Éramos pocos y reapareció Cimadevilla

Como si de vez en cuando se fuera a la estratósfera y luego descendiera después de un tiempo y de buenas a primera se enterara de lo que sucede en la latitud en la que le tocó encarnar esta vida, el radical Mario Cimadevilla, vuelve a lanzar esporádicas reflexiones mediáticas pero sin aportar demasiado a la solución ni al entendimiento.

Con estilo rompedor nato, recientemente lanzó una de sus introversiones en formato nota de opinión por un diario del Valle denomonada “Patéticas discusiones” (Ver https://www.elchubut.com.ar/nota/2020-6-11-22-5-0-pateticas-discusiones ) , donde cuestiona el rol de casi todo el arco político, incluso su propio entorno de referencia, con evidente embate con sus pares radicales y actuales legisladores.

Directamente los acusa de entrar en discusiones estériles (“pelotudas” sic), de “levanta-manos” y de ser serviles a la agenda que marca el oficialismo que controla el debate público.

“Nuestros legisladores se han autoasignado el triste rol de ser sólo ´pedigüeños´ que mendigan aportes y salvatajes. Nada más que eso ante la pavorosa inexistencia de partidos políticos con sólido ideario (y definidas estructuras) capaces de formar opinión”, estampa Cimadevilla en clara desaprobación de la sintonía que los diputados nacionales radicales estarían teniendo con el Ejecutivo Provincial, ayudando a resolver la crisis de Chubut.

Para los miradores finos esta intentaría ser otra marcada de cancha para el novato Ignacio Torres y para su principal contrincante dentro del sello, Gustavo Menna. Típica metodología internista además, del centenario partido.

Pero quienes conocen un poco más al referente valletano creen que seguramente alguna instancia de negociación superior estaría evaluando Cimadevilla que no termina de traducir puertas afuera, y para lo que se requeriría un posicionamiento más duro de sus pares, lo que no estaría consiguiendo.

Hay quienes no descartan que tenga serias aspiraciones a las sobrevendidas candidaturas al Superior Tribunal de Justicia. Sus íntimos dicen que Cimadevilla, que ya está lejos de aspirar a algún cargo electivo de esos que nunca fueron su fuerte por falta de sintonía popular, no le faltarían avales para tratar de arrimar en la corte provincial o porque no presionar al partido para su postulación en 2021 otra vez para visitar el Senado.

De hecho, ya fue senador nacional entre 2009 y 2015, fue miembro del Consejo de la Magistratura de la Nación entre 2010 y 2014 y fue miembro suplente en la Comisión Bicameral Especial Parlamento del Mercosur en el Congreso, además de extitular de la Unidad AMIA de donde lo eyectó el propio Macri.

Todos esos avales y el hecho que también figura en Wikipedia, serían consideraciones suficientes para pensar en el regreso, dicen los que entienden que en política, los embates verborrágicos generalistas son síntoma de negociación evidente. Habrá que ver como sigue la película radical.