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1 julio, 2023

Julio viene confuso políticamente en Madryn

Por Juana de Arco*

No por trillado deja de ser real y hasta un poco divertido. Julio es un mes literalmente ‘al medio’ de un año electoralmente tan incierto que puede ser para cualquiera. De allí el nerviosismo al momento de trazar la hoja de ruta inmediata de quienes quieren llegar al sillón de Belgrano.

En política nunca está dicha la última palabra y Madryn parece ser la ciudad donde más chispazos saldrán de la fricción electoral ultrapolarizada que nos espera en este turno en Chubut. Por varias razones que emergen a la vista: en principio porque es el principal bastión del sastrismo, que hoy por hoy es la única construcción de grupo dentro de la oferta electoral populista. Todo lo demás está partido en mil pedazos o son candidaturas personales. Por caso, la del mismo Juan Pablo Luque, que se encargó de dejar en claro que no es el ahijado del ‘Tano’ Di Pierro, ni el heredero de Linares, ni es igual a Arcioni, pero tampoco a Alberto y mucho menos parecido a Massa, y tampoco es kirchnerista de la primera hora, pero un poco peronista es. Una soledad autosuficiente que permite ‘manos libres’ a la hora de la campaña, pero que requerirá negociar con todos y cada uno de esos ‘ismos’ para poder gobernar.

No es extraño que este viernes el principal acto mas o menos masivo se lo ofreció la UOCRA precisamente en Madryn, paters familias contratista mediante, la ‘contrucción’ que analogó Luque en su discurso en el Golfo se sintió por un momento muy real. Y la verdad es que el calor de los bombos y ensayados cánticos fueron como una ‘comida en familia’ para quienes sufren la sensación de horfandad de los armados de mesa chica.

Mateo puso el pan en la mesa y Juan Pablo lo partió. Fue simbólico, muy, pero de eso se trata el idioma de los gestos en política. Entender el cruce de miradas de los mellizos y los pliegues en los rostros adustos de una mesa sindical donde se morfa, pero sobre todo se mastica, es -al fin y al cabo- una materia de posgrado.

La pregunta del millón es si ¿le alcanzará la UOCRA, Camioneros y otros para ‘empardar’ Petroleros? Mientras Luque brindaba con Malbec y llenaba de palabras un escenario que escucha poco y come mas, en Comodoro el ‘Loma’ Avila le ató una paritaria al 107% a los petrokas, y fidelizó directamente con champán a unos 7.500 trabajadores más sus respectivas familias.

Juntos, en la esquina más ‘tanguera’ del Golfo

En Madryn, tranquilo con este pad productivo que resultó el ‘Loma’ electoralmente hablando, ‘Nacho’ Torres festejó la atadura petrolera, pero se concentró en el entrevero local que se armó con la caída de la candidatura de Vanesa Peruzzotti como compañera de Daniel Laudonio por ‘falta de localía’, según tres organismos intervinientes (TEM, TEP y STJ).

El rápido reemplazo por Silvia Bazterrica implicó un ‘pase el que sigue’ pragmático, como requería la circunstancia, porque permite seguir en carrera y con más sed de jugar a fondo. Lo dijo Laudonio al plantarse debajo del cartel que le pintaron, y donde le sobremontaron otro del oficialismo en la esquina de 25 de Mayo y Albarracín: “esto nos fortalece como equipo para seguir trabajando”, estampó el tenaz.

Pese a las ironías que filtraron por las redes los muchachos del tablón sobre que ‘cambiaste una ferrari por un twingo’, en Juntos aseguran que lo que vale es el ‘piloto’. Y eso es muy cierto en términos de candidaturas. El vice en todo caso acompaña la figura, pero la definición -sea por triunfo o derrota- finalmente la aguanta el cabeza de lista.

Los permanentes obstáculos que vino soportando Laudonio, primero en una interna contra un candidato extrapartidario empleado del sastrismo (encima apoyado por Torres), y ahora con la candidatura de su compañera de fórmula por ‘flojedad de papeles’ (algo que que raramente podían ignorar los armadores radicales), si bien le restó tiempo de campaña y alguna ‘mala sangre’, lo puso en escena por varios días y lo favoreció en posicionamiento según algunos sondeos sectoriales, por puro efecto de la empatía que genera la batalla burocrática electoral nomás.

‘Nacho’ Torres rápido de reflejos, se agarró de esa parte para arengar: habló de ‘proscripción’ de Peruzzotti y de la necesida de terminar con «los dueños de Madryn», refieriéndose al sastrismo.

“Sabemos que hay mucho nerviosismo” y que esa sensación provoca que “en vez de salir con una campaña propositiva deciden vandalizar los carteles, querer proscribir, utilizar el Tribunal Electoral Municipal para bajar a nuestra candidata con un objetivo inicial de bajar toda la lista. Estas no son cosas normales. Todo lo engorroso de esta elección tiene que ver con embarrar la cancha”, sintetizó Torres.

Y si bien gran parte de verdad hay, también es cierto que recién ahora la propia estructura electoral que él lidera, comenzó a jugar un poco más fuerte en Madryn y valorar el paso al frente que dió el empresario. No es extraño, ya que Torres se identifica con Rodriguez Larreta, y Laudonio con Macri, y entre ellos hay diferencias reconocidas de enfoques locales. Por eso es que lo que queda claro, es que la postulación de Laudonio es uno de los desafíos internos más importantes para Nacho. Tal vez más para adentro de Juntos, que para el propio sastrismo en este turno.

Precisamente porque el madrynense fue el generador del PRO y quien lo impulsó visionariamente en sus primeros pasos políticos dentro de una estructura que en pocos años terminó ganando las Legislativas, y ahora permite pelear palmo a palmo la gobernación. Esa ‘paternidad’ es un tema no resuelto en términos psicopartidarios, y pervivirá hasta que se den las grandes definiciones freudanas. Si el 30 de Julio Nacho Torres es el próximo Gobernador de Chubut, no podrá desconocer la construcción partidaria provincial, sus orígenes y el peso de Madryn en todo eso, gane o pierda Laudonio. Y si no lo es, deberá reevaluar las fuerzas internas para rearmar otra intentona en algún momento, y allí la base de reconstrucción también requerirá reconocer lo que ha sido exitoso y los trajo hasta acá de la mano del madrynense.

Para el empresario, que arracó ‘de atrás’ la carrera electoral por la intendencia en una interna amañada por donde se la mire, por ahora, seguir en carrera luego de la entrada a boxes, es todo ganancia mientras siga en pista. Incluso el cambio de coequiper hasta fue bien reevaluado. Porque ‘si Bazterrica no sonríe ni siquiera en campaña, imáginense presidiendo el Legislativo y revisando la anterior gestión’, reflexionan desde adentro quienes conocen el minucioso trabajo de Silvia en la CAMAD y su experiencia en gestión. Por otra parte Peruzzotti está claro que no soltará rienda, podrá acompañar desde un cargo ejecutivo si se llega, y es probable que aspire a convertirse de una u otra forma en la candida titular a la intendencia en una próxima contienda, a partir del reconocimiento conseguido en esta lamentada inhabilitación circunstancial.  Todo en función de la tenacidad, que es el slogan no reconocido de campaña, pero el fetiche del armado.

 

El Sastrismo, una construcción a medida

Mientras tanto en ‘La más Linda’, Gustavo Sastre no anda con enredo electoral de polleras y va derecho al grano. No se tomó licencia, y el laburo diario es lo mejor que considera como carta de presentación, aunque en la mesa chica no faltan los análisis de tablero permanente. Tras 12 años de gobierno (8 de Ricardo) y casi 4 propios, el mellizo puede andar a la sombra de una construcción sólida en término de alianzas, gestiones, negocios y avances que han ido prosperando con el tiempo y la maña del tándem.

Gustavo sabe que conduce la ciudad más ‘mostrable’ de Chubut, y se recuesta en la construcción partidaria que lograron con Ricardo, que además ya amplió el circulo de operaciones a gran parte de la Provincia. Si su hermano no es viceintendente nuevamente el 30 de Julio próximo, en 2027 podría ser Gobernador. Y si lo és, el mismo podría ser Gobernador. Ser dos, definitivamente multiplica las posibilidades, por regla de tres simples.

Pero para ello, es clave sostener el poder territorial y escribir con buena letra la historia de los próximos cuatro años, y para eso, primero hay que ganar el 30.

Hasta ahora venía casi solo por la recta final, pero al encontrarse con el experimentado piloto en la ochava, las cosas cambiaron. Enfrente se le paró uno que también habla con el poder real, que es el económico, y de igual a igual. Ni la benemérita industria, ni la pesca, ni el Ninja, ni Cristo, ni la patria contratista, ni el negocio inmobiliario jugarán a pleno sin poner alguna fichita en color y línea, para graficarlo en términos fulleros.

Los mellizos lo saben, y si hay algo que los caracteriza es la capacidad de aprendizaje y asimiliación. La historia parece cosa de cláustros, pero es bien de barro: cuando Ricardo ganó por poco la intendencia sin casi apoyo del dasnevismo y muy por las suyas, hubo uno que perdió a lo grande y precisamente por descuidar Madryn. Eliceche minimizó en 2011 a los contrincantes y ungió a su vice ‘El cartero’ Ricardo Lázaro, que terminó perdiendo por 76 votos contra Sastre. Perder la ciudad que él mismo gobernaba. le significó lisa y llanamente perder la Gobernación, y guardar para siempre el ego en el baúl de las posibilidades, para reconvertirse en gestor de los ganadores. Ese espejo es en el que no se quiere mirar ninguno de los mellizos, que han forjado un verdadero bastión local, y ya comenzaron a formar el semillero ganador que pueda jugar tras de sí.

En ese marco, la jugada más inteligente que realizó Gustavo es sumar como vice a Martín Ebene, un cuadro que apunta a ser la continuidad del sastrismo por buen tiempo, si la tendencia sigue altamente favorable como hasta ahora.

Así las cosas, las elecciones en Madryn traerá novedades inmediatas, pero también a lago plazo y no sólo en las estructuras partidarias, sino en la construcción de poder provincial de uno y otro lado. Algo que quedó en stand by tras la partida del último caudillo. ¿Qué tipo de construcción será?, dependerá mucho de estas entretelas de referentes, pero mucho más de la sabiduría popular en las urnas para interpretar dos inasibles, como son el pasado y el futuro.

Como decía Gasperi, «Un político mira las próximas elecciones, pero un estadista mira las próximas generaciones», (a lo que podríamos agregar que un electorado ya mira apenas su propio cuaternario destino).

 

*Soy Juana de Arco, amiga de ‘El Martillo’,… y ceniza de tantos