19 septiembre, 2020
CHUBUT BUSCA REESTRUCTURAR U$S 700 MILLONES QUE EN 'LIQUI' SE LE IRÍA AL DOBLE
Las restricciones para acceder al dólar complican los procesos de reestructuración que llevan adelante doce provincias para reperfilar títulos y recortar cupones, entre ellas Chubut que buscar reperfilar cerca de u$s 700 millones, por los que tiene comprometidos gran parte de sus ingresos por regalías hidrocarburíferas.
El tema es que cuando el ‘exitoso’ canje de la deuda en dólares en el tramo local y extranjero parecía allanar el camino para que las provincias también lograran reestructurar sus pasivos, las negociaciones de los gobernadores con los acreedores se empantanaron y debieron postergar ya en varias oportunidades los plazos para adherir a las ofertas, sin que todavía aparezca un arreglo a la vista.
El monto que doce distritos buscan reperfilar y recortar cupones suma más de USD12.000 millones, de los cuales unos USD7.000 millones corresponden a la administración bonaerense. Sin embargo, a más de un mes de que el ministro de Economía, Martín Guzmán, anunciara el principio de acuerdo con los principales fondos de inversión, el gobierno de Axel Kicillof tuvo que patear por séptima vez el período para que los tenedores de bonos acepten la propuesta, que además es mucho más generosa que la del titular del Palacio de Hacienda.
Lo mismo le ocurrió a Mendoza, que de todas formas está muy cerca de lograr el 75% de adhesión que necesita para activas las Cláusulas de Acción Colectiva (CAC) y así reestructurar un bono por USD590 millones, mientras que Neuquén dio tiempo hasta este viernes a los acreedores para ingresar al canje, lapso que probablemente deba extender otra vez.
Lo cierto es que desde Economía monitorean los procesos de reestructuración que están llevando adelante las jurisdicciones subnacionales desde la Unidad de Apoyo de Sostenibilidad de la Deuda Pública de las provincias, con el objetivo de lograr achicar al mínimo los cupones con un step up y, principalmente, que los vencimientos de capital caigan después de 2023, de manera de cortar otra de las vías de escape de dólares.
“De acá a fin de año, sin contar a Buenos Aires, quedan pagos de provincias por USD200 millones, que no tienen demasiado impacto en las reservas”, detalló Guillermo Giussi, de la consultora Aerarium. “Lo más difícil es que los acreedores acepten cupones de 0,5% desde el 8% o 9% que pagan actualmente. Los canjes se están estirando demasiado, la macro no ayuda y las nuevas trabas al dólar suman ruido. El bono AL30 ya rinde 13% de TIR lo que significa que para las provincias, la exit yield de los nuevos títulos van a estar arriba de esa cifra”, advirtió.
Por su parte, Miguel Arrigoni, de FIRST Capital Group, apuntó que “ahora van a reestructurar deuda empresas que no necesitaban hacerlo, es algo inédito”. Mientras tanto, “las provincias van a poder seguir accediendo al mercado cambiario y eso puede ser un argumento a favor de los acreedores”, sostuvo.
En ese sentido, Giussi destacó que “si el Central no les vende los dólares, los prospectos indican que las provincias deben ir al contado con liqui, por lo que les va a salir el doble”.
El proceso de reestructuración en medio del cepo al dólar y a la sospecha que varios estados subsoberanos tienen fondos en cuentas y plazos fijos, no ayuda para nada a convencer a los bonistas sobre una necesidad extrema de pedalearles la deuda.
En el caso provincial, el gobierno de Mariano Arcioni busca refinanciar dos títulos: el Bocade, por USD650 millones y el Bopro, por USD50 millones.
Según indican fuentes del mercado y de acuerdo a lo poco que precisa el ministerio de Economía provincial, Chubut ya realizó los primeros acercamientos con los representantes de los acreedores externos. Desde el Ejecutivo chubutense están preparados para un proceso de renegociación que podría extenderse por entre 30 y 60 días más, aunque se trabaja contrarreloj. De hecho, ya advirtió el ministro Oscar Antonena que ‘de máxima’ se buscaría reestructurar también el vencimiento de u$s 40 millones que se debería pagar en octubre.
El apuro de Chubut por avanzar en la refinanciación es que, al igual que otras provincias productoras de petróleo, sus bonos están atados a las regalías petroleras, por lo que los repagos se realizan de forma automática una vez que los fondos provenientes del petróleo ingresan a un fideicomiso. Y de no alcanzarse un acuerdo con los bonistas antes de la próxima semana, difícilmente se evite el descuento del pago de octubre.
*BAE, NA, AF, propias