13 noviembre, 2023
Las razones por las que el candidato intenta convencer a Carlos Melconian y a Marina Dal Poggeto para sucederlo en el ministerio de Economía
Roberto Lavagna es fundamental a la hora de armar los equipos económicos de Sergio Massa. No en vano, desde el año 2017, el ex ministro de economía de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner se convirtió en el alma mater de la escuela de gobierno del Frente Renovador.
Roberto Lavagna y Sergio Massa creen en los equipos de gobierno. Suelen «…despreciar a aquellos que simplemente plantean candidaturas sin plantear un modelo de país», explicó el actual candidato presidencial mientras que Roberto Lavagna decía, al inaugurar las aulas hace 6 años, «la escuela de gobierno del Frente Renovador será la escuela nacional del gobierno de la República Argentina».
Es, en ese contexto, por el cual, Sergio Massa tiene decidido quienes serán sus principales colaboradores en un eventual gobierno suyo, con nombres ya aprobados por el ex candidato presidencial Roberto Lavagna, que compartió fórmula en 2019 con Juan Manuel Urtubey, otro dirigente recién llegado a las filas del masismo, como los dirigentes Leonardo Madcur, que será designado presidente del Banco Central y, su propio hijo, Marco Lavagna, titular del INDEC o Gabriel Rubinstein, viceministro de economía que se desempeñó en el Banco Central durante la gestión de Roberto Lavagna en el Palacio de Hacienda.
De esta manera, Roberto Lavagna se posiciona como un primus inter pares entre los economistas que han sido convocados por Sergio Massa para delinear un plan de estabilización económica.
Se discute con economistas del kirchnerismo y de la liga de gobernadores peronistas para ejecutar un plan que contemple, entre otras medidas, alcanzar un equilibrio fiscal hacia mediados de 2024; la rápida acumulación de divisas para las debilitadas arcas del Banco Central que está protagonizando, en la actualidad, la peor crisis de reservas de su historia, y, medidas de impacto para fortalecer los ingresos de las clases más postergadas arruinadas por las recientes devaluaciones de la moneda nacional.
Ahora bien, en este máster plan en el que están trabajando activamente de manera conjunta, se toma especial atención al segundo punto, donde los contactos internacionales con los Estados Unidos del propio candidato presidencial del oficialismo son vitales para recuperar reservas, y en el tercer punto, bajo la premisa de no realizar un ajuste salvaje que termine por empeorar los datos sociales actuales que son catastróficos.
En la reciente historia económica de la Argentina, cada «salvador» necesitó previamente de un ministro de economía que hiciera la «tarea sucia», como Remes Lenicov en el caso del propio Lavagna; Hernán González en el caso de Domingo Cavallo o, más atrás en el tiempo, Bernadro Grinspun antes de la aparición de Sourrouille, pero, en los tiempos actuales, la posibilidad de un ordenamiento ortodoxo con fuertes implicancias sociales no es una posibilidad para el programa de gobierno de Sergio Massa ni para muchos sectores del kirchnerismo que asienten en público pero monitorean en silencio.
Por ello, el candidato oficialista habla, cada vez más, de «un gobierno de unidad nacional», con todos aquellos que comparten las premisas de defensa de la industria nacional y se ha puesto en reclutador de un economista que posea un plan integral y no de uno que funcione como «fusible» y válvula de escape del malestar social que podría generar un violento ajuste de la economía.
En ese sentido, crecen las chances de alcanzar un entendimiento con Carlos Melconian, que viene de dejar la Fundación Mediterránea y de asesorar a la excandidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, y que ha generado una propuesta económica que puso al servicio del candidato presidencial que desee tomarla e implementarla.
También, con menores posibilidades de ser la elegida, surge el nombre de Marina Dal Poggeto que en recientes declaraciones periodísticas afirmó que Sergio Massa consiguió estabilidad en el Gobierno, pero no cambió el rumbo económico, por lo que profundizó los problemas.
«Las decisiones se postergaron con la lógica de siempre, que el ajuste lo pague el que viene», afirmó la economista al periodista Jorge Fontevecchia en Net TV.
Directora ejecutiva de EcoGo consultores, Marina Dal Poggeto estudió en la facultad de económicas de la UBA, y crecio junto al equipo de Miguel Bein, otro de los analistas que suele dialogar con Sergio Massa.
Hace un mes, Dal Poggeto, era la favorita de Sergio Massa para sucederlo, pero las conversaciones parecen haberse detenido y los posibles nombres para ocupar el ministerio de economía en una continuidad del oficialismo en la Nación continúan multiplicándose.
Sin embargo, existe un dato central que favorece a Melconian y a Dal Poggeto. La coincidencia en el diagnóstico del paciente que es la Argentina.
Un país donde la frase «es la economía, estúpido», popularizada durante la campaña presidencial estadounidense de Bill Clinton en 1992 contra George W. Bush (p) que le sirvió para acceder a la Casa Blanca, no funciona ni tiene el mismo efecto que en los Estados Unidos.
Para Massa, pero, también, para Dal Poggeto y Melconian, es la política. «Si la política sigue pensando sólo en el corto plazo y buscando atajos a complejos problemas macroeconómicos, la Argentina no tiene salida», explicó un asesor que sigue el día a día de las conversaciones.
*iP/ by Antonio D’Eramo