El impacto electoral del escándalo por el viaje en yate del ahora ex jefe de Gabinete bonaerense Martín Insaurralde todavía es incierto pero sigue siendo motivo de preocupación para Unión por la Patria, que según una reciente encuesta estaría perdiendo votos para el 22 de octubre en nada menos que la estratégica provincia de Buenos Aires.
Si bien esa merma sería en una proporción pequeña, por debajo del 4%, la caída puede ser significativa debido a la diferencia de apenas dos puntos porcentuales que se dio en las PASO de agosto entre Javier Milei, Patricia Bullrich y el oficialista Sergio Massa.
La encuesta fue realizada por la consultora CB en el ámbito de la provincia de Buenos Aires el 3 de octubre sobre 1.181 casos, mediante cuestionario online. Uno de los datos más salientes del estudio fue que mostró un impacto importante sobre los votantes «indecisos», precisamente a donde apunta Massa con mayor interés.
Pero además, el sondeo indicó que el 89,2% de los consultados dijo estar informado sobre el escándalo y que una parte importante cree que Kicillof, al contrario de lo que afirmó, «estaba al tanto del viaje».
Si bien en su pelea por la reelección el gobernador quedó mejor parado que Massa en las primarias, ese tramo de la encuesta sugiere que el escándalo que obligó a renunciar a Insaurralde -puesto en el Gobierno bonaerense por Cristina y Máximo Kirchner- podría generarle también a él algún costo.
Ante la pregunta sobre si el escándalo de Insaurralde «podría influir en su decisión de a quién votar en las próximas elecciones generales de octubre», el 3,8% de los encuestados por CB Consultora en la provincia de Buenos Aires respondió que «iba a votar candidatos de Unión por la Patria y ahora no lo haré».
Según la encuesta, el escándalo suma indignación y puede impactar sobre todo en los indecisos
Si bien es un número bajo, sobre todo si se observa que en el mismo tramo de la encuesta el 43,6% respondió que de todas formas «no pensaba votar a Unión por la Patria», cobra otro valor frente al resultado que dejaron las PASO, donde la alianza oficialista quedó un punto por debajo de Juntos por el Cambio y dos por detrás de La Libertad Avanza.
En tanto, el 8,9% respondió que «estaba indeciso» y ahora votará «en contra del oficialismo». Este podría ser el mayor costo para Unión por la Patria tras la difusión de las fotos que mostraron a Insaurralde con la mediática Sofía Clerici a bordo de un lujoso yate en el Mar Mediterráneo.
Y es que la cantera de votantes a las que apuntan tanto Massa como Bullrich y Milei es precisamente la de los «indecisos» y, entre ellos, a las 10 millones de personas que decidieron no participar en las PASO de agosto.
A esto se suma que, frente a la consulta sobre cómo los afecta este tipo de escándalos que involucran a la clase política de cara a octubre, el 40,1% dijo que lo «motivan más para ir a votar» en octubre, contra el 30,8% que respondió no sentirse afectado en relación a los comicios y el 24,4% que señaló que estas cosas le «quitan las ganas de ir a votar».
Buenos Aires: la provincia clave y los números a los que se aferra el oficialismo
El otro punto que podría preocupar al comando de campaña es que la encuesta se llevó a cabo precisamente en la provincia de Buenos Aires, que contiene al 37% del padrón nacional y es clave para Massa y para todo el peronismo/kirchnerismo.
No obstante, el sondeo dejó otros números a los que pueden aferrarse tanto Massa como Kicillof. Uno es que el 34,8% de los consultados respondió que tenía pensado votar a Unión por la Patria y que el escándalo de Insaurralde no cambia su idea.
Tras el alto ausentismo de las PASO, la mayoría dice que el escándalo los motiva más para ir a votar en octubre
Otro número alentador para el oficialista es el de la imagen positiva de Kicillof, que con 39,4% sigue por arriba de sus adversarios Carolina Píparo (La Libertad Avanza) con 25,4% y Néstor Grindetti (Juntos por el Cambio) con 22,9%.
Además, según la encuesta Kicillof mantiene a pesar del escándalo sobre su ex jefe de Gabinete la mayor intención de voto con 36% mientras que Grindetti y Píparo aparecen casi empatados con 22,9% y 21,7%, respectivamente.
El peso de Lomas de Zamora en AMBA: ¿riego para la campaña nacional de Massa?
Sin embargo, son los números más duros los que complican al oficialismo en la Provincia. Insaurralde tuvo que bajar su candidatura a concejal de Lomas de Zamora de la lista que encabeza Federico Otermín, su mano derecha y actual presidente de la Cámara de Diputados bonaerense donde explotó días antes otro escándalo: el de Julio «Chocolate» Rigau y las 48 tarjetas de débito con las que fue arrestado cuando trataba de extraer más de un millón de pesos de un cajero.
Así, los dos casos que mayor impacto generaron en los últimos días rozan al partido bonaerense de Lomas de Zamora, el cuarto con mayor cantidad de votantes después de La Matanza, La Plata y General Pueyrredón, con 494.501 personas habilitadas para elegir presidente.
Una derrota en ese municipio podría complicar al oficialismo no solo en la carrera provincial sino también nacional. En las PASO de agosto la lista de Otermín, con Insaurralde como primer concejal, ganó cómodamente con el 41% de los votos mientras que Juntos por el Cambio se ubicó segundo con el 28% que sumaron entre Guillermo Viñuales (ganador de la interna) y Nicolás Bari.
Si bien es un resultado difícil de revertir, los dos escándalos más resonantes de las últimas semanas afectan a los únicos referentes políticos de peso que tiene Unión por la Patria en un distrito clave de la Provincia y, por lo tanto, hay un riesgo latente para la campaña de Massa.
*iP