Ayer el Polo Obrero reclamó una reunión con la ministra de Economía y anticipó que comenzarán hoy un acampe en la Plaza de Mayo.
Participaron Esteban “Gringo” Castro, Ángel Adolfo Borello, Cristián Javier Romo, Alejandro Garfagnini, Beatriz Fleischman, María Mireyra Esteves, Laura Pugliese, Alejandro Abregú y Luciano Álvarez.
Se recalientan los reclamos
Por su parte desde los gremios también comenzó la presón. La UOM, el SUTNA, Comercio, legislativos, estatales bonaerenses y los del transporte, son algunos de los que están en conflicto salarial o piden que se reabran sus paritarias por la inflación.
Abel Furlán derrotó a Antonio Calo en la conducción de la UOM y se endurecieron posturas.NA
La UOM, principal gremio industrial del país, viene exhibiendo un perfil más combativo desde que el kirchnerista Abel Furlán reemplazó al «albertista» Antonio Caló y eso se nota en su actual revisión paritaria que está cerca de comenzar a entrar en conflicto por la falta de acuerdo con los empresarios del sector.
Los metalúrgicos acaban de declararse en estado de «alerta y movilización» luego de que este martes fracasara la reunión en la que pensaban cerrar un acuerdo para adelantar un tramo del aumento y alcanzar así un 65%.
Por su parte, otro gremio industrial del sector del neumático, el SUTNA, lleva un extenso conflicto de casi dos meses con reiterados paros en las plantas que amenazaban con el normal abastecimiento del producto, también por falta de acuerdo para cerrar la suba salarial.
En la provincia de Buenos Aires, docentes, estatales, médicos y judiciales están pidiendo a la gestión de Axel Kicillof que adelante las cuotas de los convenios vigentes o la revisión, ante el aumento de la inflación de los últimos meses.
El Sindicato de Empleados de Comercio, liderado por Armando Cavalieri, analiza pedir un anticipo de aumentos para lograr un ajuste superior al 80% por el deterioro salarial en las últimas semanas y la percepción desde ese sector de que la inflación podría terminar siendo del 100%, según indicaron.
En tanto, trabajadores de la legislativos reclamaron en estos días que se acelere la discusión salarial de este año, y apuntaron a Cristina Kirchner y Sergio Massa, titulares de la cámara alta y baja, respectivamente, ya que denuncian que la paritaria sectorial quedó desactualizada por la fuerte inflación.
Los gremios del sector del transporte se encuentran analizando medidas de fuerza, tanto los agrupados en la moyanista CATT, como los de la UGATT y en ambos sectores enfrentados hablan de «la devaluación encubierta que sufren los salarios» y la «fuerte disconformidad ante la crisis política que transita el gobierno de coalición del Frente de Todos».
Por su parte, la CGT aún debe definir si llevará adelante un paro o movilización contra la inflación, aunque con los empresarios «formadores de precios» como destino del pedido, ya que la central mantiene de todos modos su alineamiento con el Gobierno.
Además, referentes sindicales comenzaron a plantear en público sus críticas contra la recién asumida Batakis, entre ellos el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, quien apenas la funcionaria asumió el cargo habló de «apoyo» de la CGT pero en las últimas horas ya comenzó a cuestionarla tras sus anuncios de «equilibrio fiscal». «Batakis es la continuidad de Guzmán, cumplirá el acuerdo con el FMI», sostuvo el hijo de Hugo Moyano, quien además lamentó que los anuncios de la ministra fueron «para los mercados y los bancos», y no para «el pueblo».
También criticaron a Batakis en las últimas horas otros dirigentes gremiales con cercanía al oficialismo, como Hugo Yasky, Pablo Micheli y Hugo Godoy.
Un escenario muy complejo que Alberto Fernández deberá pilotear más que con los sectores propios, afirman los analistas.