24 julio, 2023
El descanso profundo sin dormir es un estado en el que la persona se sumerge y experimenta una sensación de calma y reparación. Durante este tiempo, el cuerpo y la mente tienen la oportunidad de rejuvenecerse y recuperarse.
Enfrentarse a jornadas laborales largas puede resultar desafiante. A menudo, llega un punto a mitad del día en el que nuestra mente parece no poder rendir más y nos cuesta mantener la concentración. Experimentamos irritabilidad y nos lleva más tiempo completar tareas simples. Cuando nos enfrentamos a problemas de cansancio o falta de energía, algunos optan por tomar una siesta para resolverlo. Sin embargo, aunque puede ser efectivo en ciertos casos, no siempre es la mejor solución. Una alternativa muy beneficiosa es el descanso profundo sin llegar a dormir.
La fórmula que te presento fue propuesta por Andrew Huberman, un reconocido neurocientífico de la Universidad de Stanford. Según él, esta fórmula podría ser una excelente manera de recuperarse a nivel físico y mejorar el rendimiento cognitivo. Este tipo de tecnología resulta especialmente interesante para emprendedores, CEO y personas que enfrentan una alta carga mental o trabajan bajo presión. Sin embargo, es útil para todos, independientemente de su ocupación. A continuación, te explicaremos por qué su uso puede beneficiarte.
La técnica conocida como “calma profunda” se basa en lograr un estado de relajación profunda, similar al sueño pero sin llegar a dormir. Durante este proceso, el cerebro experimenta ondas theta y alfa, lo que ayuda a reducir la actividad mental y relajar el cuerpo.
El non sleep deep rest (NSDR) es una técnica inspirada en el Yoga Nidra que tiene similitudes con la hipnosis y la meditación. Su objetivo es calmar tanto el cuerpo como la mente, invitando a la persona a enfocar su atención en sensaciones específicas.
Al practicar esta técnica, se consigue escapar de las distracciones externas al disminuir la percepción del espacio y el tiempo. También nos permite liberarnos del constante juego mental de pensamientos y preocupaciones que nos agobian.
Adentrarse en este estado de ensueño, aunque sea por periodos cortos, proporciona significativos beneficios según una revisión publicada en Sleep and Vigilance. Algunas de las principales ventajas incluyen:
Proporciona descanso físico y mental
Cuando nos encontramos cansados, es común pensar que descansar físicamente será suficiente para resolver el problema. Sin embargo, es importante tener en cuenta que existen diferentes tipos de cansancio y el mental no se combate simplemente inmovilizando el cuerpo. En realidad, debemos brindarle un descanso a nuestra mente para recuperarnos adecuadamente.
Después de una mañana de trabajo mentalmente exigente, en la que has estado razonando, resolviendo problemas o generando ideas en un estado mental activo llamado ondas beta, es importante poder descansar profundamente sin necesidad de dormir. Este tipo de descanso nos permite desacelerar nuestros pensamientos y alcanzar estados cerebrales que nos brindan calma y restauración. Según un estudio realizado por Kumar & Joshi en 2009, estos momentos de paz mental son extremadamente beneficiosos para nuestra salud y bienestar.
Reduce el estrés
Según el VII Estudio CinfaSalud, el estrés es un problema común en España. Se estima que afecta al 96% de las personas de manera ocasional y a más del 42% de forma continua. Este estudio ofrece información sobre la percepción y hábitos de la población española en relación al estrés.
De acuerdo con un estudio publicado en Cell Reports Medicine, se ha encontrado que la práctica de la respiración profunda, como la utilizada en el NSDR (Respiración Diafragmática Natural), tiene diversos beneficios tanto a nivel físico como psicológico. Entre ellos se incluye la reducción de la activación física y psicológica, disminución de la ansiedad y mejora del estado de ánimo.
Cuando nos relajamos, nuestro ritmo cardíaco disminuye, nuestra respiración se vuelve más profunda al expandir nuestra capacidad pulmonar y nuestra atención se concentra. Estas sensaciones agradables de relajación nos ayudan a protegernos contra los efectos negativos del estrés en nuestro cuerpo.
Tomarse este tipo de descanso no solo es una excelente estrategia para aumentar la productividad y el rendimiento laboral, sino que también ayuda a mejorar el funcionamiento cognitivo. Al descansar, permites que tu mente se relaje y recargue energía, lo cual se traduce en un mejor desempeño en tus tareas y decisiones laborales.
La utilización de manera específica de la tecnología favorece varios aspectos positivos para el funcionamiento del cerebro. Por ejemplo, ayuda a retener información, potencia la memoria y el aprendizaje, y promueve la neuroplasticidad. Todo esto se traduce en un mejor rendimiento cognitivo y una mayor concentración al realizar tareas.
Según un artículo publicado en Annals of the New York Academy of Sciences, se ha sugerido que las prácticas meditativas pueden ser una valiosa herramienta en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas.
Potencia la creatividad y la motivación
Estos pequeños descansos también son beneficiosos para el aspecto creativo, la apertura mental y el pensamiento original. La razón de esto se debe a dos factores: en primer lugar, el cerebro entra en un estado de ondas theta, asociadas a la creatividad; y en segundo lugar, aumenta la dopamina en la vía nigroestriada del cerebro, que está relacionada con el pensamiento divergente.
La dopamina es un neurotransmisor importante que se encarga de la motivación, el refuerzo y la determinación. Por lo tanto, al practicar el NSDR (Neuromarketing Socialmente Responsable), se puede obtener el impulso necesario para concentrarse y alcanzar metas específicas.
Es útil para combatir el insomnio
Aunque parezca paradójico, descansar sin dormir puede ser una estrategia útil para las personas que sufren de insomnio. Durante la práctica, si bien el objetivo no es quedarse dormido, ciertamente ayuda a controlar y regular de manera más efectiva la activación del cuerpo y mente, así como la capacidad de relajarse.
Esta práctica es simple y no requiere mucha preparación. Solo necesitas acostarte boca arriba en una superficie cómoda, cerrar los ojos y comenzar a practicar una respiración lenta y profunda.
Para entrar en un estado de relajación profunda, puede utilizar la ayuda de un guía virtual que le brinde instrucciones precisas a través de audio. Este guía le irá indicando cómo escanear mentalmente su cuerpo, permitiéndole sentir el contacto con la superficie y enfocar su atención en diferentes áreas corporales. Esta técnica le ayudará a lograr una relajación más intensa y profunda.
No hay un tiempo establecido para completar esta práctica, ya que puede variar según tus necesidades y el tiempo disponible. Por lo general, se puede realizar en unos 10 minutos, pero si dispones de más tiempo o deseas profundizar en el tema, puedes extenderla hasta media hora o incluso una hora. La duración depende de ti y de tus objetivos. Es aconsejable establecer una rutina diaria y practicar a la misma hora todos los días para mantener una regularidad. Esto nos ayudará a ser más disciplinados y consistentes en nuestras actividades.
El descanso profundo sin dormir puede convertirse en un gran aliado para combatir el cansancio y el agotamiento mental, renovar la concentración, la motivación y potenciar nuestra creatividad. Si desarrollamos este hábito, podemos experimentar beneficios notables en nuestra productividad. ¿Por qué no darle una oportunidad?.
