ChubutLine.com "Periodismo Independiente" - Noticias, política y un análisis de la realidad diferente - directora@chubutline.com - redaccion@chubutline.com



2 septiembre, 2022

LA JUEZA CAPUCHETTI ABRIÓ EL CELULAR. COMENZARON A DECLARAR TESTIGOS

La Justicia imputó a Fernando André Sabag Montiel por intento de homicidio a Cristina: quién es y a que se dedica

La Justicia calificó el ataque contra la vida de Cristina Kirchner como un intento de homicidio agravado. La jueza decidió abrir el celular del acusado y comenzaron a declarar testigos. ¿Quién es este hombre, de 35 años, brasilero y radicado en Argentina, que intentó matar a la vicepresidenta? Vecinos y conocidos ofrecieron un temerario perfil del acusado.

La causa judicial por el intento de homicidio de la vicepresidenta de la Nación, Cristina Kirchner, comenzó a tener las primeras medidas de prueba para intentar determinar si más personas participaron del hecho, además de Fernando Andrés Sabag Montiel. La jueza caratuló el expediente como homicidio agravado en grado de tentativa.Fuentes judiciales informaron a que los testigos comenzaron a declarar ante la jueza federal María Eugenia Capuchetti y el fiscal federal Carlos Rívolo, a cargo de la investigación. Se trata de militantes que estaban ayer a la noche frente al domicilio de Cristina Kirchner en Juncal y Uruguay y que vieron cómo Sabag Montiel se acercó hasta la vicepresidenta y le gatilló en la cara.

También declararán los custodios de la Policía Federal a cargo de la seguridad de la vicepresidenta. Además la justicia abrirá el celular del acusado. Lo hará en el juzgado de Capuchetti. De allí puede surgir información de los últimos días y horas de Sabag Montiel, de 35 años, brasilero y radicado en Argentina.

En la causas intervienen también dos áreas especializadas de la Procuración General de la Nación. La Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI), que trabaja sobre delitos informáticos, y le ofrecieron a la vicepresidenta la intervención de la Dirección General de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas (DOVIC).

El detenido Fernando André Sabag Montiel, es hijo de un chileno y una argentina. Llegó al país en 2018, después de estar radicado en Uruguay, y actualmente vivía en la localidad de San Martín.

Esta persona detenida se encontraba a escasos metros de la ex presidenta y tras ser detectada por personal policial fue separada de los manifestantes e introducida en un patrullero. ¿Pero quién es? ¿Un loco suelto, un sicario a sueldo que sabía que no saldría vivo de un acto semejante, o un personaje que buscaba protagonismo? Todos estos interrogantes y más, serán fundamentales para dimensionar el suceso y evitar una cacería de brujas política o abrir más una grieta política y social a partir de un acto temerario y absolutamente repudiable contra la mandataria.

Fernando André Sabag Montiel, el atacante imputado por «tentativa de homicidio calificado» contra Cristina FK, tiene 35 años y nació en Brasil

 

‘Descolocó a todos y asustó al país’

El hecho se produjo en plena Recoleta y en la puerta de su casa. En el momento se produjo un tumulto y Cristina Kirchner fue alejada de esa zona, aunque siguió saludando al resto de los militantes como lo hizo cada día de esta semana al llegar desde el Senado.

El episodio ocurrió cerca de las 21, minutos después de que la ex jefa de Estado arribara a su casa ubicada en  la calle Juncal tras una jornada de sesión en la Cámara alta, donde la aguardaban centenares de manifestantes para expresarle su apoyo.

Mientras saluda a los presentes, el brazo del atacante se acercó a escasos centímetros del rostro de la ex presidenta y gatilló, pero el disparo no salió.

La ex presidenta observa la secuencia y atina a agachar la cabeza, mientras que personal de seguridad trata de separarla de la situación y los militantes también observan lo ocurrido.

El hecho, a través de un video de un manifestante

 

Allí comenzó el repudiado protagonismo de un sujeto que logró burlar la custodia y atentar contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que permanentemente muestra su cercanía con la gente, a veces sin dimensionar que en medio de muchas personas que la apoyan y la siguen, también existen otras tantas de peligrosidad para su seguridad.

Tras la detención de este sujeto que en apariencia actuaba sólo y de manera temeraria ya que se infiltrió en el nucleo de la militancia de la vicepresidenta para perpetrar el hecho, se pudo saber algunas cosas que fueron trascendiendo por las autoridades intervinientes y medios nacionales.

 

Quién es el imputado

Fernando André Sabag Montiel, el atacante imputado por «tentativa de homicidio calificado» por intentar asesinar a la vicepresidenta, es hijo de un chileno y una argentina.

La información fue obtenida tras el conocimiento de su partida de nacimiento en donde confirma que nació el 13 de enero de 1987 en Brasil.

Allí se puede notificar que su padre es Fernando Ernesto Montiel Araya nacido en Valparaíso, Chile y su mamá se llama Viviana Beatriz Sabag y nació en Buenos Aires, Argentina.

Según se pudo constatar, André Sabag llegó al país en 2018 luego de estar varios años en Uruguay y actualmente vivía en San Martin, provincia de Buenos Aires, desde hacía ocho meses.

Tras el conocimiento de su perfil se informó que el detenido tenía antecedentes desde 2021 por «portación ilegal de arma blanca» en un confuso episodio donde la Comisaría 15A lo interceptó por conducir un Chevrolet Prisma negro sin patente trasera y con los vidrios delanteros bajos.

La causa fue cerrada tiempo después por el fiscal al corroborar que el caso “no revestía entidad” para detener al hombre que no era ni más ni menos que el atacante que casi asesina a Cristina Kirchner frente a su domicilio en Recoleta.

WhatsApp_Image_2022-09-02_at_9.48.32_AM.jpeg

El acta de nacimiento del atacante

 

Respecto a su pertenencia política, Montiel fue visto en medios de comunicación manifestando su enojo por la designación de Sergio Massa como Ministro de Economía, así como también por la imagen de Cristina Kirchner y Javier Milei, afirma Infobae.

La Policía ya realizó un allanamiento en su domicilio de San Martín donde encontraron 100 proyectiles calibre 9mm. Es importante recordar que en el arma que apuntó a Cristina Kirckner había cinco balas en el cargador.

El domicilio allanado en San Martín.Montiel en momento que es trasladado. Allanaron además su domicilio en San Martín, donde ocupaba un monoambiente. Lo delató un vecino (Captura de video).

Qué dicen quienes lo conocen

Se lo señala como un tipo que busca protagonismo y es ‘raro’, marginal. Alquilaría tres remises y de eso y otras changas viviría, según el relato de allegados. Un vecino lo acusó incluso de vender drogas en el monoambiente que habitaba. Otro amigo de la infancia que se lo cruzó hace días, dijo que iba a comprar un arma a una villa e incluso le pidió que lo acompañara. Al parecer argumentando que ‘los peruanos’ (a los que alquilaría los remises) le debían dinero y quería presionarlos.

Montiel apareció en varias notas de medios nacionales en entrevistas callejeras y dió controvertidas opiniones sobre la política económica, los planes sociales y los cambios de gabinete, siempre ‘robando cámara’ resumieron los canales luego del suceso al reconocer al sujeto. Todos datos que exponene una personalidad controvertida.

Quienes frecuentaron a Fernando André Sabag Montiel años atrás no pudieron dejar de reaccionar. No todos los días un viejo conocido intenta matar de un tiro en la cara a la vicepresidenta de la Nación. Lo conocían por su viejo apodo, “Tedi”, un chico de Villa del Parque que vivía con su padre, Fernando, en su casa de la calle Terrada. Y en medio del caos, rememoraron.

Diez años atrás, “Tedi” Sabag Montiel frecuentaba el circuito de bandas death metal, una variante extrema del heavy, más oscura, revulsiva, acelerada, con seguidores particularmente pacíficos y agradables, también seguía a grupos del sonido nü metal. No era músico, no tenía una banda, aunque acumulaba miles de dólares en guitarras y amplificadores en su habitación, con marcas como Ampeg, Marshall, Orange y Mesa Boogie. Seguía a ciertas bandas locales, también era devoto del grupo hungaro Ektomorf.

“Tedi” Sabag Montiel frecuentaba el circuito de bandas death metal, pero en los últimos tiempos recaló en un grupo evangelico, según raltó un conocido

 

En ese circuito, también entre sus conocidos, “Tedi” se volvía una presencia incómoda. Les relataba sus supuestas experiencias paranormales con lágrimas en los ojos, les mostraba la piel de gallina al hablar. Insistía con viajar a Uruguay, decía que allí la pasarían genial, que tenía departamento y dólares. En los recitales, se paraba en medio de las ruedas frenéticas de pogo, en medio del torbellino, con la mirada perdida.

“Me daba escalofríos”, dice alguien que lo conoció y lo veía con asiduidad.

Su actividad en redes y sus ‘locuras’ recurrentes

Sus posteos con mensajes insensatos en redes sociales eran constantes, casi como sus cambios de imagen y estilo, entre camisas y anillos, o, más recientemente, con tatuajes con símbolos tomados de la estética del nazismo esotérico, algo que sorprendió a sus viejos conocidos, porque nadie lo tenía por nazi. “Era un freak, pero mal”, recuerda otro habitué.

Su salud mental era un punto en la conversación sobre él. Si tenía un diagnóstico psiquiátrico, nadie podía precisarlo. “Tedi” presentaba un solo frente, o diferentes variaciones de su frente, una historia contada a través de selfies, en un entorno que aumentaba su distancia cada vez más. Su madre, Viviana, que se dedicaba a vender ropa y vivía con él en la calle Terrada, falleció en 2017, a causa de problemas respiratorios. “Tedi” se presentó como su único heredero en el Juzgado Civil N°48. Iba por su patrimonio, un viejo Peugeot.

 

Sabag Montiel, en uno de sus tantos cambios de look.

 

Tenía varias costumbres, dicen quienes lo conocieron. Solía proponer negocios que eran “un delirio”, o esperar a músicos famosos a la salida de hoteles. En marzo de este año, posteó un video donde intentaba una selfie con Taylor Hawkins, baterista de Foo Fighters, una semana antes de su muerte. “Vídeo con Taylor Hawkings de Foo Fighters una semana antes de morir, me siento la parca muy fuerte conocer a alguien antes de su muerte”, posteó en Instagram.

A fines de agosto, “Tedi” tuvo sus cinco minutos de polémica en Crónica TV. Acompañaba a una joven que decía ser su novia, mientras vendía algodones de azúcar. La joven decía que ya no cobraba planes sociales, que no estaba a favor, porque era “fomentar la vagancia”. En Facebook, en su muro, relató sus enfrentamientos con “las mafias de coperos peruanos”, vendedores de algodón de azúcar sumamente territoriales. Habló de sus peleas a golpe de puño con ellos.

El opinador. Montiel fue entrevistado en los últimos tiempos por medios. Opinando de planes sociales y otros temas de política social, polemizó en redes por discriminatorio. 

 

“La plata no se hace mágicamente, sino laburando”, dijo. “No avalamos la discriminación y justificamos a los extranjeros que trabajan se levantan temprano para atender una verdulería y por eso tiene 4×4 y camionetas porque trabajan y se lo merecen pero no estamos de acuerdo con gente que viene de afuera a ocupar una villa y vivir gratis y a vivir de planes sin trabajar y venden droga, habría que extraditarlos”, completó luego.

Experto en política económica y ‘hurtador de cámara’. «Un marginal en busca de protagonismo», para un viejo conocido

 

“Tedi” nunca tuvo un trabajo en blanco. “Hacía tramoyas”, recuerda un viejo contacto suyo, sin saber definir los ingresos de Sabag Montiel. En los últimos tiempos, se había mudado a un monoambiente que alquilaba en San Martín, sobre la calle Uriburu. Tenía una excelente relación con el propietario, sin conflictos. Según vecinos, “Tedi” era dueño de tres taxis que trabajaban en la Ciudad.

 

El arma incautada a Sabag Montiel en Recoleta.

 

Hubo un episodio en particular. El 17 de marzo de 2021, según confirmaron fuentes policiales, un policía porteño de la Comisaría 15A relató cómo interceptó un Chevrolet Prisma negro en su recorrido, sin patente trasera y con los vidrios delanteros bajos. Allí se presentó Sabag Montiel, que dijo ser empleado de una empresa telefónica. Explicó que la patente le faltaba debido a un choque ocurrido días antes. Decidió abrir el auto. Al abrir una de las puertas, se cayó del vehículo un cuchillo de 35 centímetros de largo.

Así, se le labró un acta contravencional con intervención de la Fiscalía N°8 del fuero y se le secuestró el arma, un hombre con un cuchillo largo en su auto.

La causa fue archivada poco después. La fiscalía afirmó que el caso “no revestía entidad”. Pero andar con un cuchillo largo e intentar un magnicidio son dos cosas distintas.

Sabag Montiel, al momento del intento de homicidio

 

Detenido e incomunicado

El destino inmediato de Sabag Montiel queda por definirse, con estudios de abogados que tocan el timbre en su domicilio de Villa del Parque en busca de representarlo, y una causa a cargo de la jueza federal María Eugenia Capuchetti. Tras su detención, fue trasladado a una celda de la dependencia de la calle Cavia de la PFA. El arma que llevó a Juncal y Uruguay, con la que le gatilló a Cristina Fernández de Kirchner en la cara, una pistola Bersa calibre .380 con el número parcialmente limado, es otro punto en la historia.

Tenía balas reales, cinco en total, en un cargador con capacidad para 15 y otra en la recámara. Qué ocurrió, por qué no salieron los tiros, es algo que deberá esclarecer una pericia balística: una sospecha de expertos indica que el acusado no accionó la corredera antes de gatillar.

Una primera versión que proviene también de altas fuentes en organismos de seguridad afirma que la pistola era ‘apta para el disparo’.

Masivo apoyo a Cristina

Tras el hecho, el presidente dispuso por cadena nacional decretar un feriado nacional a fin de procesar el conmocionante hecho. Organizaciones sociales y politicias en todo el país manifiestan durante todo el día su apoyo a través de movilizaciones masivas.

El hecho fue repudiado por todo el arco político y el presidente Alberto Fernández ayer en cadena nacional. “Estamos obligados a recuperar la convivencia democrática que se ha quebrado por el discurso del odio que se ha esparcido desde diferentes espacios políticos, judiciales y mediáticos de la sociedad argentina. Podemos disentir, podemos tener profundos desacuerdos, pero en una sociedad democrática los discursos que promueven el odio no pueden tener lugar porque engendran violencia y no hay ninguna posibilidad de que la violencia conviva con la democracia”, dijo el jefe de Estado y declaró para hoy feriado nacional.

En tanto, esta mañana la jueza Capuchetti y el fiscal Rívolo estuvieron en la esquina de la casa de Cristina Kirchner

Capuchetti llegó a las 7:20, habló con los integrantes de la Policía Federal que trabajan en la zona desde anoche, y se retiró. No subió al departamento de Cristina Kirchner ni tuvo contacto con la Vicepresidenta. A las 7:45 ya había regresado junto a los fiscales a Comodoro Py para continuar trabajando en el caso, informaron fuentes judiciales.

La zona amaneció hoy con una importante custodia de la Policía Federal Argentina (PFA) tras el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner. Además, mientras se llevan a cabo las pericias de rigor, se estableció un perímetro con una faja de color naranja con la leyenda “escena del crimen, no pasar”, la cual restringe el acceso a la zona donde se encuentra el departamento en el que reside la vicepresidenta.

Cristina se mantenía en su casa y aseguraban que se encontraba bien, tranquila y procesando lo sucedido. Un hecho que además se produce en momentos altamente inciertos en el país, con fuerte interna de la alianza gobernante, con incertidumbres de quiebre interno, abrupta caída de imágen en lo que va de 2022, y particularmente un mes altamente estresante y conflictivo para la vicepresidenta, tras haber sido acusada por corrupción en la obra pública, afrontando un pedido de 12 años de cárcel por parte de la Fiscalía. Juicio que deberá desentrañarse antes de fin de año.