7 octubre, 2024
Según la Casa Rosada, esta reforma tiene como objetivo central la promoción del empleo registrado y la formalización de relaciones laborales, especialmente en sectores con altos índices de informalidad.
El Gobierno oficializó la reglamentación de la reforma laboral, contenida en la Ley Bases, a través del decreto que se publicará mañana en el Boletín Oficial. Esta reforma tiene como objetivo central la promoción del empleo registrado y la formalización de relaciones laborales, especialmente en sectores con altos índices de informalidad. Además, introduce mecanismos de flexibilización para facilitar la contratación de empleados independientes y crear alternativas para el cese laboral que beneficien tanto a los trabajadores como a los empleadores.
A continuación, se detallan los principales ejes de la reforma, en base a un documento queque difundió El Cronista.
La reglamentación del Título IV de la Ley Bases busca regularizar relaciones laborales que no fueron registradas correctamente o cuya información fue falseada (fecha o monto). Para ello, se implementa un «blanqueo» que ofrece beneficios tanto a las empresas como a los trabajadores. Entre los beneficios destacan:
El nuevo sistema de cese laboral tiene como principio básico la libertad de las partes. Tanto el trabajador como el empleador podrán acordar el sistema de cese que mejor se adapte a sus necesidades, reemplazando la indemnización contemplada en el artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo (Ley N° 20.744). Este sistema deberá acordarse dentro de un convenio colectivo y no podrá imponerse unilateralmente a ninguna de las partes.
Se destacan los siguientes puntos del nuevo sistema de cese:
El sistema de cese podrá implementarse en tres formatos:
El régimen para trabajadores independientes se implementará a través de la figura del monotributo. Los trabajadores deberán declarar ante la AFIP su condición de independientes y podrán tener hasta tres trabajadores colaboradores a su cargo. No se impondrán limitaciones por sector o monto, y los colaboradores podrán realizar actividades simultáneamente.
La reforma también busca simplificar el proceso de registración laboral. El contrato de trabajo se considerará registrado cuando el trabajador esté inscripto en los sistemas de la AFIP, independientemente de si lo hace la empresa usuaria o el empleador. Además, esta inscripción sustituirá la obligación del libro especial previsto en el artículo 52 de la Ley N° 20.744.
A partir de la Ley Bases, no se presumirá la existencia de un contrato laboral en la contratación de obras o servicios profesionales si se emiten los recibos o facturas correspondientes. Esta disposición se aplicará incluso si se emiten varias facturas o recibos.
El artículo 92 de la Ley Bases establece que la empresa principal podrá retener pagos destinados al Estado por deudas del sistema de la Seguridad Social que tengan contratistas o intermediarios. El decreto reglamenta el procedimiento y los límites bajo los cuales las empresas podrán realizar esas retenciones.
El periodo de prueba en el sistema laboral argentino se amplía de tres a seis meses, con la posibilidad de extenderlo hasta un año si así se acuerda mediante convenio colectivo.
Esta reforma laboral busca, según el Gobierno, «mejorar la formalización del trabajo en el país» y brindar un marco más flexible y previsible para las relaciones laborales, tanto en lo que respecta a los trabajadores dependientes como independientes. Su implementación será monitoreada por el Ministerio de Trabajo, con el objetivo de reducir el empleo informal y generar un entorno de mayor certidumbre para empleados y empleadores.
En declaraciones al canal de noticias TN, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, explicó el proceso detrás de la reciente reglamentación de la reforma laboral en Argentina, enfatizando que fue un «trabajo colectivo» que involucró a diversos actores, incluyendo a la ministra de Capital Humano, Sandra Petrovelo, y a equipos de la Jefatura de Gabinete, además de haber consultado a empresarios y la CGT. «Ha sido un proceso realmente amplio, no solo cuando se aprobó la ley bases, sino ahora que se está reglamentando», afirmó Sturzenegger.
El ministro también recordó las palabras del presidente Javier Milei al comienzo de este proceso. «El presidente nos dijo: ‘En Argentina siempre la historia ha sido o la reforma laboral para los empresarios, o la reforma laboral para los trabajadores. Si ustedes no pueden hacer una reforma laboral que sea buena al mismo tiempo para los empresarios y los trabajadores, no hagan nada'», reveló Sturzenegger.
En este sentido, Milei los instó a que la reforma fuera equitativa para ambas partes. Sturzenegger agregó: «Lo que nosotros decidimos fue crear un sistema que les permitiera a las partes diseñar la relación laboral libremente, con la única condición de que sea beneficioso tanto para el trabajador como para el empresario».
Un ejemplo que mencionó fue el de la Construcción, que logró reducir el litigio laboral mediante acuerdos entre las cámaras empresariales y los sindicatos. «En la industria de la construcción no hay despidos ni renuncias, lo que muestra cómo las partes lograron acordar un sistema que beneficia a ambas», dijo el ministro.
Además, Sturzenegger subrayó la libertad otorgada a las partes para decidir las condiciones de la reforma: «Si al trabajador no le gusta, se queda con la ley actual de indemnización por despido; si a la empresa no le gusta, tampoco entra».
En cuanto a los bloqueos laborales, Sturzenegger comentó que se decidió no reglamentar este aspecto de la reforma, lo que generó cierta controversia. «La ley del Congreso incorporó el bloqueo como una justa causa para el despido, pero lo que se dijo fue que se dejara como está para evitar conflictos», señaló. Según el ministro, esto otorga una «enorme seguridad jurídica», dado que la justicia será quien determine si un bloqueo es parcial o total.