14 abril, 2021
En Brasil, Bolsonaro apoyó que se los industriales compraran vacunas para sus trabajadores para no detener la recuperación económica.
La Junta Directiva de la UIA mantuvo un encuentro con Matías Kulfas en el que se abordó la importancia de los protocolos sanitarios para sostener la recuperación económica en las industrias y se ponderó que los trabajadores de riesgo ya vacunados puedan volver a las fábricas. Además, se planteó la necesidad de priorizar la vacunación para que las industrias no paren. El encuentro fue por zoom y se extendió por unas tres horas.
El vicepresidente de la UIA y titular de Copal, Daniel Funes de Rioja, en declaraciones radiales a CNN aseguró que el sector está pidiendo que a las industrias se les abra la posibilidad de vacunar para mantener el proceso productivo. Esto, en línea con los otros esfuerzos que viene haciendo el sector en materia de protocolos y traslado de los trabajadores para garantizar la dotación de personal para mantener las fábricas funcionando.
El planteo se apoya también en la exigencia a muchas industrias de consumo masivo de producir al 100%, incluso si sus empleados no han sido calificados como esenciales.
La iniciativa no dista sustancialmente de la que un grupo de industriales le acercó a Bolsonaro en enero y que el presidente brasileño acompañó bajo el argumento de que, de esa forma, se garantizaba la continuidad de las fábricas sin que la vacunación de los trabajadores implicara costo alguno para el Estado. Al fin y al cabo, los privados se encargaban de importar las vacunas y aplicarlas.
En este sentido, los industriales también pidieron que se termine con la prohibición para los despidos, de modo de poder reemplazar los trabajadores licenciados e incorporar nueva mano de obra.
Otro de los temas abordado en el encuentro fue el impacto del proyecto de aumento de Ganancias a sociedades y que suma más presión tributaria sobre el sector fabril. En cambio, el diagnóstico de la UIA es que las políticas públicas deberían orientrarse a promover inversiones y la creación de empleo formal.
Además, le manifestaron a Kulfas su rechazo a los controles derivados del Sistema Informativo para la Implementación de Políticas de Reactivación Económica (SIPRE) que dispuso la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, que las obligaba a incurrir en procesos burocráticos y costos administrativos en momentos en los que las empresas necesitan optimizar los costos.
Sobre este punto, también remarcaron que la implementación del SIPRE genera superposiciones con herramientas ya existentes tales como las leyes de defensa de la competencia, de defensa del consumidor y de lealtad comercial. Además, se manifestó la preocupación por la intimación a las industrias para que produzcan al 100% de la capacidad instalada, sin contemplar las realidades y restricciones productivas ni tampoco los niveles reales de demanda externa e interna en el actual contexto.
Los otros tres temas que se trataron fueron los escenarios de impacto para cada sector de la reducción del Arancel Externo Común (AEC) para los socios del MERCOSUR. Y el problema de los cortes de rutas en Neuquén que están afectando gravemente la producción hidrocarburífera de Vaca Muerta, que está generando el bloqueo en las terminales del puerto Buenos Aires sobre las exportaciones.
«El ministro de Desarrollo Productivo y las autoridades UIA coincidieron en la importancia de continuar con los protocolos sanitarios que están garantizando la salud de los trabajadores y la dimensión sanitaria de la producción desde el inicio de la pandemia», destacó el comunicado de la UIA.
*LPO, NA