Hidrógeno Verde: los anuncios de Nación sobre inversiones en Patagonia quedaron ‘en la nada’

Hace un año Nación anunció inversiones por 8400 millones de dólares de la firma australiana Fortescue para producir hidrógeno verde en la Patagonia, pero todo quedó en un presunto delirio político. El referente era Agustín Pichot y el ideólogo Marcelo Kloster, ex asesor de Kulfas, que hoy pasó a trabajar para la organización que vende ese tipo de proyectos.

Hidrógeno Verde: los anuncios de Nación sobre inversiones en Patagonia quedaron ‘en la nada’

En noviembre del 2021 Alberto Fernández anunció triunfal «la mayor inversión del siglo» en energías limpias en la Argentina. Lo hizo en la cumbre contra el cambio climático en Glasgow. Eran tiempos en que su popularidad alcanzaba picos máximos y los grandes medios que viajaron invitados a la cumbre por la Presidencia, se plegaron entusiastas al anuncio. Hubo quienes desde el sector energético dudaron del anuncio liderado por el ex capitán de los Pumas, Agustín Pichot, porque «estaba cruzado de inconsistencias».

Se prometía el desembolso de 8400 millones de dólares que la firma australiana Fortescue desembolsaría para producir hidrógeno verde en la Patagonia. Ahora que pasó mas de un año, se confirma que efectivamente se trató de otro anunció mediático sin asidero en la realidad, según un reporte de LPO.

«El hidrógeno verde es uno de los combustibles del futuro y nos llena de orgullo que sea la Argentina uno de los países que esté a la vanguardia de la transición ecológica, en poco tiempo nuestro país podrá convertirse en uno de los proveedores mundiales de este combustible que va a permitir reducir drásticamente las emisiones de carbono en el mundo», celebró Alberto en Glasgow.

Lo acompañaban el canciller Santiago Cafiero, el entonces ministro de Desarrollo Productivo Matías Kulfas, que tenía cerca suyo a un personaje clave en esta historia: su asesor Marcelo Kloster. Participaron también los directivos de Fortescue. Su presidente Andrew Forrest Presiden, la CEO Julie Shuttleworth y el mencionado Pichot, presidente para Latinoamérica.

La iniciativa fue tan sorpresiva como la irrupción de Pichot como una suerte de middle man ecológico. Incluso en ese momento se trazó un paralelismo con Gastón Gaudio, otro deportista consagrado que amagó con traer inversiones multimillonarias de la península arábiga durante el gobierno de Macri.

El problema es que Marcelo Kloster, asesor de Matías Kulfas en el Ministerio de Desarrollo Productivo y principal impulsor del acuerdo con Fortescue, luego de dejar el gobierno cruzó del otro lado del mostrador y hoy es el coordinador general de la Green Hydrogen Organisation, usina del lobby ante distintos Estados para el desarrollo del hidrógeno verde.

La novedad de ahora es que se conocen nuevos detalles que arrojan más sombras sobre la iniciativa que impulsó personalmente Kulfas, a través de Kloster, entonces asesor del ministerio de Desarrollo Productivo y director de Impsa.

El problema es que Kloster cruzó del otro lado del mostrador y hoy es el coordinador general de la Green Hydrogen Organisation, usina del lobby ante distintos gobiernos para el desarrollo del hidrógeno verde.

Marcelo Kloster ahora trabaja para Green Hydrogen Organisation, usina del lobby mundial de hidrógeno verde 

De hecho Kloster fue el principal vocero del fallido anuncio. Sin embargo, en una de las varias entrevistas que concedió para promocionar el negocio, tuvo que reconocer la falta de precisiones. «No esta definido del todo que rubro será el principal demandante de este combustible». Para los especialistas, se trata de una tecnología muy polémica que para producirse apela a electricidad, que hoy por hoy se produce mayoritariamente con medios tradicionales que consumen carbono.

La polémica incluso sacude a Europa que intentó avanzar en una agenda verde con eje en el hidrógeno y se chocó de frente con la realidad de sus altísimos costos y dudosos beneficios, al punto que Francia está logrando imponer su opción por la más rentable energía nuclear.

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Los empresarios del sector, incluso algunos afines al oficialismo, afirmaron en su momento a LPO que la cifra de inversión anunciada por el Gobierno les resultaba inverosímil. «Argentina tiene negocios mucho más rentables que no consiguen financiamiento y eso que se necesita menos de un tercio del monto anunciado en esta oportunidad para su desarrollo», expresó a LPO un empresario del sector.

No existe ningún país del mundo que tenga una parte mínimamente significativa de su matriz energética en base a hidrógeno verde. De hecho, la planta más grande del planeta está ubicada en Austria y entrega apenas 16 megas de electricidad.

El hidrógeno verde es el mecanismo mediante el cual entra en combustión con el oxigeno, y da calor, lo que resulta en energía mas agua. Sin embargo, el hidrógeno no puede considerarse una fuente de energía. La fuente de energía es el petróleo o el viento o el sol, que se utilizan para generar electricidad, que se utiliza en la producción de hidrógeno. La energía eléctrica que se requiere para activar esta tecnología es muy cara. Es por eso que estos desarrollos son promovidos en todos los casos con subsidios estatales. En Noruega, país que cuenta con el mayor parte automotor eléctrico, cada móvil le cuesta al estado nórdico 8100 dólares por año.

No existe ningún país del mundo que tenga una parte mínimamente significativa de su matriz energética en base a hidrógeno verde. De hecho, la planta más grande del planeta está ubicada en Austria y entrega apenas 16 megas de electricidad. Nada, en términos de un país.

*LPO/ by Luciana Glezer