30 mayo, 2022
Juntos por el Cambio y el interbloque Federal reunirían una ajustada mayoría en el plenario de comisiones, lo cual permitiría llevar el proyecto al recinto.
Este miércoles la oposición buscará unificar posiciones y dictamen sobre Boleta Única
A contrarreloj, la oposición acelera las negociaciones para consensuar un solo dictamen sobre Boleta Única de papel. Si lo logra, tendrá las firmas suficientes para tener, este mismo miércoles, dictamen de mayoría y así estar en condiciones de llevar el debate al recinto de la Cámara de Diputados.
En la votación, la oposición también cuenta con las de ganar, en principio: en la votación para emplazar al oficialismo a que de tratamiento a las comisiones encargadas de abordar los proyectos de Boleta Única había reunido 132 votos (tres más de los necesarios), y a excepción del voto de la diputada Romina del Plá, que había acompañado esa moción, el resto de los avales estará garantizado si todos ellos asisten a la sesión. También sumarían al puntano Claudio Poggi, que estuvo de viaje en aquella sesión.
Durante el fin de semana hubo intensos intercambios para arrimar posiciones, y también será clave el rol de las secretarías parlamentarias para asegurarse que esta vez nadie falte a la cita.
El primer paso para la oposición es unificar el dictamen, un proceso que está encaminado pero que aún tiene cabos sueltos por atar.
Lo principal tiene que ver con el diseño gráfico de la boleta única, un aspecto que reviste extrema sensibilidad, ya que un pequeño detalle puede sesgar completamente el voto del elector.
Una discusión, según pudo saber NA, es qué hacer cuando por ejemplo algunas coaliciones presentan varias listas en las PASO, y otras solamente una nómina.
En este escenario, el problema es que habría que destinar mayor espacio en la papeleta a unos en desmedro de otros, o bien achicar sustancialmente la tipografía y las fotografías de las ofertas «multi-lista», a riesgo de traer problemas de legibilidad.
En principio hay acuerdo para que tanto en la boleta de senadores como la de Diputados estén las fotografías de los dos primeros candidatos de la lista, lo cual resuelve el temor de organizaciones feministas, que advertían con razón que la mayoría de los cabezas de lista suelen ser varones.
Si solo se incluyera la fotografía del primer candidato a diputado nacional, habría un solapamiento de la representación femenina.
Con dos fotografías por lista, el tema de la equidad de género se resolvería debido a que la ley de paridad de género obliga a presentar hombres y mujeres de forma alternada.
Una vez atados los acuerdos respecto del diseño gráfico, llegará el momento de contar los porotos en las comisiones.
Y allí la oposición haría valer la mínima diferencia numérica a su favor en la composición de esos tres cuerpos (Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto).
Haciendo doble click en cada una de ellas, se aprecia que en Asuntos Constitucionales el Frente de Todos y Juntos por el Cambio tienen 17 sillas cada uno, y el restante lugar es el de la diputada Graciela Camaño (Interbloque Federal), que desequilibraría a favor de la Boleta Única ya que uno de los proyectos en vista tiene a ella como autora principal.
En la comisión de Justicia ocurre exactamente lo mismo: las dos principales coaliciones se reparten 15 lugares cada uno, y el restante pertenece a la veterana diputada bonaerense del peronismo disidente.
En cambio, en Presupuesto el oficialismo podría obtener una firma más que sus adversarios, ya que de los 49 miembros del cuerpo, 24 son propios y obtendría una rúbrica más de manos del Frente de la Concordia Misionero. Juntos por el Cambio tiene allí 23 legisladores y sumaría también la firma del representante de Córdoba Federal, llegando a 24 avales.
Las fuerzas políticas más chicas no tienen representación en ninguna de las tres comisiones, a raíz del sistema D’Hont que distribuye los cargos proporcionalmente al tamaño de cada una de las bancadas.
*NA/PC