15 marzo, 2024
Se conoció la sentencia de imposición de pena. Sergio Adrián Catrileo, declarado autor penalmente respondable del homicidio de Fernando Villarroel por un jurado popular, fue condenado a la pena de 14 años de prisión. La Fiscalía había pedido 16 años y la Defensa 8.
El homicio de Fernando Villarroel ocurrido el domingo 23 de octubre por la noche conmocionó al barrio Matadero, que este martes en la audiencia de apertura de investigación contra el imputado por el crimen reclamó justicia.
Según la acusación de la fiscalía, el hecho investigado comenzó aproximadamente a las 22.10 en una vivienda de calle Maestros Patagónicos donde se encontraba la víctima -que no vivía allí-, junto a cinco amigos. Por ahí pasó caminando un grupo de tres hombres, entre ellas el imputado que portaba un cuchillo y otro que llevaba un arma de fuego.
Comenzaron a arrojar piedras contra el domicilio y a efectuar disparos. Ante esto, las personas que estaban en el interior salieron al patio y les pidieron que se detengan ya que había nenes en el lugar. En ese momento, el ahora condenado le asestó una puñalada a Fernando Villarroel, con intención de causar la muerte, provocándole una herida profunda en el tórax que generó su deceso a las 22.30, en el Hospital Zonal de Esquel.
La sentencia fue bien recibida por la familia que participó de todas las instancias del proceso. El juez José Luis Ennis, tomó como agravante la particular gravedad del hecho. Siguiendo el criterio del jurado, descartó la existencia de algún motivo relevante que justifique aunque fuera en parte, la conducta del imputado. “Por el contrario, se acreditó en el juicio que -como poluta la Fiscalía- fue la conducta agresiva desplegada por el propio imputado y de quienes lo acompañaban la que determinó la ocurrencia de los hechos en el marco de una disputa a la que Villarroel era ajeno por completo”, sostuvo el juez.
También tuvo por agravante la absoluta indefensión de Villarroel, quien estaba desprevenido y no pudo ejercer ningún tipo de defensa contra un agresor armado. Sumó como agravante además, el tipo de arma empleada y el modo en que la utilizó, dejando a la víctima sin posibilidad de sobrevivir.
También como agravante el daño causado por la pérdida en el sustento material y afectivo, para su grupo familiar. Mencionó la especial situación de su pareja que quedó sola a cargo de los hijos menores de ambos, “con el costo personal que eso conlleva”.
Como atenuantes valoró la corta edad del condenado, la que determina una inmadurez propia de esa edad, potenciada por el consumo de alcohol, la falta de antecedentes penales previos y el pedido de disculpas que dirigió en la audiencia a la familia de la víctima.
Finalmente el juez fijó la pena en catorce años de prisión con imposición de las costas del proceso.
*MPF