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6 mayo, 2023

10 AÑOS DE HISTORIA 'ARTICULADAMENTE' REPETIDA

‘Muros de los lamentos’: otra ‘malversación’ de los Centros de Encuentro, de espacio social a escuela de policías

Por Juana de Arco* – La intención de Mariano Arcioni es muy buena y busca dar utilidad a las inmensas estructuras que constituyeron en Chubut las ‘esculturas a la corrupción’ en obra pública, pero… Sin embargo, el anuncio no hizo más que remover indignaciones públicas contra las estafas recurrentes a las que fue sometida la ciudadanía en compromisos de campaña. La credulidad, sumada a la falta de movilización, dió y da  por resultado estafas reiteradas, que hemos terminado de pagar todos: léase escalonamiento de sueldos de empleados públicos, ciudades con la coparticipación pisada y ‘dibujo’ de obras de infraestructura, falta de proyectos productivos de envergadura que permitan pensar otra matriz paralela al crudo en retirada, y tantas otras postergaciones que en la última década y media venimos arrastrando.

La noticia plana y oficial de este martes, que se replicará como es debido, fue que el Gobernador firmó un acuerdo para destinar el Centro de Encuentro de Rawson a la formación de futuros agentes de Policía, y es una buena noticia al fin y al ‘cabo’, pero para la policía.

De hecho, el anuncio fue en el marco del acto central por el 60° aniversario de la Escuela de Cadetes del Chubut. Allí, el mandatario suscribió un acta compromiso para transferir ese espacio colosal que se erige en la Capital provincial -como en otras ciudades de Chubut-, en esta oportunidad, al Ministerio de Seguridad de la Provincia que regentea Miguel Castro. “Estará abierto a toda la comunidad, tanto el Centro Cultural como el anfiteatro y la pileta de natación”, remarcó con énfasis Arcioni. Casi anticipándose al pensamiento que se disparó en gran parte de la vecindad: «¿Pero no era que esos espacios estaban destinados a sacar a los chicos de la calle y fomentar la igualdad de oportunidades,  además de la integración social?» , reflexionó un vecino memorioso que abonaba las expectativas, que pese a todo lo que pasó debajo de esas estructuras, finalmente cumplieran su función.

Nada más lejos. Arcioni aclaró que se destinarán para formar policías y descargó parte de la responsabilidad en su aliado, el Intendente Damián Biss. Y es entendible: el que paga, rompe!

“Hemos tomado la decisión de transferir este Centro de Encuentro para que nuestra institución, nuestros cadetes, tengan la debida comodidad para poder formarse. Esta medida fue tomada en conjunto con el Intendente de Rawson para que el edificio también esté al servicio de toda la comunidad, tanto el Centro Cultural, como el anfiteatro y la pileta de natación”, aseguró el mandatario provincial sin especificar como Biss logrará la compleja convivencia entre la formación policial y el disfrute de los chicos de los barrios.

La conmemoración tuvo lugar este martes y contó con la participación de Biss, los ministros de Gobierno y Justicia, Cristian Ayala; de Seguridad, Miguel Castro; y de Infraestructura, Energía y Planificación, Gustavo Aguilera; el jefe y subjefe de la Policía de la Provincia, César Brandt y Juan Cruz Campos, respectivamente; miembros de la Plana Mayor; integrantes de la primera promoción de la Escuela de Cadetes e incluso titulares e integrantes de fuerzas de seguridad de La Pampa, Río Negro y Neuquén.

Para la idiosincracia de algunos sectores chubutenses la militarización de la sociedad es una de las soluciones a los conflictos sociales. El Centro de Encuentro barrial de Rawson, por pedido del Intendente Damián Biss, se dispuso ahora como escuela de Policía en lugar de espacio social, aunque con ´permiso de acceso’.

 

¿Cuanto sabemos y aprendemos de nuestra historia?

La lógica fue brutal pero entendible: son estructuras costosísimas que había que poner en valor y dar utilidad, aunque en el fondo suene a legitimar un poco más ‘la estafa’ que realizó el estado en 2013, cuando propuso esas estructuras ciclópeas con loables intenciones sociales, pero negocios oscuros detrás. Dos presuntos y luego comprobables objetivos centrales habrían tenido: emitir un bono en dólares -el BODIC1 cuando el dólar costaba $5,10 en 2013 (así como lo lée!) para financiar los 10 mamotretos llamados «Centro de Encuentros»,  y a partir de sus incomprobables costos, escurrir dineros públicos para el entramado político de turno, a través de contrataciones sobrevaluadas y a cambio de coimas. Algo que luego las constructoras reconocieron y confesaron en juicio abreviado, cumplieron probation y siguieron contratadas. Y sobre lo cuál los funcionarios apuntados fueron sometidos al escarnio público por un rato, pero finalmente nadie quedó ni preso ni empobrecido.

Eso sí, los chubutenses debieron pagar la deuda que se tomó y escurrió en esos Centros de Encuentro, y que 10 años después, son asignados a otros objetivos.

Otra preocupación, pero en grado de incógnita es cuanto más puso el actual gobierno para culminar esas mega estructuras que quedaron abandonadas, por caso, este Centro de Encuentro de Rawson, ya que no hay datos públicos accesibles de costos sumados para su culminación, ni empresas adjudicatarias. (Teléfono para los organismo de contralor)

Diez años debieron pasar para terminar uno de los Centro de Encuentros de Rawson, con más inversión pública y finalmente darle otro destino absolutamente opuesto a su orígen de campaña política. 

La necesidad comodorense de ‘pasar la hoja’

Para muchos no es casual que sea en este turno, cuando Arcioni, que llevó a juicio (blando, pero juicio al fin) a  los responsables de aquellos desmanes, sea quien le asigne utilidad a las estructuras.

Precisamente si hay una ‘mancha’ que las gestiones comodorenses arrastran, es todo este entramado de corruptela que debutó con la gestión del primer gobernador del Sur, el licenciado Martín Buzzi. El primer y único exponente político de primera línea delegado por Mario Das Neves, que luego lo traicionaría, fungiendo para el kirchnerismo puro, y que gobernó la provincia entre 2011 y 2015. Y hasta lo inculparía, por parte de todo el arrastre de negocios de esa época.

Buzzi, uno de los jovenes brillantes que reclamó el turno de Comodoro ante la imposibilidad de repetir mandato de Das Neves, no esperó ni lo que tardó en cantar el gallo bíblico para saltar el charco de acuerdismos, y cuando debió ‘negociar’ espacios para seguir gobernando con los empresarios ‘hermanitos’ del Valle, se puede decir que cometió los más groseros errores de gestión, para dar lugar a gran parte de los defalcos que serían luego juzgados (a medias), durante la gestión de otro comodorense. (Ver https://www.adnsur.com.ar/policiales—judiciales/una-por-una–las-causas-de-corrupcion-que-esperan-juicio-en-chubut_a60f9be86dba19c5b89e03e20 )

Todo eso sucedió en 2013, ya casi al final de la gestión de Buzzi, cuando en plena campaña legislativa y un poco a sabiendas de las pocas posibilidades de repetir mandato, Buzzi promovió los emblemáticos 10 Centros de Encuentro (‘encuentro de negocios Sur y Valle’ dirían los que saben).

Muchos de quienes seguíamos de cerca las recetas populistas integradoras de otros países latinoamericanos en ese momento lo mirábamos con sopresa y un poco de entusiasmo. Hay que decirlo: Buzzi fue uno de los Gobernadores que además de no tragarse las ‘eses’,  hilvanaba discurso convincente con base universitarias. «Son un enorme creador de nuevas oportunidades”, decía al resaltar en aquel memorable acto en Rawson “las distintas actividades que los vecinos podrán realizar” en las estructuras.

Buzzi sostenía además que aparte de la herramienta fundamental -que es la educación-, “los Centros de Encuentro también permitirán aumentar la igualdad”. Estos espacios “permitirán que los jóvenes cuenten con un espacio para desarrollar las habilidades y talentos personales”, indicando que de este modo“el Estado está brindando una puerta nueva para pasar la frontera que implica la desigualdad”. (Ver https://www.elchubut.com.ar/regionales/2013-10-11-buzzi-los-centros-de-encuentro-generan-enormes-oportunidades-para-los-jovenes )

‘Piletota’ y ‘zanahorias y conejos’ al margen, no sólo en Rawson se entusiasmaban con el gran lugar al ritmo de la proclama de la máxima autoridad, sino que el Gobernador de entonces anunciaba espacios similares «que se construirán también en las ciudades de Comodoro Rivadavia, Trelew, Esquel y Puerto Madryn y que serán financiados íntegramente por el Gobierno de la Provincia, a través de los fondos del Bono para el Desarrollo e Infraestructura de Chubut (BODIC 1)», anunciaba.

Y así fue, aunque terminar los mamotretos llevó más de 10 años y mucho desangre de las arcas públicas. De hecho, por el Bodic 1 tomado por unos 50 millones de dólares, uno de los dos títulos emitidos durante la gestión de Martín Buzzi, en 2019  hubo que pagar  U$S 13.887.500 para levantar la deuda (pero con un dólar a $335, no a $5 como emitió deuda!). Fue cuando los empleados públicos aguantaron ‘los trapos’ escalonados y hambreados, y luego, durante la pandemia, no había ni para vacunas.  (Ver https://www.diariojornada.com.ar/255706/economia/vencimientos_por_$_4000_millones )

Arcioni, que terminó siendo un ‘Curador de dolores’ de la política contemporánea (título de mi nuevo libro), fue probablemente el mejor exponente comodorense para mejorar la posición del poder sureño. Y en ese marco, el escribano no sólo dió fe, sino que buscó solucionar en el presente, los males del pasado, evitando en todo momento achacar responsabilidades tanto a Buzzi como a Das Neves, en el marco de la ‘sanación territorial’ y política que el establishment entiende que debe darse para darle continuidad a la historia ya los negocios ‘devidos’.

Todo esto a las puertas de una nueva elección y con otro candidato comodorense listo para acceder a la Gobernación, claro.

‘Todos los caminos conducen a Roma, muchachos’

Para los que miran procesos, no anuncios solamente, los Centros fueron efectivamente de Encuentro, pero para los ‘articuladores’ oficiales, aunque de Desencuentros con los vecinos y su buena fe. Entre bambalinas permitieron poner el foco de la política en otros bolsillos que no sea los de las grandes empresas, los concilió y encontró en otros entusiasmos personales, y les dió impulso al ‘hoy y ahora’. Esto, que dicho así puede ser un escandalete territorial, no es ni más ni menos que una práctica tan vieja como el sexo comercial o la corrupción en la antigua Roma, hacia donde todos los caminos entusiastamentemente conducían. Aunque no por ello sea menos delictivo el proceso.

Allí, en el corazón de la enseñanza imperial que mamó Occidente -la Roma excelsa- tampoco los tentáculos administrativos eran lo suficientemente largos para llegar hasta donde se requería, así que también se servían de terceros, los ‘publicani’. «Los ‘publicani’ eran empresarios privados o incluso sociedades (societates publicanorum) a los que se recurría para la construcción de la obra pública necesaria (acueductos, cloacas, calzadas…), la religiosa (templos), la de carácter propagandístico (estatuas, monumentos…) y la cultural (anfiteatros, teatros, circos…centros de encuentro al fin y al cabo), además de la reparación cuando estaban deterioradas cualquiera de ellas. Una vez que el Senado (Legislatura) había aprobado el gasto y presentadas las ofertas en papiro o pergamino enrollado y lacrado, los censores estudiaban las ofertas y adjudicaban la obra al proyecto que reuniese la mejor relación calidad/precio. Aunque en teoría el Senado controlaba la toma de decisiones de los censores, ser generoso con éstos o pertenecer a su círculo de amistades hacía que tus posibilidades de éxito aumentasen proporcionalmente a tu generosidad o grado de amistad». (Ver https://historiasdelahistoria.com/2016/06/29/adjudicaciones-obra-publica-la-antigua-roma-la-solucion-los-sobrecostes )

En fin. Cualquier relación con el presente chubutense, es pura coincidencia. A pensar y aprender rápido! que se nos acaba el mundo y la vida!, diría Séneca.

 

* Soy Juana de Arco, amiga de Francisco… y ceniza de tantos