17 julio, 2024
Ya sea con la firma de acuerdos con los propietarios de las tierras o avanzando en los estudios de impacto ambiental, la posibilidad concretar la producción de hidrógeno es clara en Santa Cruz. ¿Qué está faltando?
El hidrógeno forma parte de cada rincón del universo, es el combustible con la máxima eficiencia energética por masa y cuando se utiliza no emite CO2. Pero no está presente “en soledad”, sino que debe ser “extraído” de los otros elementos con los que está enlazado, como, por ejemplo, del oxígeno en la molécula del agua. Para ello se requiere una fuente energética. El origen de la misma es la que da la calidad, en términos de transición energética.
Es que no todos los métodos de extracción son “limpios” y con emisiones “casi nulas” de CO2. Cuanto más limpia sea extracción, mejor calidad ambiental presentará dicho hidrógeno. Santa Cruz tiene un enorme potencial en el más buscado del mundo: el hidrógeno verde, pero también está bien posicionada en lo que hace a hidrógeno azul (a base del gas).
A partir de la calidad ambiental, según la AIE (Agencia Internacional de la Energía), el único método de extracción con un bajo impacto es producir la electrólisis del agua con la energía obtenida de fuentes renovables, como la eólica y la solar. Así se obtiene el denominado hidrógeno low carbon o “verde”.
El mundo camina hacia la transición energética, a partir de los compromisos globales que la mayoría de los países firmaron ante el cambio climático. Sin embargo, si bien Europa y algunos países de Latinoamérica han dado pasos agigantados, la producción de hidrógeno verde, por ahora, representa un porcentaje mínimo de la producción mundial.
Ya en 2022, el interés en la Patagonia como líder de la transición energética era claro. Desde la definición del golfo San Jorge como la “Vaca Muerta del viento” hasta los primeros inversores con propuestas concretas en varias provincias, esa apuesta quedó clara. Sin embargo, pasó el tiempo y los proyectos aún no se han concretado.
En el caso de Santa Cruz, provincia reconocida por la calidad de sus vientos, al igual que Chubut, “proyectos hay muchos, hay muchas empresas y consultoras que están trabajando, que están haciendo estudios de impacto ambiental, estudios de instalación de torres de medición de vientos”, indicó a Santa Cruz Produce el ministro de Energía de la provincia, Jaime Álvarez.
Reveló que “también hay consultoras que han trabajado con los propietarios de los establecimientos agropecuarios y ya han realizado acuerdos para la reserva de superficie, con el fin de la instalación de parques eólicos”, señaló el funcionario. Marcó que toda la zona centro “tiene proyectos en carpeta” para la instalación de parques, ya sea para “la generación de energía eléctrica o para la producción de hidrógeno verde”.
En particular, Santa Cruz Produce pudo confirmar que una empresa, tal como lo dijo el ministro, se encuentra en la etapa de acuerdos con superficiarios, donde a futuro pretende instalar molinos eólicos y desarrollar una planta de producción de hidrógeno.
¿De qué depende que los proyectos se transformen en inversiones terminadas? En primer lugar, de que exista un marco regulatorio adecuado. Hace dos años está pendiente que el Congreso avance en la llamada Ley de Hidrógeno.
En el reciente Foro de Transición Energético e Hidrógeno Verde, que se realizó en Comodoro Rivadavia, la diputada por Chubut, Ana Clara Romero, admitió que en la actualidad hay tres proyectos que fijan un régimen de promoción para el hidrógeno verde, de tres partidos distintos. “Además está la Ley 26.123 de 2006, pero que está próxima a vencerse sin haber logrado su objetivo”. Y reconoció que aprobar el marco regulatorio es determinante.
De hecho, en dicho foro la subsecretaria de Transición y Planeamiento Energético de la Nación, Mariela Beljansky, destacó el compromiso del Gobierno nacional con establecer un marco normativo que estimule la inversión y el desarrollo del hidrógeno verde que sea “claro y flexible”, aunque no fijó fecha para el mismo.
Además de los proyectos que buscan producir hidrógeno, Santa Cruz puede liderar la generación de energía limpia y atraer inversiones en ese sentido. “Hay posibilidad de generación con parques eólicos, de generación de macromoléculas fotovoltaicas, de generación solar, etc.”, detalló Jaime Álvarez sobre el escenario energético nacional.
Y remarcó que más allá de que en su momento se indicó que la capacidad de transporte (interconectado) está al borde del colapso, para Álvarez “todavía hay capacidad de transporte en el interconectado, si bien no es infinita, existe”.
En el mundo, hay más de 350 proyectos de hidrógeno que están en marcha actualmente. De ellos unos 120 fueron anunciados en 2021. Esto implica que miles de millones de dólares están siendo invertidos en hidrógeno verde a nivel global.
De ahí las chances que se abren para Argentina, la Patagonia y Santa Cruz en particular. El mundo camina hacia la transición energética. El país tiene posibilidades de diversificar su matriz energética. El hidrógeno será una pieza fundamental en la transición energética y un imperativo frente al cambio climático, pero para ello debe sancionarse un marco de regulación y promoción del hidrógeno verde, de lo contrario, todo quedará en el papel de las proyecciones.
*LOA/ by Irene Stur