6 mayo, 2023
La Liga Profesional de España debe aprobar un plan de viabilidad; el deseo de volver del rosarino choca con las dificultades del club para resolver en el corto plazo sus limitaciones económicas.
Lionel Messi ya decidió, pero como no todo depende de él, todavía no tiene club. El tiempo que le quita a los árabes para no responder a la propuesta millonaria que lo convertiría en el futbolista mejor pago del mundo (400 millones de euros), se lo concede al Barcelona para que pueda presentarle un plan de contratación, que además debe ser aprobado por la Liga Profesional de España.
El dinero que le sobra a Arabia Saudita es el que les falta a los catalanes. En esa encrucijada se dirime el futuro del argentino, en una decisión final que no debería ir más allá de los próximos días. A todas las partes les urge definir la situación. Messi dio una rápida vuelta de página a sus dos años en Paris Saint Germain, de donde se fue el sábado con tres títulos locales (dos Ligue 1 y una Supercopa), en una relación que pasó de la atracción inicial, en agosto de 2021, a un paulatino desencantamiento entre el rosarino, el club y los hinchas.
La posibilidad de Barcelona tomó más fuerza después de las declaraciones que Jorge Messi le dio al paso a los periodistas, tras reunirse durante media hora con el presidente Joan Laporta. El padre de Leo fue evasivo en algunas respuestas y más explícito en otras. “No sé nada, depende de un montón de cosas. Hemos hablado, pero nada concreto”, contestó ante las primeras consultas. “Por su supuesto que me encantaría que volviese a Barcelona, ya veremos, quedan por hablar un montón de cosas. Es una opción. ¿Si confío en que pueda regresar? Sí”, agregó, antes de entrar en el hall de un edificio.
Fuera de esta declaración pública, el clan Messi evalúa que el escenario es complejo, porque al margen de que el Barça reciba la luz verde de la Liga Profesional, después los dirigentes deben llevar a la práctica ese plan de viabilidad con transferencias y recortes salariales. En resumidas cuentas, los Messi no quieren que les pase lo mismo que en 2021, cuando Barcelona les dijo durante largo tiempo que “si” y llegado el momento de firmar la renovación fue un “no”. Desde el entorno de Messi dejaron trascender que esta incertidumbre lo tiene “mentalmente preocupado”.
El último domingo, durante la consagración del equipo femenino de Barcelona en la Champions League en Eindhoven, Laporta admitió: “Traer a Messi está difícil, ya veremos”. Y dejó otra frase sugestiva, como si se estuviera cubriendo por si no hay final feliz: “Quien hace lo que puede no está obligado a hacer más”.