4 agosto, 2024
POLÍTICA Y AGENDA EN PERSPECTIVA
El desafío del segundo semestre del año para la gran mayoría de las Provincias pasa por ordenar la caja con Nación y reacomodar las iniciadas gestión con los cercenamintos de caja y el paorate de la obra pública entre los principales temas.
La semana pasada hubo un encientro en Casa Rosada previo a la cumbre del PRO. Habrá que ver si se trató de un ‘mimo’ de oportunidad a los mandatarios amarillos o efectivamente fue la apertura de un canal de diálogo con resultados. Por lo pronto el mitin oficial no fue demasiado difundido y mcho menos convoliddo por la gestión libertaria con algun anuncio contundente Francos escuchó y presuntamente definió algunas cosas. Allí estuvieron también presentes el vicejefe del Interior, Lisandro Catalán, y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, en representación del área de Luis Caputo, en definitiva, ‘el dueño de la pelota’ de todo lo que se termina acordando con el interior, que en su mayoría tiene que ver con recursos y finanzas.
En esa mesas estuvieron nueve de los diez los gobernadores que integran el espacio de Juntos por el Cambio.
Los mandatarios provinciales llegaron a Casa Rosada con un listado de particularidades de la más variadas: desde el reclamo por la cancelación de deudas hasta detalles necesarios para el avance de la obra pública.
«Tuvimos una muy buena reunión en la que hablamos de la posibilidad de darle celeridad en la reactivación de muchas obras», contó Ignacio Torres, gobernador de Chubut, el único que habló con los medios acreditados en Casa Rosada.
Estuvieron presentes en el extenso intercambio que tuvo lugar en el Salón de los Escudos y que se extendió poco más de dos horas, Ignacio Torres (Chubut), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Leandro Zdero (Chaco), Carlos Sadir (Jujuy), Alfredo Cornejo (Mendoza), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Jorge Macri (Ciudad Autónoma de Buenos Aires). El único ausente fue Gustavo Valdés (Corrientes).
La reunión, que contó con la presencia del asesor estrella, Santiago Caputo, posibilitó acordar mecanismos para “compensar” las deudas entre la Nación y las provincias, y la operativización de las transferencias de las cajas. Gran parte del temario giró en torno al conflicto abierto por los fondos que adeuda Nación para el pago de jubilaciones y pensiones provinciales.
En la búsqueda de acuerdos entre los actores, se propuso avanzar en un sistema de cancelación de deuda entre las partes. “Una de las ideas es compensar. Es decir, netear deuda con otras deudas. Eso sería una solución de costo fiscal cero”, planteó una fuente.
Otro de los temas de la reunión técnica fue la ejecución de las obras públicas cedidas a las provincias. Si bien el listado de obras prioritarias está blanqueado, los gobernadores reclamaron precisiones respecto a los plazos, a los detalles en la ejecución y a la modificación en los precios.
En algunos de esos proyectos, la Nación mantenían deudas con los contratistas por lo que las obras se encontraban paralizadas. De esta forma, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se comprometió a saldarlas para que las provincias puedan concluirlas. “Se van a peinar todas las obras para hacer un corte, y después nos vamos a hacer cargo”, reveló uno de los presentes.
También hubo reclamos por los cambios en Vialidad Nacional marcados por el desplazamiento de funcionarios nacionales elegidos por los gobernadores.
Por su parte, el jefe de Gobierno porteño llegó a la reunión con el conflicto por la coparticipación resuelto luego de la reunión que mantuvo con el ministro de Economía, Luis Caputo, aunque aún restan saber detalles respecto de la forma en la que se abonará el retroactivo.
Lo cierto es que tras la sanción de la Ley Bases y el paquete fiscal, los representantes provinciales enviaron su mensaje y remarcaron su rol de garantes “ante la debilidad legislativa” del Gobierno.
En esa línea, buscan intención de impulsar una matriz fiscal más progresiva marcada por una simplificación tributaria, en el marco de las tareas que llevará adelante el Consejo de Mayo. A días de la fecha límite de su conformación, aún no cuentan con representante designado.
Minutos antes de las 13, el subsecretario de Gestión Institucional, Eduardo “Lule” Menem, se sumó al intercambio y algunos minutos después lo hicieron el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y la secretaria de Planeamiento Estratégico Normativo, María Ibarzabal Murphy.
A pesar de los detalles técnicos, se coló el intercambio el reclamo de los gobernadores que apuestan que avanzar en una mesa legislativa “que sea consensuada y no impuesta” por el Poder Ejecutivo. “Es necesario trabajar sobre los temas que siempre se discuten pero no se resuelven”, puntualizaron.
Los mandatarios del PRO, que abandonaron Casa Rosada a paso firme y sin hacer declaraciones públicas, apuestan a que el mensaje que da la administración libertaria coincida con las medidas que impulsan. “Si hay vocación reformista de ir a una Argentina federal nos van a encontrar a todos”, declaró uno de los participantes.
Tras la cita en Balcarce 50, los gobernadores y el alcalde porteño formaron parte del relanzamiento político del expresidente Mauricio Macri en plena interna del partido en el Arenas Studios del barrio de La Boca.
El partido amarillo está envuelto en un puja interna por el rol que adopta frente a la administración que encabeza el presidente Javier Milei. Allí Mauricio Macri, único orador del mitin fue contundente en favor de acompañar la gestión, pero sin dejar de marcar las diferencias.
El pasado lunes, Milei y Macri cenaron en la quinta de Olivos en lo que el vocero presidencial, Manuel Adorni, calificó como una reunión “de amigos”. Días después, Santiago Caputo rompió el silencio y dedicó elogios al titular del PRO.
Pero finalmente Macri marcó otra cancha mucho mas distante: «Antes de casarse hay que convivir», fue la frase con la que dejó claro que -por ahora- los amarillos no se mimetizarán con los libertarios.
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