22 mayo, 2021
Estas tres mujeres feministas están «cambiando la Argentina», según The New York Times
El diario estadounidense asegura en un artículo que elogia a tres funcionarias del gobierno de Alberto Fernández, que están «reestructurando la sociedad»
Si bien el presidente Alberto Fernández puede ser el portavoz de una agenda feminista, detrás de escena, «tres mujeres que se refieren a sí mismas como feministas y activistas están impulsando el cambio».
Así comienza el artículo del medio estadounidense The New York Times titulado «Estas tres feministas están cambiando Argentina desde dentro», en donde elogia a las funcionarias del actual Gobierno.
Se trata de Elizabeth Gómez Alcorta, primera ministra de Mujer, Género y Diversidad del país; Vilma Ibarra, la principal asesora legal del presidente que tiene la autoridad para redactar proyectos de ley y decretos y Mercedes D’Alessandro, primera directora nacional de economía, igualdad y género del país dentro del Ministerio de Economía, y autora de «Economía feminista».
«Pagarle a las mujeres por su trabajo, no remunerado, en casa. Repartiendo comida a personas transgénero. Construyendo guarderías. Poco a poco, estas mujeres, nombradas por el Presidente para ocupar altos cargos, están reestructurando la sociedad», dicen los periodistas Alisha Haridasani y Daniel Politi.
«En su discurso anual ante el Congreso en marzo, el presidente Alberto Fernández hizo algo que pocos o ninguno de sus predecesores había hecho antes: dedicó gran parte del discurso, de 90 minutos, a los ‘derechos de las mujeres’», señala.
Y agregan: «Se comprometió a ayudar a las madres a volver a trabajar construyendo más centros preescolares y dijo que ‘la lucha contra la violencia de género’ debería ser una prioridad para todos en Argentina».
Durante el artículo, el que plasma parte de la entrevista que tuvo con las tres funcionarias, Elizabeth dijo que la mayoría de las medidas que tomaron se enmarcan en tres grupos: «El primero se centra en la violencia de género. Además de mejorar los canales de comunicación existentes y coordinarnos con el poder judicial, también trabajamos para crear nuevos canales de comunicación a través de WhatsApp y el correo electrónico. El segundo grupo se centra en las emergencias alimentarias, especialmente en lo que respecta al colectivo trans. Y el tercero se centra en los ingresos familiares de emergencia, que llegaron a nueve millones de personas en Argentina, una gran parte de las cuales eran mujeres y personas en situación de alta vulnerabilidad».
En este contexto, Mercedes D’Alessandro, añadió: «El subsidio familiar de emergencia se hizo en el entendido de que muchas mujeres trabajan en el sector informal. Entonces, cuando presentamos la medida de apoyo, nos enfocamos específicamente en las mujeres en posiciones precarias. También les dimos a las mujeres acceso a este subsidio de emergencia si trabajan en casa, las llamadas amas de casa. Esta era una forma de reconocer el trabajo no remunerado y no remunerado».
Y agrega: «Para todos nosotros es una prioridad. Entendemos que el trabajo que realizan las mujeres en casa, incluido el de cuidados, es un pilar fundamental de la vida social y de la economía. A menudo, cuando se utiliza la palabra `trabajador´, se piensa en alguien que cobra un sueldo».
En relación con los femicidios, uno de los problemas que más preocupación le genera a las autoridades, porque más allá de las medidas que se tomaron, las estadísticas muestran que ese tipo de crímenes no cesa y el número de hechos aumentó aún más en la cuarentena obligatoria.
Cuando le preguntan cómo responden a los críticos que dicen que centrarse en las mujeres y la igualdad de género no debería ser una prioridad cuando nos enfrentamos a una crisis económica y una pandemia, Elizabeth contó que «desde el primer día de su gestión, el presidente Fernández dijo que iba a empezar desde abajo, con los más desfavorecidos, y no hay duda de que siempre son las mujeres las que están peor en todas las sociedades; especialmente mujeres pobres».
«Puede haber críticas, pero ¿por dónde quieres empezar? ¿Y a quién quiere apoyar con sus políticas? El presidente ha dejado muy claro que esto es especialmente importante no solo institucionalmente, sino también, si lo miras en términos de inversión, cada peso que se ha invertido en los presupuestos para estas áreas ayuda a que nuestras sociedades sean más justas», añadió.
Mientras que Mercedes señaló: «Cuando estalló la pandemia en Argentina y entró en vigor el cierre, la actividad económica de hombres y mujeres cayó un 10 por ciento. Cuando las cosas empezaron a abrirse, los hombres recuperaron sus puestos de trabajo mucho más rápido que las mujeres. Hoy, según los datos que tenemos para el tercer trimestre de 2020, vemos que la actividad económica de las mujeres refleja su actividad económica de 2002, ¡así que retrocedimos dos décadas! No podemos detener la agenda en este momento; al contrario, debemos impulsarla y seguir adelante».
*iP, NYT