1 mayo, 2023
Kylian Mbappé está presionando al PSG para que retiren la oferta de renovación a Messi con el fin de que el argentino se vaya en junio y deje un hueco libre para el fichaje de Antoine Griezmann, al que quiere tener a su lado como en la selección de Francia.
En mitad del escándalo por el viaje de Messi a Arabia Saudí que provocó que los dueños qataríes del PSG le sancionaran con dos semanas de empleo y sueldo, Kylian Mbappé, que se siente ahora con todo el poder en el vestuario del Parque de los Príncipes, ha pedido al club parisino que retire su oferta de renovación a Messi para el argentino se marche a final de temporada.
Mbappé nunca entendió el fichaje de Messi porque él prefería que el PSG contratara a un jugador con más trabajo y menos foco –su preferido era Lewandowski– y ahora ha visto la ocasión de librarse de la sombra de Leo y comenzar a moldear el equipo a su antojo tal como le prometieron (y no cumplieron) los dueños qataríes del club cuando consiguieron que traicionara al Real Madrid y renovara en París.
El siguiente paso sería el fichaje de Griezmann, con quien tiene una conexión especial y al que considera clave en la reconstrucción del PSG. Mbappé ve en el jugador del Atlético a un futbolista capaz de ayudarle a liderar el ataque parisino sin cuestionar su liderazgo ni anteponer su ego al del colectivo. Su relación es extraordinaria ya que llevan coincidiendo en la selección más de seis años.
Si Mbappé consigue que el PSG no renueve a Messi y contrate en su lugar a Griezmann, el delantero cumplirá de mejor gana el año de contrato que le resta e incluso podría llegar a ampliar esa temporada extra hasta 2025. Además de Griezmann, el club parisino está trabajando en el fichaje de Harry Kane, pero la llegada del delantero del Tottenham, que termina contrato en junio de 2024, debería estar vinculada a la marcha de Neymar, que no tiene ninguna intención de irse de París si no le garantizan sus 37 millones netos al año. Y eso son palabras mayores.