3 julio, 2021
DE 2020 A LA FECHA EL CRECIMIENTO DE CIBERDELITOS FUE EXPONENCIAL EN TODO EL PAÍS
La resolución, que sería aprobada la próxima semana, exigirá a los bancos a realizar chequeos previos con el cliente antes del otorgamiento de préstamos.
El directorio del Banco Central tiene todo listo para aprobar una resolución para evitar los fraudes en el home banking» Específicamente en las operaciones de otorgamiento de créditos personales que los bancos tienen «pre aprobados» para sus clientes, y que en los últimos meses fueron protagonistas de estafas millonarias.
La lupa está puesta en ese tipo de transacciones ya que fueron las predilectas por los estafadores en los últimos meses. Básicamente, consiguen las claves de clientes desprevenidos, y una vez dentro de la cuenta bancaria, los delincuentes aprovechan para sacar créditos pre aprobados (a un solo click), desviar el dinero instantáneamente a distintas cuentas propias, y dejarles la deuda a los estafados.
Una de las medidas del BCRA -que sería aprobada la próxima semana- consiste en que los bancos estarán obligados a chequeos previos con el cliente antes del otorgamiento del préstamo.
La idea es poner una «identificación positiva» del cliente, una especie de «segunda capa» de seguridad, que se suma a las ya habituales: usuario, clave, token o la tarjeta de coordenadas.
La resolución exigirá a los bancos a realizar chequeos previos con el cliente antes del otorgamiento de préstamos
En una primera instancia, los bancos pondrán controles sobre la modificación de los datos de sus clientes. Ante el pedido de un crédito, lo primero que se verificará es si el cliente cambió sus datos en el «home banking».
En un segundo paso, los bancos estarán obligados a enviarle una notificación a los clientes con la aprobación del crédito personal que (supuestamente) acaba de sacar.
Los bancos tienen resistencia a este punto ya que quieren que se acorten los tiempos. Un borrador de la medida oficial determinaba que una vez que el cliente apruebe la operación, el crédito estará disponible a las 72 horas. En las entidades financieras reclaman que ese plazo sea inmediato.
También habrá medidas de control sobre las transferencias bancarias, con el objetivo de poner el foco en aquellas operaciones que se realizan desde una misma cuenta (la del cliente) hacia otras en un lapso muy corto de tiempo.
Otra de las dificultades con estas estafas refiere a que el IP (identificación) de la computadora desde que extrae el dinero haciéndose pasar por el cliente permanece oculta, no se puede identificar.
«Hay que encontrar el equilibrio entre lo automático y fácil (lo que todos queremos como clientes), y la lentitud y la comprobación de identidad», razona el director de un banco líder.
Según datos de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci), el fraude y estafa en cuentas bancarias, como el robo de claves de acceso a homebanking o de datos de tarjetas de crédito, fue uno de los delitos que más creció el año pasado: pasaron de 22 casos denunciados en 2019 a 641 en 2020.
Ese crecimiento exponencial -adjudicado a la pandemia y a la utilización casi exclusiva del home banking- se agravó en la primera parte de 2021, con múltiples denuncias de fraudes con créditos personales «pre aprobados». Según el BCRA, desde que explotó la pandemia, unas cuatro millones de personas empezaron a operar a través del canal digital.
Ese agravamiento obligó a Miguel Pesce -titular del BCRA- y a Sabina Frederic -ministra de Seguridad- a buscar una solución rápida.
Desde el Central y también desde los bancos aseguran que los sistemas informáticos son seguros. Que prácticamente no hay casos de hackeos a los bancos. «Los sistemas son seguros, los usuarios del sistema financiero tienen que tener la absoluta certeza de que los bancos son seguros y todas las plataformas digitales son seguras», dice otro financista.
«Lo que se han detectado son engaños generados con ingeniería social. Personas que entregan bajo engaño las credenciales de sus cuentas y a partir de ahí se dispara el robo de las cuentas», agrega.
Por eso mismo, las medidas del BCRA que se pondrán en marcha apuntan a esa validación de las autorizaciones a la hora de sacar un crédito exprés.
Hoy en día, cuando un cliente es víctima de una estafa, lo primero que tiene que hacer es la denuncia ante su banco. Y, si no obtiene una respuesta positiva, debe insistir con Defensa del Consumidor. Y también ante el Banco Central, que intercede ante la entidad financiera.
La cuestión de las estafas con los créditos de fácil acceso también llegó al Congreso. La senadora nacional Pilatti Vergara (Frente de Todos) presentó un proyecto de ley que haga obligatorios los mecanismos de doble o triple validación, con el objetivo de erradicar los casos de «phishing».
Según la iniciativa, ese tipo de préstamo exprés «es una decisión unilateral de la entidad bancaria, poniéndolo a disposición de los clientes con tan sólo un click, sin ningún tipo de consulta, aceptación de condiciones por parte de ellos, o información de los riesgos inherentes».
Otro proyecto, en la misma dirección, fue presentado por la senadora oficialista Norma Durango. Esa iniciativa propone que, antes de otorgar el préstamo, el banco debe realizar una comunicación telefónica con el cliente.
Ahora es cuestión de que la próxima semana, el BCRA defina los detalles y ponga en vigencia una herramienta que cuide a los clientes bancarios de las malas artes de los estafadores.