14 julio, 2021
El panorama es desolador tanto para la Comarca Andina como para las empresas de turismo. Al golpe que viene significando la pandemia, se sumó ahora el capricho climático que aún está privando de nieve al popular centro es esquí de Chubut.
Uno de los puntos fuertes de las localidades de la cordillera es la nieve que las cubre en invierno y permite explotar turísticamente esas fechas.
Sin embargo, su ausencia en el Oeste de Chubut y parte de Río Negro y Neuquén, provocó la cancelación de viajes programados principalmente para esquiar en los principales centros de actividades de montaña en pleno período de vacaciones de invierno.
“Estaba entusiasmado por las salidas que teníamos hacia La Hoya, pero hemos tenido que suspender esos viajes porque no hay nieve”, confesó Guillermo Schneider, Presidente de la Asociación Patagónica de Agencias de Viajes y Turismo.
En La Hoya, el centro de esquí más importante de Chubut y quizás el mayor fuerte turístico de la provincia en invierno, no hay nieve.
Con este escenario, decenas de salidas turísticas hacia la zona debieron ser canceladas por la falta de la vital precipitación de copos de nieve que permitieran realizar esquí. “Incluso no permiten el ascenso, hemos tenido que demorar estas salidas por tierra a Esquel”, detalló el empresario.
Como una complejidad más a la falta de nieve y por ende de fluidez de visitantes, la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA) que reúne a los controladores aéreos de todo el país se encuentra realizando una medida de fuerza en pos de un incremento salarial buscado desde comienzos de año. La reprogramación de vuelos por los paros aéreos durante julio es otro de los temas que impacta en aquellos turistas que evaluaban una escapada a la nieve, que además se está haciendo rogar.
Atepsa comenzó con un paro que afectó a todos los vuelos de cabotaje del país el pasado 12 de Julio (día del inicio oficial de vacaciones de invierno en el grueso de las provincias argentinas) y se extenderá hasta fines de julio.
Los próximos paros están anunciados precisamente para este jueves 15 y el sábado 17 de julio, de 10 a 12 horas y de 16 a 18. Estas retenciones de servicios que están obligando a reprogramar vuelos, afectan a su vez reservas hoteleras y en muchos casos combinaciones de transportes o vuelos.
En relación al escenario cordillerano, la escasa cantidad de vuelos hacia el sur, el impacto de la medida ha sido menor. “La actividad aérea es tan escasa que este tema de la huelga no se está sintiendo”, cerró Schneider. Pese a que muchos viajeros optan por achicar distancia hasta la costa vía aérea, y en esos casos si se ven seriamente afectados.
