8 abril, 2024
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) suspendió el paro de colectivos y continuará la negociación el miércoles a las 13 horas. La Secretaría de Trabajo pidió que las negociaciones se prolonguen y vuelven a reunirse el miercoles
La Secretaría de Trabajo intercedió y solicitó que se prolonguen las negociaciones por las diferencias en el salario básico de los trabajadores.
Para la jornada de este lunes a las 18 se esperaba una medida de fuerza pero la secretaría de Trabajo intervino y citó a las partes para el miércoles 10 a las 13 horas.
Hasta ese momento y en «procura de la paz social» y “no paralizar un servicio de gran relevancia para millones de personas”, se suspende la medida y se espera que el miércoles haya “ una determinación final”, expusieron desde la UTA en un comunicado.
“Si aparecen los $250.000 de diferencia, trabajamos normalmente”, dijo el secretario general de UTA Roberto Fernández tras una reunión con las cámaras empresarias y la cartera laboral.
De esta forma, Fernandez puso como plazo final la reunión del miércoles para dar cumplimiento al acuerdo salarial homologado. Se desprende de ello que la medida de fuerza queda stand by y la incertidumbre de millones de usuarios pasa al miércoles al mediodía.
Los 250.000 pesos a los que Fernandez hace referencia, viene siendo la base del conflicto. SI bien hay un acuerdo por esos 250.000 pesos con las empresas de transporte, el Estado aún no le reconoce en la estructura de costos esos acuerdos a las empresas y por ende no se los paga, y las empresas no pueden hacer frente al pago.
La UTA reclama que al básico de marzo se le incorpore la suma no remunerativa de $250.000 pactada para febrero, mes en el que el sueldo inicial alcanzaba los $737.000. Es decir, el sindicato pide que el básico a cobrar sea de 987.000 pesos.
Las empresas operadores de transporte de pasajeros, por su parte, publicó un comunicado donde le solicita la actualización de costos a la secretaría de transporte: “Solicitamos a la autoridad de aplicación (en referencia a la Secretaría de Transporte) que proceda de manera inmediata a corregir los cálculos que determinar los niveles de ingresos necesarios para operar”.
Las empresas de transporte aseguran que la diferencia entre el costo real y el reconocido es del 50%: “A la fecha entre tarifa y subsidios se reconoce apenas 650 pesos por viaje cuando el costo real (objetivamente medido) es de 1200″.
Por su parte, la Secretaría de Transporte afirma que “no tiene injerencia en los acuerdos de paritarias que mantiene la UTA con la patronal, no es parte del acuerdo y por ende no es responsable de los mismos. La Secretaría de Transporte de la Nación hizo lo que le correspondía y concretó un reconocimiento de costos del sector, manteniendo diálogo con las Cámaras. No puede intervenir de otra forma ya que no es parte del conflicto”.
El conflicto continúa y el miércoles se volverán a ver las caras las partes y la disputa sigue con final abierto. De ello depende que millones de personas puedan volver a su casa en transporte público el próximo miércoles.