30 junio, 2023
FUERTES RECLAMOS POR LA POBRÍSIMA GESTIÓN PÚBLICA
Otra empresa textil al borde del colapso en el Parque Industrial de Trelew por el siempre vigente combo de costos, coyuntura económica insostenible, servicios deficitarios y ausencia casi absoluta de gestión pública. A la par el consorcio denunció agua casi putrefacta con la que no pueden operar pesqueras ni empresas de gaseosas.
Según explicó el gerente de Soltex, Raúl Ramírez, la deuda con la empresa de gas y con la cooperativa asciende a unos 29 millones y la Cooperativa no les concederían un nuevo plan de pagos. Los casi 50 operarios fueron enviados a la casa ante la imposibilidad de seguir produciendo, y la firma corre riesgo cierre.
La situación fue confirmada por Ramírez a Radio Chubut sin concerse hasta el momento como gestionarán una medida de resolución, y hasta el mediodía de este viernes no habría intervención de funcionarios para mediar en función de la continuidad de los puestos de trabajo.
Un reclamo que acercaron algunos vecinos por redes sociales tras conocerse el caso, considerando la responsabilidad que les cabe a intendente, secretarias de desarrollo y producción, cámaras afines y hasta titulares de entes de servicios públicos que deberían acercar propuestas de solución para tratar de mantener la actividad productiva y los puestos de trabajo.
Como expresó un vecino ofuscado en un medio del Valle, «Están matándose por conseguir nuevas inversiones para Trelew, pero no cuidan lo que hay ni gestionan para tratar de acercar soluciones a las complicaciones que las empresas van teniendo con este país de locos».
En concreto Soltex le debería sólo a la Cooperativa Eléctrica unos 29 millones de pesos por al menos 5 facturas impagas. Con lo que se infiere que la empresa estaría pagando facturas mensuales de casi 6 millones de pesos, algo a todas luces aparece como un costo complicadísimo de sostener.
De acuerdo a la información trascendida por RCH, el dueño de la firma, Sebastián Santiago, habría pagado la deuda con cheques sin fondo, por lo que el margen de maniobra que tendría como usuario de la Cooperativa sería nulo para un nuevo plan de pagos.
Soltex ya arrastró una crisis casi terminal hasta que la compró Santiago hace casi 10 años. Fue en épocas donde el Parque Industrial de Trelew seguía desmantelándose ya que siempre corrió con desventajas logísticas e impositivas comparadas al resto de los núcleos productivos del país. Tampoco ofrecía mayores posibilidades de progreso, como ahora, y la sitación económica del país era de inestabilidad absoluta. En esa época se sucedieron cierres a gran escala, disparando los números de desocupación en el Valle.
El empresario Sebastián Santiago (izq) con sus apoderados, en una de las tantas defensas que fue realizando frente a los presuntos ‘aprietes’ del gremio AOT, que terminó con conciliación e implementación de ‘becas municipales’
Frente a ese escenario, sin el aporte firme del Estado, era improbable la radicación de empresas, o al menos de capitalistas interesados. En junio de 2012 apareció este inversor y el Estado acompañó y esta textil icónica de Trelew volvió a producir. Y aunque nunca alcanzó el pleno de su capacidad, reactivó casi todas las líneas productivas, mantuvo el personal activo y hasta sumó becas municipales. Un tema que parece ser otra de las cuestiones de la ‘retirada’ empresaria al ritmo del fin de la era madernista.
«No dependemos de nadie, tenemos todos los procesos dentro de Soltex, por lo tanto, lo que hacemos es desde el ingreso de la fibra acrílica, fabricar el hilo, retorcerlo, teñirlo, tejerlo, y ese producto es la lona acrílica que usa una empresa multinacional y otra nacional para la sombrilla de los bares, que es un mercado que está en auge», explicaba Santiago a un medio especializado en textiles hace un tiempo, cuando la cosa parecía ir encaminándose pese a los altibajos permanentes de cumplimiento de pagos.
En 2019 aproximadamente Soltex comenzó a implementar un sistema de «becas del municipio de Trelew», capacitando gente y «dando cuatro horas de trabajo por día, pero se pueden quedar un tiempo más donde se les pagan horas extras», afirmaba su CEO.
También sumó alianzas con dos empresas de Buenos Aires, «que producen en Dolavon, donde se hace acrílico para hilados manuales».
Todo eso fue constatado por el entonces coordinador de la Agencia de Desarrollo Productivo y Economía Social, Hugo Schvemmer; y los concejales, Lorena Alcalá, Juan Aguilar y Ezequiel Perrone, quienes en su momento recorrieron la planta y se interiorizaron sobre el proceso íntegro de producción.
Sin embargo entre medio hubo un sinnúmero de reclamos de trabajadores y núnca se terminó de estabilizar del todo la empresa. En marzo de este año comenzaron otra vez una serie de reclamos salariales por deuda de quincenas y el gerente Raúl Ramírez reconoció públicamente las dificultades que arrastraba Soltex para sostener la productividad, cumplir con las entregas de mercadería pautadas y poder abonar salarios. Todo debido a la compleja coyuntura nacional y a los costos.
La situación expone la agónica posición de la empresa, que no es exclusiva de Soltex en el Parque Industrial de Trelew, pero también la incapacidad de gestión de parte del Municipio, más allá de los onerosos sistemas de becas por política que ahora comenzó a desandar en función de la entrega de mando que deberá realizar en unos meses tras perder el control municipal el madernismo.
Desempoderado y ausente- Adrián Maderna habría relajado peligrosamente las actividades esenciales de la gestión a cargo de la intendencia a partir de su derrota electoral. La crisis productiva de Trelew será una de las grandes herencias que quedarán de sus 8 años de mandato
Muchos recordaron que al inicio de la segunda gestión de Adrián Maderna el intendente ‘vendió proyectos de energía sustentable para Trelew en el marco de la ampliación de un parque eólico ya existente, e incluso tuvo reuniones en Buenos Aires con un posible inversor en un barrio sustentable, un poco más cerca Maderna se formó en Barcelona en un encuentro de ‘ciudades del futuro’ todas propuestas que en la práctica podrían aplicar algo vinculado a los costos de los servicios para la producción. Por caso, la Ley Guinle preveía tiempos para ir realizando cambios en la matríz energética de las industrias y comercios, incluso en shopping y supermercados y está plenamente vigente previendo que se sustente hasta un 20% para 2025.
Esa Ley, la Ley 27.191 fue reglamentada por el decreto 531/2016 y da pie a financiamientos y acompañamiento de diferentes organismos para que los grandes consumidores comiencen a solucionar y reemplazar sus consumos. Esto requiere de gestión por supuesto, algo que en Trelew la gestión Maderna desconocería de plano.
En marzo de 2023, cuando se estaba pergeñando el adelanto de las elecciones, el Ejecutivo Municipal de Trelew envió un proyecto de ordenanza al Concejo Deliberante estableciendo beneficios tributarios a quienes inicien nuevas actividades industriales y productivas y generen empleo genuino. Ese Plan de Reconversión y Reactivación del Parque se propuso tras el cierre de otra emblemática fábrica como Sedamil, que desempleó a 300 trabajadores.
La propuesta fue aprobada con el voto unánime de todos los bloques, pero no todo es impuestos, también debe haber seguimiento y gestión.
En coincidencia con la situación ahora de Soltex al borde del cierre, el Consorcio de Parque Industrial de Trelew advirtió también este viernes que correría riesgo también el funcionamiento de las plantas textiles, de aguas gaseosas y pesqueras que funcionan en ese enclave industrial porque la provisión de agua, un insumo básico para el funcionamiento no estaría potabilizada conveninetemente.
Según testimonios de Pablo Rojas a RCH, «la situación de abandono ‘por parte del estado provincial’ sería tal que ni siquiera se realiza el trabajo de clorado del agua con el que se mejora el líquido crudo que llega desde el río Chubut para evitar sedimentos en el sistema y la acumulación de algas».
«Se van tapando las cañerías y se ensucian las cisternas», explicó Rojas quien deschavó un caso puntual en el que el empresario debió correr dos capas de floración que se juntaron en el tanque para poder ver el agua debajo de esa costra.
También recordó que el cloridificador que se estaba usando fue adquirido con el aporte de los empresarios, cuando debe ser la Provincia la que realice la inversión teniendo en cuenta que ellos pagan una elevada tasa para operar allí.
Este escenario de industrias en retirada con la consiguiente pérdida de puestos de trabajo y actividad comercial, servicios públicos deficientes, desinversión y desidia pública es lo que recibirá la nueva gestión de la ciudad. Todo un desafío.
*RCH/R3/CHL
