzo Sigaut Gravina, de Equilibra.
Mientras que contrariamente desde el Ministerio de Medio Ambiente afirman que “Es bajísimo el impacto en la inflación». La cartera que conduce Juan Cabandié es la impulsora del proyecto. Allí prefirieron poner el foco en los problemas ambientales y en la generación de empleo que impulsa la norma del oficialismo.
La Copal citó ayer un informe del Iaraf de 2019 en el que se calcula que la carga tributaria global para los alimentos llega al 38,8%; mientras que para las bebidas es de 47,2%. El artículo 4 de la iniciativa crea una excepción para la tasa a los productos destinados a la exportación.
Spotorno cree que por cada punto de tasa, el Gobierno recaudará $100.000 millones. Al máximo puede llegar a los $300.000 millones. En Ambiente no dieron un número pero lo consideraron “una locura”. Su presupuesto para este año llega a $15.000 millones. Como comparación, lo recaudado por el impuesto a la riqueza, un aporte creado por Máximo Kirchner, es de $236.500 millones en lo que va del año. Habrá que ver…
*NA/LN/IARAF