2 noviembre, 2021
La iniciativa, que va a generar por lo menos 15.000 puestos de trabajo directos y entre 40.000 y 50.000 empleos indirectos, se realizará desde cero e implicará la construcción de cientos de molinos eólicos, de una planta electrolizadora para la producción de hidrógeno y un puerto de aguas profundas para su exportación.
La empresa australiana Fortescue, que anunció una inversión en el país por US$ 8.400 para producir hidrógeno verde, desarrollará su proyecto en la localidad rionegrina de Sierra Grande y en una primera etapa productiva alcanzará -hacia 2028- una capacidad que duplicará lo asignado por el Plan Renovar, que se puso en marcha en julio de 2016.
De acuerdo al anuncio realizado este lunes, el proyecto va a generar por lo menos 15.000 puestos de trabajo directos y entre 40.000 y 50.000 empleos indirectos.
El proyecto es 100% exportador y completamente verde, tanto en lo que concierne al producto como al proceso productivo.
Su capacidad energética equivalente inicial permitirá cubrir el consumo eléctrico de 1,6 millones de hogares que destinará por completo a la exportación.
Toda la iniciativa se realizará desde cero en Río Negro, e implicará la construcción de cientos de molinos eólicos, de una planta electrolizadora para la producción de hidrógeno y un puerto de aguas profundas para su exportación, lo que lo convertirá en uno de los cinco proyectos más importantes que la empresa australiana tiene en el mundo, sobre un total de 150 que se encuentran en la actualidad en estudio.
Su desarrollo es escalable en los próximos años, por lo que se destaca que en una primera instancia de producción la potencia eólica que se generará a partir de las inversiones anunciadas generaría unos 4.000 MW eólicos, lo que casi duplica lo asignado por el Plan Renovar.
La etapa piloto, para confirmar las capacidades previstas, contempla una inversión estimada en US$1.200 millones, que producirá unas 35.000 toneladas de hidrógeno verde, energía equivalente para satisfacer a 250 mil hogares, lo que comenzará en 2022 y finalizará en 2024.
De esta manera, se espera convertir a Río Negro en un polo mundial exportador de hidrógeno verde en 2030, con una capacidad de producción de 2,2 millones de toneladas anuales, lo que cubriría una producción energética equivalente a casi un 10% de la energía eléctrica consumida por Alemania en un año.
La iniciativa que se enmarca dentro del Plan de Desarrollo Productivo Verde y está en línea con el proyecto de Ley para la Promoción de la Movilidad Sustentable.
El hidrógeno verde es una de las energías del futuro, y es fundamental para descarbonizar la estructura productiva, con un impacto muy positivo para luchar contra el cambio climático.
Es una de las energías más prometedoras, con un gran potencial para reducir el impacto ambiental del transporte pesado (por ejemplo, camiones y buques) y de larga distancia.
También es fundamental para mitigar los gases de efecto invernadero que emiten las industrias que consumen mucha energía, tales como el acero, el cemento, el papel o la de fertilizantes.
La prospección que inició la empresa se basa en analizar cantidad y calidad de vientos, fuente energética principal para la producción, y se inició a partir de un acuerdo firmado junto al Ministerio de Desarrollo Productivo y la Nación y el Gobierno de la Provincia de Río Negro.