25 octubre, 2020
La opción «Apruebo» al cambio de la Constitución se impuso este domingo de manera contundente en Chile y lograba un 77,85% de los votos, escrutadas más del 45% de las mesas de todo el país, por lo que ya era irreversible el inicio del proceso para cambiar la actual carta magna, impuesta en 1980 durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-90).
El «Apruebo» obtenía 2.496.143 votos, mientras la opción «Rechazo» lograba 710.378, en una elección que tuvo mayor nivel de participación que la media en el país desde que el voto es voluntario.
Miles de chilenos salieron esta misma noche a festejar masivamente en la Plaza Italia (lugar de encuentro y celebraciones de la capital chilena) el rotundo triunfo que permitirá iniciar el largo proceso para enterrar este legado político de Pinochet y que estuvo en el centro de los reclamos del estallido social iniciado en octubre de 2019.
Los festejos se repetían en las calles de todo el país, con vecinos celebrando desde los balcones de sus departamentos, en las puertas de sus casas y en autos con banderas y bocinazos.
El presidente Sebastián Piñera, acompañado de todo su gabinete, reconoció en rueda de prensa en el Palacio de La Moneda el triunfo del «Apruebo» y de la Convención Constitucional (que se conformará en un 100% por ciudadanos electos para este propósito con composición paritaria entre hombres y mujeres) para redactar la nueva Constitución.
«Este Plebiscito no es el fin. Es el comienzo de un camino, que juntos deberemos recorrer para acordar una Nueva Constitución para Chile. Hasta ahora la Constitución nos ha dividido. A partir de hoy, todos debemos colaborar para que la Nueva Constitución sea el gran marco de unidad, de estabilidad y de futuro, y se constituya en la Casa de Todos y en la Ley Fundamental de la República, respetada y legitimada por todos los chilenos», sostuvo el presidente acompañado de todo el gabinete de ministros.
El resultado da la largada a un proceso constituyente. En primer término el país vivirá una nueva elección el domingo 11 de abril de 2021 para escoger a sus constituyentes, que tendrán hasta 12 meses para presentarle al país una nueva Constitución.
En la discusión del texto, se necesitarán obligatoriamente dos tercios de los votos de los constituyentes para aprobar cada artículo que se discuta en la Convención.
La nueva Constitución deberá pasar por un nuevo plebiscito ratificatorio, en el que los chilenos deberán aprobar o rechazar este nuevo texto, que se espera se realice en 2022 y con esto el país podrá dejar atrás la Constitución de 1980, implementado durante la dictadura de Augusto Pinochet.
*Télam